Capítulo 22: Sentando bases-Parte 2.

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Parte 1.

“… ¿por qué?”

En la habitación de la gema, Laura, Belfast, Seijiro y Felicia, se encontraban de pie, observando el silencio la aparición de una mujer joven después del resplandor causado por la gema y la magia de invocación.

La mujer parecía estar en el final de su adolescencia. Cabello largo hasta el pecho, de color castaño claro y ojos azules como la gema detrás de ella. Piel blanca de tono saludable y labios color rosa claro. Llevaba un vestido de color marrón rojizo, escotado que no cubría sus hombros ni tampoco tenía mangas. La falda caía elegantemente hasta sus tobillos revelando los finos zapatos en sus pies.

“Disculpe… ¿es usted quien me ha llamado?”

La mujer le repitió su pregunta a Leohart quien a diferencia de aquellos detrás de él, no estaba ensimismado por la belleza de la mujer. Su expresión mostraba una clara confusión e incomodidad. Era el tipo de expresión que uno pondría al encontrarse con un problema inesperado y difícil de controlar.

La habilidad Magia de invocación ha subido a nivel 3.

“…”

(De nivel 1 a nivel 3 de golpe… tengo un mal presentimiento sobre esto… Evaluar…)

Con el objetivo de comprender el porqué de su incomodidad al ver a la mujer frente a él, Leohart procedió a Evaluar su estado, algo que no hacía desde hacía ya un buen tiempo. El resultado de dicha acción…

Nombre: Liezelle

Raza: Espíritu. Nivel: 80. Rango: 3.

Título: Ninguno.

Bendición: Ninguna.

Atributos:

Fuerza: 8500        Ataque: 7900         Magia: 15000

Agilidad: 7400         Defensa: 8500

“…”

Al ver su estado, Leohart comprendió de inmediato por qué tenía un mal presentimiento. De inmediato se llevó una mano al rostro y soltó un gran suspiro.

“Dios mío…”

“¿Pasa algo Leo?”

“Nada… no es nada. Entonces…”

“¿…?”

Una vez que Leohart calmó su mal presentimiento, devolvió su atención a la mujer frente a él. Al hacerlo las miradas de ambos se encontraron.

“Respondiendo a tu pregunta… si, yo soy quien te ha invocado aquí.”

“Ya veo.”

“¿Hm?”

En cuanto Leohart terminó de hablar la mujer se quedó en silencio. Observándolo detenidamente durante unos segundos. Debido a que la altura de la mujer es similar a la de Leohart, que mide alrededor de 175 cm de alto, simplemente parecía que lo miraba a los ojos.

“Interesante.”

“¿Qué cosa?”

“Discúlpeme.”

“¡¿…?!”

Sin prestar atención a Leohart, la mujer sujetó el rostro de Leohart con ambas manos. Un segundo después, los ojos de la mujer brillaron brevemente. Luego, ella retiró sus manos suavemente.

“Disculpe mi atrevimiento. Solo estaba intrigada por saber qué tipo de persona era mi invocador.”

Dijo la mujer mientras se inclinaba hacia Leohart en forma de disculpa.

Empecé como serpiente, por lo tanto empecé desde abajo.Where stories live. Discover now