Empecé como serpiente, por lo tanto empecé desde abajo.

Capítulo 16: Epílogo Arco 1- Aquellos enlazados.

Parte 1.

En una noche de verano, un hombre observaba el cielo nocturno acompañado por dos niños. Ellos se encontraban sentados sobre el pasto y no muy lejos se podía ver una cabaña de madera cuyo interior estaba completamente alumbrado.

"Es una buena noche."

Dijo el hombre mientras miraba hacia el cielo estrellado. Los niños a su lado también miraban el cielo nocturno con ojos brillantes. Al vivir en la ciudad, en las noches no tenían la posibilidad de ver un cielo nocturno completamente estrellado tan claramente. Para ellos, era la primera vez y fueron cautivados por lo que veían sus ojos.

Ambos niños parecían tener la misma edad. Un chico y una chica, alrededor de 6 años de edad cada uno.

El chico tenía el cabello negro liso, con un flequillo que alcanzaba a cubrir sus cejas, y ojos azules. La chica por su parte tenía el cabello dorado, liso y largo hasta la cintura. Al igual que el chico, sus ojos eran de color azul.

"¿A qué se siente bien la brisa nocturna? Ryuuji, Sara."

El hombre le pregunto a ambos niños, y estos solo lo miraron en silencio. El chico parecía desinteresado y la chica lo observaba con una expresión molesta.

"Si, se siente bien, pero eso no es excusa suficiente para huir de lavar la vajilla después de cenar."

Kamiya Sara Evans. Una joven estudiante de primaria con habilidades muy superiores para su edad. Esa era la niña sentada junto al hombre y junto a ella...

"Después no digas que no te lo advertimos. No pienso defenderte con mamá. Aunque si admito que se siente bien la brisa."

Kamiya Ryuuji. El hermano gemelo de Sara.

"Ugh... me alegra que sean honestos y responsables, pero ¿no podrían mostrar un poco de compasión con su padre?"

""No.""

Ambos niños respondieron al mismo tiempo mientras que devolvían sus miradas hacia el cielo estrellado.

"Ahaha... en serio, estos niños..."

A pesar de que desviaron sus miradas, los niños aún permanecían sentados junto a su padre tranquilamente. Es más, sin que él se diera cuenta, se acercaron un poco a él.

El nombre del padre era Kamiya Tesshin. Un simple asalariado que trabajaba para una empresa de tamaño medio que, por un giro del destino, conoció a la madre de ambos justo después de graduarse de la universidad en su primera reunión en el trabajo que había conseguido. En ese momento Stella Evans era una joven prometedora y llena de talento que había comenzado a trabajar para una empresa importante.

Se podría decir que fue amor a primera vista y Tesshin no tenía forma de saber que ese amor a primera vista daría frutos años después en la forma de cuatro hijos, dos pares de gemelos.

El trio padre e hijos, estuvo sentado un buen rato observando el cielo nocturno mientras conversaban trivialmente hasta que decidieron volver al interior. Primero, porque se estaba haciendo tarde y segundo, la madre exigió el regreso de aquellos que 'huyeron de sus labores'.

En aquel paisaje nocturno, en un lugar algo alejado de la cabaña y no tan lejos del lugar donde habían estado observando el cielo, un par de figuras yacían de pie.

Ambas figuras eran como sombras humanoides sin una apariencia clara, pero de solo verlas quedaba claro que eran un hombre y una mujer. Ambos estaban de pie uno al lado del otro y parecía que estaban observando todo desde el comienzo.

El silencio reinaba entre ambas sombras cuando...

"Que recuerdos."

La sombra que parecía ser un hombre habló. A pesar de no tener una apariencia clara su voz si se escuchaba claramente.