CAPÍTULO 2.

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Capítulo 2

Arte.

KAELA.

Un mes después.

Soy una estudiante de segundo año de la universidad nacional de bellas artes.

Desde pequeña me interesó mucho el dibujo, los cuadros, las esculturas y todo lo que tenga que ver con el arte.

Entonces, cuando terminé la secundaria decidí seguir la carrera. Y no me arrepiento, pero como toda carrera universitaria, tiene su dificultad y es muy agotante la verdad.

Lo que más me motiva a seguir es que me gustaría vivir de ello y mantenerme por mi misma. Si bien, mi familia está muy bien posicionada económicamente y no necesito tener algún trabajo para subsistir, yo quiero algún día mantener mis lujos con mi propio esfuerzo. Por lo general, muchos que me ven a simple vista, creen que soy una rubia superficial hija de papi y mamá italiana llena de lujos. Bueno, lo último sí es cierto, pero me interesa poco lo material que casi ni aprovecho la fortuna ni beneficios que me proporciona mi apellido. "Uno de los más importantes de Italia" por cierto.

Me gustaría decir que eso no es así, pero estaría mintiendo. Es muy estresante llamar siempre la atención, a donde la familia Cavalcanti asista, es algo que me agobia. Al ser una de los apellidos más importantes de allí, somos bastante conocidos por la población. Este es uno de los motivos por el cual nos vinimos a vivir a Australia, los cuatro, aunque mi padre tiene que pasar mucho tiempo allá en italia, debido a que debe mantener sus empresas y cuidar la "reputación" del apellido, así que mi padre va y viene de italia a Australia todas las semanas.

Debe ser muy agotante.

Me fijo a ambos lados antes de cruzar la calle y me dirijo hacia la hermosa galería que me cautivó hace unos meses y que no he podido dejar de apreciar al menos una vez a la semana.

Soy una simple aspirante al arte, que desea un día dar a conocer su arte al mundo.

Y como dije antes: me gustaría vivir del arte, por eso me propuse que cuando logre pintar algo que me deslumbre. Ese sería lo que algún día logré presentar ante el mundo.

Muestro mi pase y me dirijo a la sección VIP. Hoy presentan una serie de obras anónimas que según Lou(mi amiga la cual compartimos el mismo gusto por el arte) dice que dichas obras están cautivando al público...

-¡Hey!, Ka-la voz de mi amiga me sobresalta.

Volteo y me encuentro con la morena.

Ludovica es baja, morena y su cabello está conformado por miles de largos y abultados rizos. Su rostro es acorde a una joven de veinticuatro años. Tiene labios gruesos y largas pestañas. Y cabe destacar que es la alegre y extrovertida de las dos.

-Hola-le doy un beso en la mejilla.

-Siempre tan puntual, querida.

-¿Ya empezó?

-Sí, hace una hora.

-¡¿Qué?!

-Se, en medio hora cierra-me toma de la muñeca-¡apurate!

-¡Ya va!

Entramos a la sala de exhibición e inmediatamente mis ojos brillan ante las majestuosas obras que estoy presenciando.

Hay una en especial que cautiva mi atención. Una que es cubierta con un fondo negro, un negro tan oscuro asi como la oscuridad. Sobre ese mismo se encuentra una figura femenina, la cual sostiene con sus manos una manzana tan roja como el carmesí de la sangre, esta se encuentra tapando el sexo desnudo de la figura. Más arriba, sobre su vientre se encuentra una cicatriz, me hago la idea de que se trata de una cicatriz de cesárea, tal vez. Alrededor de su estómago yacen pequeñas marcas blancas, rosas y moradas, además de algún que otro vello sobre toda esa piel sedosa de tez color marfil. La obra representa una figura femenina real, sin filtro. No es una figura hegemónica y es lo que más cautiva. Mis dedos cosquillean por la necesidad de rozarlos sobre tan hermosa obra de arte.

El arte de la tentación [En edición]Where stories live. Discover now