Soy una Ardilla en el Apocalipsis

Capitulo #108. Primera verdad (2).

Sin que Daisy o Derek supieran, el paradero y vida del heredero Alves ya era el objetivo de diferentes bandos en la capital desde muchos días atrás.

"En cuanto Derek Alves llegue a la capital pasa el reporte al general de la primera división".

"Cabello negro y ojos azules, vigila a todos los jóvenes entre los veinte años que tengan esas características".

"Órdenes de última hora, en cuanto el heredero Alves aparezca ¡¡deben eliminarlo a toda costa!!"

La razón por la que había tanto alboroto, era debido a que la familia Alves poseía una gran importante parte de poder en la capital, para aquellos que deseaban hacerse un nombre o ganar incluso un pequeño bocado de ganancias, no podían dejar pasar esta oportunidad.

A cambio de beneficios, un sujeto que tuvo la suerte de escuchar con su habilidad información siendo un trabajador enclenque en la mansión Alves, expuso lo siguiente:

'Por último mensaje de un guardaespaldas de los Alves, el hijo Alves debe ser encontrado y llevado de regreso a toda costa'.

Esto levantó las alarmas de distintos enemigos de los Alves y de aquellos que querían ganarse su favor, por ello, desde que terminó la tercera ola, todas las puertas de acceso a la capital estaban altamente vigiladas por espías y hombres de diferentes bandos.

Paulo, cuya red de conexiones era escasa a comparación de los verdaderos peces gordos, desconocía esto, sin embargo, para bien o mal del sujeto, llegó a las mismas decisiones de los demás.

Lo que sucedería en las puertas de la capital horas después, en un futuro sería recordado por muchos.

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"¿Es mi imaginación o esta piedra es distinta?", Daisy preguntó ladeando su cabeza.

De vuelta en ciudad Pedregal, Derek y Daisy ya estaban frente a la tableta de piedra.

"No, si es distinta", Derek contestó tocando con su palma la superficie de la roca.

"Mira Derek, en la jerarquía, el símbolo más alto creó que se refiere a ti, la corona es lo mismo que se formó en tu frente cuando estabas dormido en los días de oscuridad", Daisy relato intentando encontrar las diferencias entre ambas tabletas de piedra.

"Lo más probable es eso, mira el cuarto símbolo, es la misma figura que tenía Emiliano en su frente", contestó Derek.

"Entonces supongo que el tercero que es una especie de abanico de manos se refiere a Elena, quiero decir, el segundo se parece un poco al látigo que está en la estatua", Daisy dijo tocando pensativamente su barbilla.

"Por lo tanto, el último símbolo es...", murmurando Daisy miró el símbolo de una espada de fuego.

'Si, ese es el símbolo de Rodrigo'. dijo en sus adentros.

"Pero no dejo de pensar en estos dos, es lo único que todavía no entiendo", Derek habló tocando uno de los símbolos de los lados con sus dedos.

Daisy frunció su rostro, ella tampoco tenía idea, después de todo, esos dos símbolos no pertenecían a la jerarquía, ¿por qué razón estaban allí?, obviamente había un motivo.

El símbolo que Derek tocaba era raro, no tenía una forma exacta, era como un especie de símbolo parecido al árbol del mundo o al árbol de la vida, sin embargo, tenía una extraña huella y detrás un enorme sol con muchos picos.

Mientras que el otro símbolo, era aún más raro, a diferencia de los demás, este no parecía 'natural', sino como si se hubiera grabado a la fuerza por encima de la superficie de la roca.