Soy una Ardilla en el Apocalipsis

Capitulo #43. Sobreviviendo (1).

Antonio nunca pensó que las cosas ocurrirían así, que aquellos que consideraba enemigos repentinamente dijeran que los ayudarían, y que ahora, aparecieran más monstruos horribles de los cuales preocuparse.

No había otra alternativa que unirse con desconocidos y ex enemigos, no porque verdaderamente confiara en ellos, sino porque no existía otra opción...

"¡¡MALDICIÓN NO PODEMOS RETENERLO!!

"¡Usen más fuerza!, ¡¡si esa cosa logra liberarse estaremos muertos!!"

"¡¡Carguen las municiones!!, ¡¡RÁPIDO!!"

Antonio y Cecilia se mantenían detrás de Brittany y Kelly mientras veían sumamente asustados todo lo que ocurría.

Justo cuando habían caminado unos pasos y salido del área del cadáver del caimán en llamas, la aterradora trompeta junto con un cielo rojo pronosticaron los aterradores sucesos que estaban a punto de ocurrir.

Muchos cadáveres de la nada volvieron a pararse, cuerpos en descomposición que deberían estar pudriéndose en el suelo se reincorporaron como si fueran marionetas bajo un titiritero, podrían no tener muchas extremidades, ni siquiera piel, pero eso no importaba, agresivamente como si fueran monstruos sin raciocinio alguno se abalanzaban ferozmente a todo lo que se moviera.

Lo peor era que no importaba que tanto dispararan o cuantas veces los cortaran, un miasma nauseabundo que cubría los cuerpos como si fuera un hilo o cuerda volvía a juntar todas las partes, e incluso, en el caso de que ya no hubiera parte que juntar, la carne y huesos del resto del cadáver se retorcía y deformaba para juntar una extraña masa que podía tener una apariencia aterradora.

Un cadáver que ya no tenía ninguna pisca de conciencia del ser vivo que antes era, como si fuera un parasito, que no importa cuantas veces "mates" se vuelve a levantar.

Esos eran los monstruos que aparecieron y dejaron desconcertados a todo el mundo.

"¡¡Hugo soporta!!, ¡nosotros estamos ocupados con los otros dos monstruos!", Brandon grito mientras junto con Ernest cargaban frenéticamente sus pistolas.

"¡¡El área es pequeña así que no usen granadas!!, ¡¡Diego ¿y el lanzallamas?!!", Hugo contesto mientras sus manos se mantenían en el aire y una gran cantidad de mestas estaban atrapados en una especie de telaraña.

"¡¡Eso intento!!, ¡gastamos casi todo el liquido inflamable en el caimán, estoy buscando entre las municiones algo que pueda suplirlo!", Diego uno de los soldados que iba con Hugo hablo mientras intentaba guardar la calma y seguir buscando.

La escena era un caos total, estaban rodeados por casi todas partes.

"Antes no lo sabía pero... Hugo es demasiado fuerte", Kelly hablo anonadada mientras apuntaba y disparaba con su pistola a los mestas atrapados en la telaraña de Hugo.

"Si... ,si esas cosas murieran al ser cortadas, Hugo por si solo podría deshacerse de todas ellas", Brittany contesto también sorprendida.

"Si hugo no estuviera, lo más probable es que en estos momentos estuviéramos muertos", no solo Kelly y Brittany lo pensaron, sino también todos en el lugar.

Los ojos de Hugo eran agudos, con un simple barrido de su mano, pequeños y finos hilos transparentes salían de su palma y cortaban a todo aquello que se acercara, además, estos como si fueran viscosos como una telaraña atrapaban de igual manera a sus enemigos.