Capitulo #97. Ciudad Pedregal (2).

3.4K 515 118
                                    

Edificios vacíos y un silencio escalofriante, eso fue lo primero que todos notaron en cuanto llegaron a las cercanías de Ciudad Pedregal.

Un sitio ampliamente transitado en el pasado, ahora, al igual que todas las anteriores metrópolis por las cuales viajaron, no dejaba de parecerse a una ciudad abandonada, destruida y deteriorada por los años.

"Varios refugios fueron creados en la capital, es más probable que los supervivientes corrieran directamente hacía allá en lugar de quedarse aquí", Hugo comento sin dejar de conducir.

Ciudad Pedregal era una de las ciudades aledañas a la capital, que la información relacionada a los centros de protección creados allí viajara hasta los supervivientes era algo posible.

"Hugo cuando todavía podías comunicarte con los señores ¿te dijeron cómo es la situación en la capital?", Ana pregunto.

"No, no hubo tiempo, cuando desperté habían pasado unos días, mi radio solo tenía un mensaje de emergencia lleno de códigos de interferencia", Hugo contesto.

"Ese era el mensaje de encontrar al joven maestro ¿o me equivoco?, al estar más lejos mi radio no recibió nada, y los próximos días simplemente dejo de funcionar por completo", John dijo.

Hugo asintió, en cuanto recibió el mensaje se movilizó lo más rápido que pudo, sin embargo, después de días la tecnología con la cual todavía se podían crear señales dejo de funcionar también.

"Hugo, cuando entremos a la ciudad viaja por el lado oeste", Daisy intervino antes de que se tomara otro camino.

Hugo no pregunto nada, el simplemente giro su volante haciendo caso a las instrucciones de Daisy.

Regina, que hasta esos momentos estaba sumamente callada, abrió sus ojos con asombro un poco.

'Otra vez... yo jamás le dije en que parte de la ciudad estaba Emiliano, pero a pesar de eso... ella ya lo sabía'.

Ya llevaban varias horas de viaje, se fueron tarde por lo que llegarían al amanecer, Regina quedo asombrada por la velocidad, después de todo, ella realmente no creía que pudieran viajar por la noche.

Transitar por los oscuros y desiguales terrenos de carretera en donde tarde o temprano podría aparecer un monstruo no era para nada seguro.

Pero contrario a lo que ella pensaba, solo se necesitaron algunos descansos cortos para cambiar de conductor, atender las heridas de los niños heridos y hacer las necesidades básicas.

Incluso hicieron sándwiches dentro de la camioneta y comieron en el transcurso del camino.

Regina no pudo evitar sentirse con emociones complejas, no solo tuvo su parte de comida, sino además, en cuanto Daisy dijo que primero recogerían a su tío antes de llegar a la capital nadie se opuso, al contrario, aceleraron su paso.

'Ahora tiene sentido niña, por eso tus ojos estaban así de impacientes la primera vez que te vi, por alguna razón me recordaste a mi cuando quería encontrar a mis hijos'.

'No pienses en cosas malas ¿de acuerdo?, dentro de poco llegaremos, anda come, es mejor que tengas fuerzas'.

Bajo las palabras amables de ambas mujeres que no tenía mucho de conocer, Regina se sentía irónica, hasta hace unos pocos días estaba rogándole a su mejor amigo de toda la vida que la comprendiera, pero...

Soy una Ardilla en el Apocalipsis Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon