Perdón.

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—¿Qué puede ser tan importante para que mi madre me haya hecho abandonar las labores tan importantes como heredera que ella misma me ha repetida una y otra vez que no debo hacer a un lado?— preguntó Aemma a Sir Erryk que caminaba a su lado de camino al gran salón.

—Su madre no me mencionó nada al respecto, princesa, pero me atrevo a  decir que seguramente tiene algo que ver con un príncipe que reside como prisionero en nuestro hogar—.

—¿Usted cree?—.

—Podría apostarlo, princesa— Aemma hizo una mueca, y continúo caminando hasta llegar a la habitación.

Al entrar se encontró con sus hermanos, abuelo, miembros del consejo y esposo alrededor de donde su madre yacía sentada en el trono.

Caminó hasta su lugar correspondiente, que era al lado de su madre.

La puerta volvió a abrirse, y sintió un pequeño escalofrío al ver que se trataba de Aemond, quien caminaba esposado como todo un criminal y era acompañado por tres guardias, los de mayor confianza para la familia de Rhaenyra.

Rhaenyra se puso de pie en cuanto Aemond estuvo lo suficientemente cerca.

—Lamento haberlos hecho abandonar sus actividades, pero era importante para mí que ustedes, mi adorada familia y algunos de mis hombres de mayor confianza, estuvieran presentes para lo que sucederá a continuación—.

La mirada de Aemma se encontró con la de Aemond por unos segundos y una parte de ella sintió pena al ver el tan mal aspecto que tenía en ese momento.

¿A donde había ido aquel príncipe tan lleno de prepotencia y orgullo? Lo único que veía ahora era a un hombre encadenado que caminaba calizbajo y desbordaba pena.

Rickon tomó la mano de Aemma entonces, y el cruce de miradas entre ambos peliblancos se rompió ya que Aemond desvió la mirada hacía el suelo.

—El príncipe Aemond Targaryen ha cometido terribles crímenes desde que está guerra comenzó, desde inclinarse y reconocer como rey al usurpador, hasta el asesinato de uno de los dragones de mis hijos y por supuesto, los ataques que cometió contra el príncipe Lucerys y la princesa Aemma...— Nuevamente Aemma miró a Aemond y todas las cosas vividas con él golpearon su mente en ese momento.

¿Esos eran todos los crímenes que Aemond había cometido? Le parecía que la lista se quedaba corta, y su madre había omitido el que para ella había sido el peor.

Que Aemond no hubiese ido tras ella nunca, ni la vez de la coronación de Aegon, ni cuando estaba dando a luz a un niño sin vida, o la última vez, cuando estuvo a nada de morir en Molino Quemado.

—Ustedes saben que esos crímenes se pagan con la muerte ¿verdad?—hizo una pausa Rhaenyra— Mi medio hermano debió haber sido ejecutado el  mismo día que se atrevió a acercase a nuestro hogar... Pero si hoy sigue con vida, es gracias a mis hijos— Rhaenyra miró a Aemma y esta se sintió nerviosa— Lo que voy a decir, no debe salir de estas puertas, y si lo hace, lo menos que perderán será su lengua— amenazó a los miembros del consejo y los guardias— La vida del príncipe Aemond ha sido perdonada, puesto que él salvó la de mi hijo Jacaerys— aquellos que no tenían idea se quedaron atónitos ante la noticia— Así es, el príncipe sigue con vida, oculto lejos de aquellos que intentaron matarlo, y lo está gracias a mi medio hermano. Es por ello que hoy Aemond dejará de ser un prisionero—.

—Majestad...— se escuchó decir a alguien entre los hombres del consejo—¿Cómo está tan segura...—.

—Aemond me dio pruebas a mí y a mi hija Aemma, eso me basta, milord—.

—¿Qué prosigue, alteza? La gente en el castillo hablará cuando vean que el príncipe es libre, ¿Qué me dice si hay más espías? ¿Cómo evitará que esto llegué al oído de los verdes? Asumiendo que no lo saben aún. Le recuerdo que las jóvenes críadas dijeron que había una mujer desaparecida—.

—Por eso actuaremos lo más rápido que podamos, milord. He preparado un plan , en el cual Aemond podrá regresar a King'sLanding sin ser acusado de traicionarlos y yo recuperaré al hijo que perdí hace meses —.

—Parece que ya tienes todo listo, madre— se atrevió a hablar, Aemma— Por como lo veo podrías haberlo hecho sin decirle a nadie—.

—No, necesito de ustedes para que la misión sea un éxito— Rhaenyra hizo una señal al guardia y este se apresuró a liberar a Aemond, quien en ese punto ya tenía ambas manos dormidas.

Aemma lo vio mirándose las manos mientras estiraba y doblada los dedos, y el enojo que se había reavivado en ella después de pensar en su pasado incremento.

—¿Eso es todo lo que querías decirnos, madre?—.

—Necesito que te quedes para escuchar el plan y que sepas cual será tu trabajo ¿Puedes?—.

—Haré lo que sea por recuperar a Jace, madre, el resto de lo que pase me importa una mierda y si alguien tiene que morir en el intento, mas vale que sea alguien por quien nadie de esta familia lloraría —habló la platinada refiriéndose a Aemond, quien solamente asintió y siguió mirando el suelo tratando de no demostrar cuanto habían dolido esas palabras.

—Haré lo que sea por recuperar a Jace, madre, el resto de lo que pase me importa una mierda y si alguien tiene que morir en el intento, mas vale que sea alguien por quien nadie de esta familia lloraría —habló la platinada refiriéndose a Aemond, qu...

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Aemond está de vuelta en el juego,  esperen un poco.

Aemond está de vuelta en el juego,  esperen un poco

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Hola a todxs, estoy de vuelta.

Al fin terminó el ciclo en la U, así que tengo un mes de descanso, espero estar más activa y con varias actualizaciones en estas semanas.

Fuego y Sangre: Aemma Velaryon Where stories live. Discover now