Aemma...¿Velaryon?

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Por hacer una corrección y guardar los cambios anulé el capítulo 💔

Después de aquel momento tan intenso Aemma se dirigió a su habitación.

-¿Estás bien?- preguntó Rickon al ver su nariz roja y ojos hinchados.

-Si, solo necesito dormir - dijo la chica evitando mirarlo.

Se cambió el vestido tan rápido como pudo y se metió a la cama junto con el castaño.

-Ha sido una noche intensa, ¿Segura que estás bien?-.

-Lo cierto es que no- se sinceró Aemma -Pero ya pasará-.

-¿Por qué se llevan tan mal tus hermanos y tío?-.

-Siempre han habido muchas diferencias entre las dos familias que mi abuelo tuvo, aunque mis hermanos si se llevaban bien con Aegon, nunca fue así con Aemond, creo que eran demasiado diferentes entre ellos, todo empeoró cuando él estuvo a punto de matar a Jace cuando eramos niños, eso le costó un ojo y a nosotros nuestro hogar cerca de mi abuelo-.

-¿Y tú también tenías diferencias con tus tíos?-.

-Aemond y yo siempre nos llevamos bien, lo mismo con Healena. Aegon siempre ha sido un idiota, pero era inofensivo, y de Daeron no puedo decir mucho, vivió poco tiempo con nosotros, pero recuerdo haberme peleado con él un par de veces -.

-¿Daeron? No recuerdo haberlo oído mencionar-.

-Es que casi no se habla de él, fue enviado a Antigua desde muy joven. Después de eso no lo volvimos a ver, por lo que incluso llegamos a olvidar que también existe-.

-Entiendo- Aemma seguía dándole la espalda a su esposo que parecía tener muchas ganas de conversar - Aemond parece...-.

-No deseo continuar hablando Rickon, tú lo has dicho ya, ha sido una noche intensa, por lo que solo deseo dormirme ya, espero no te moleste-interrumpió Aemma.

Lo que menos deseaba era tener que hablar de Aemond con su esposo.

-No, esta bien. Que descanses, Aemma- dijo el castaño con calma mientrasse cubría con las sábanas.

-Descansa, Rick- dijo finalmente Aemma mientras se daba vuelta en la cama dándole la espalda a su esposo.

[...]

A la mañana siguiente cuando Aemma despertó, Rickon ya estaba por abandonar la habitación.

-Buenos días Rick - saludó Aemma provocando que el castaño se sobresaltara al escuchar su voz de pronto.

-Buenos días Aemma, ¿Cómo te sientes?¿Mejor como para hoy si acompañar a todos en el desayuno?- Aemma negó.

-No me siento bien, creo que prefiero quedarme en la habitación hoy también. Además lo último que quiero ahora es verle la cara a Jace-.

-Bueno si eso es lo que quieres, ¿Gustas que le pida a alguien que traiga el desayuno a la habitación? Podría quedarme aquí contigo -.

-No tengo hambre. Ve tú a desayunar con mi familia, estaré bien aquí - Rickon sabía que no la haría cambiar de opinión, así que solo asintió y salió de la habitación respetando loa deseos de la chica.

Mas tarde esa mañana, alguien llamó a la puerta, por lo que Aemma tuvo que salir de la cama para atender a quien estuviese afuera.

Resultó ser Rhaenyra que traía consigo una bandeja con comida.

-¿Rickon no te dijo que no tengo hambre?-.

-Buenos días a ti también, hija - Aemma veía a su madre poniendo todo en la pequeña mesa que había en la habitación-Claro que me lo dijo, pero no permitiré que dejes de comer, tú estómago no tiene la culpa de que te sientas mal- la mujer se sentó en una de las sillas e invitó a su hija a tomar asiento también.

Fuego y Sangre: Aemma Velaryon Donde viven las historias. Descúbrelo ahora