Soy una Ardilla en el Apocalipsis

Capitulo #88. Nombres (3).

"Ciertamente, no hay nada de sentido", Cesar murmuro después de estar en silencio por varios segundos.

"Quizá tu habilidad se llama así porque ... ¿eres la duquesa de las plantas?, ya vez, algo como su reina", Ana hablo hacia Elena.

Elena sonrió, no contesto a las palabras de Ana, solo ella sabía que había un secreto sin descubrir en sus propios poderes.

Después de todo, 'duquesa' en la escala jerárquica de la nobleza sin duda tiene una colocación muy alta y poderosa, pero no importa que, no es la posición más alta.

Si existe un duque ...

Es porque hay un rey por encima de él.

En eso, la dormida Cecilia como si estuviera incomoda rodo hasta acurrucarse a sus anchas usando el cuerpo de su hermano de colchón, una sonrisa tonta se formó en sus labios.

Cesar suspiro, ojalá el también pudiera dormir así de despreocupado ...

"Lo que a mí me gustaría saber es el nombre de la habilidad de la niña", Hugo hablo aprovechando el momento de silencio antes de que el tema regresara a su propia habilidad.

Sería malo que después de explicar sus poderes completos le pidieran que los mostrara... 

Allí las miradas de todos se voltearon a la dormida niña.

Cecilia pronto cumpliría los once años, sin embargo, ella era más pequeña a comparación de otras niñas de su edad lo que provocaba que se le confundiera con una niña más joven.

"Cecilia cambio un poco después de despertar su habilidad", Antonio comento, él pasaba mucho tiempo con ella, por eso para él era evidente ciertos aspectos en los que Cecilia había cambiado.

Ella seguía siendo la alegre, y sobre todo ingenua (tonta), niña que conocieron al principio, pero en momentos de peligro no era exagerado decir que su personalidad cambiaba.

Antonio miro al piso mientras entrecerraba sus ojos, 'también esta aquello'.

Después de perderse y despertar en el refugio de nuevo con sus compañeros, Cecilia se había acercado al débil Antonio susurrándole que mantuviera en secreto a 'la cosa' que los seguía.

Antonio estaba confundido, pero las palabras de Cecilia fueron claras, 'Está burlándose de mí, lo odio, pero aún no puedo derrotarlo, eso es muy poderoso ... más poderoso que aquellos monstruos de afuera, tal vez... incluso más que el amigo Derek, mientras yo no lo presente eso no podrá mostrarse, por eso ... ¡no le digas a nadie Antonio!".

Las palabras de Cecilia eran preocupantes, ni ella misma sabía que era 'eso', pero viendo el honesto miedo en la niña, Antonio prometió no decirlo. 

"Ni lo preguntes, soy yo el que más quiere saber qué demonios sucede en la mente de mi hermana", Cesar hablo con el ceño fruncido, había una leve pisca de preocupación en su tono.

Al ser el hermano mayor, Cesar era el más consciente de ello, además, posiblemente porque sus poderes eran lo opuesto, él incluso sentía una sensación extraña.

No de Cecilia, sino de los ojos sin vida de las extrañas criaturas que tomaban la apariencia de osos gigantes.

No era siempre, solo que de vez en cuando, en aquellos orificios obscuros la sensación de ser observado le daba escalofríos a Cesar.