QueriendOT

Todas las flores

-Ey Cepeda, Cepeda... -decía una voz tras el sofá. Luis abrió los ojos poco a poco y una figura se formaba tras de sí. Se dió la vuelta, apartando a Aitana que estaba dormida, a un lado del sofá con cuidado. -¿Qué haces aquí? Creía que ibas a hablar con Agoney. 

-Esque al pasar por aquí, Aitana me dijo que me quedara con ella y ya sabes que no puedo decirle que no... -dijo Cepeda en voz baja intentando evitar que Aitana lo escuchara. Pero lo hizo, ya que no estaba totalmente dormida.

-De verdad Cepeda, eres un caso. -dijo Roi. - Es hora de cenar, despiértala y vamonos a la mesa, no quiero dejar solo a Raoul mucho tiempo y menos con Agoney y Ricky cerca. Roi se alejó hacía el comedor y Luis se quedó admirando un rato a Aitana dormida. Tenía carita de ángel. Cuándo los concursantes comenzaron a llenar el comedor Luis decidió despertar a su amiga. Se acercó un poco más a ella y comenzó a llamarla. Aitana abrió los ojos rápido y tras esbozar una sonrisa se levantó y saltó a abrazar a Luis. -¿Qué hora es? -dijo apartándose. -Ya es la hora de cenar. -respondió Cepeda. Los dos se levantaron, Aitana se enganchó del brazo de Luis y los dos juntos se acercaron a por algo de cenar. 

Ana y Mimi se dirigían al comedor desde la sala donde ensayaban, por el camino se encontraron a Amaia, que les puso al tanto de lo ocurrido en este tiempo. Estaban muy sorprendidas, sobre todo Ana, que era muy buena amiga de Agoney y no se esperaba para nada esto por su parte. Llegaron al comedor y la tensión podía notarse en el aire. Todos sentados en la mesa, empezaron a comer. Hoy había puré de patatas y hamburguesas de tofu, ya casi era una cena habitual ya que a los chicos les gustaban mucho estas hamburguesas y se las pedían a Noemí muchas veces.

En la cena había dos mesas, una ocupada por Agoney, Mimi, Ana, Amaia y algunos más y la segunda donde se encontraban Roi, Alfred, Cepeda, Raoul, Aitana y otros dos compañeros más.

Ricky decidió no cenar hoy, este se encontraba preparando el casting que había al día siguiente. En la primera mesa todos intentaban que Agoney les contara lo ocurrido, eso sí, desde su posición. -¿Dices que antes estabais hablando no? Antes de lo de la ducha, ¿sobre qué? -dijo Mimi. -Él me contó que había alguien aquí dentro que le ponía muchísimo, no sé si me dijo que le gustaba, no me acuerdo, em.... entonces comenzó a decirme que no sabía que hacer, porque a esta persona le gustaba otra...yo solo le dí consejos para que se lanzara, no sabía que era yo. -dijo este bajo la atenta mirada de toda la mesa.

-Debiste haberlo parado.-dijo Ana de forma muy cortante.

-Igual que tu cuándo besaste a Mimi y no lo hiciste. -soltó Agoney.

Ana paró de cortar la hamburguesa en seco, miró a Agoney, después se giró hacía Mimi esperando una respuesta de esta y al ver que no la recibía soltó el tenedor en el plato. Se levantó de la mesa, enfadada, dejando el plato encima de la encimera y se fue a la sala del piano. 

-Te has pasado, sabes que tiene razón -dijo Mimi cortando su hamburguesa.

- Lo sé, pero sabes que yo también. -dijo Agoney.

Mimi suspiró y volteó su mirada hacía la otra mesa, donde se dió cuenta de que alguien la estaba mirando, Roi. Sus miradas se encontraron en medio de la habitación, Roi le dedicó una sonrisa y esta se la devolvió. 

Roi vió como Ana se iba enfadada hacía la sala del piano, pero decidió no ir tras ella, estaba muy ocupado con sus propios pensamientos. -Miralo, está tan tranquilo. -dijo Raoul clavando el cuchillo en su trozo de pan con rabia. -Ey, suelta el cuchillo. -dijo Aitana agarrando su mano en este. Cepeda agarró el jersey de Aitana haciendo que esta se sentara. -Raoul vamos a ensayar para mañana, será mejor que te alejes de aquí un rato. -dijo Luis levantándose de la mesa. -No, quiero terminar de cenar. -respondió. -Bueno, haz lo que quieras, estaré en un box. -

Cepeda salió del comedor. Nerea sentada al lado de Raoul intentaba darle conversación. -¿Llevas bien la canción para el casting?

-Sí, estuve ensayando antes. -decía cortante. 

Pasado unos minutos, quizá unos quince, la tensión que había en el cuerpo de Raoul se iba disipando gracias a sus amigos, que le hacían reir y que se olvidara de todo lo demás. Agoney observaba desde la otra mesa a Raoul. -Soy un idiota. -pensó. Mimi se levantó a dejar su plato en el fregadero.

-Creo que me voy a ir con Cepeda un rato. -dijo Roi levándose. Al ir a dejar su plato al lavavajillas se chocó con Mimi, casi hacía que tirara su plato. -Perdón. -dijo. Mimi agarró su plato como pudo y lo salvó casi en el aire. -Dios Roi. -soltó. Dejó el plato y volvió a la mesa. Roi no pudo evitar fijarse en su cuerpo, en su culo. -Buah. -soltó de repente. Mimi se giró a mirarlo. -¿Has dicho algo?

-No nada. 

Cerró el lavavajillas y se fue junto a Cepeda, por el camino pasó por la sala donde se encontraba Ana, que lo saludó con la mano desde una silla. Este decidió entrar en la sala. -¿Qué escuchas? -le dijo. -La  canción que cantaré con Amaia, estaba repasando la letra. -respondió Ana. Roi cogió el ratón del portatil y puso la canción desde el principio, cogió una silla y se sentó junto a Ana. -Cántamela. -dijo. 

Ana comenzó a cantar, la forma en que lo hacía embelesaba a Roi, lo hacía recordar el por qué le gustaba tanto esta chica. Los ojos de Roi brillaban al mirarla. -Siento no haber venido antes. -soltó Roi. Ana acarició su mejilla y le dijo que nose preocupara, que estaba bien. Casi terminada la primera estrofa, Ana se rió llena de vergüenza. -Perdón. -dijo. -Lo hacías muy bien. Sigue porfa. -le dijo Roi.

Esta siguió cantando, aunque esta vez algo avergonzada. Mientras Ana cantaba, Roi miraba la letra con ella y empezó a cantar también. -Tantas veces me he perdido... -cantaban, Roi algo más bajo dejando que ella se luciese. 

-Y dentro de tus ojos me he vuelto a encontrar... - las manos de Roi rodeaban las de ella con fuerza.

-Tantas veces me he caido... -cantó Ana. Cada vez los dos estaban más cerca. 

- y con tu mano yo me vuelto a levantar.... -cantaba Roi a centímetros de los labios de Ana. 

Los dos dejaron la música sonando mientras sus labios de juntaron en un apasionado primer beso. Ninguno de los dos oponía resistencia a este. Se dejaron llevar y terminaron enrollándose en mitad de un sofá de la sala. -Creía que...no te gustaba... -decía Roi entre beso y beso. 

Ana se separó un momento de Roi, sentándose en el sillón a su lado y agarrando su mano. -Esto es lo que quería decirte, Roi, estoy enamorada de ti.