Empecé como serpiente, por lo tanto empecé desde abajo.

Capítulo 104: Final sorpresa.

Parte 1.

*POV 3ra Persona*

Una vez que Leohart le asestó el golpe final a Bulga, las estrellas de luz comenzaron a desvanecerse junto con la barrera que los encerraba. Al mismo tiempo, el Mana Zone de Leohart se desvaneció y este descendió al suelo.

Ya en el suelo, Leohart se acercó al cadáver de Bulga y fue sorprendido por lo que se encontró.

“Ahora esto es nuevo.”

Allí frente a él yacía el cadáver, partido en dos, pero su apariencia no era la de la mujer con la que estaba luchando momentos antes. Lo que Leohart se encontró fue una muñeca.

Hecha de un material totalmente blanco, la muñeca de forma humanoide no tenía algún rasgo que distinguiera siquiera el sexo que trataba de imitar. Era solo un muñeco blanco, con dos agujeros en la cabeza, simulando sus ojos.

“Ni siquiera siento esencia mágica en su interior. Hm… Era un alto espíritu así que ¿esto podría ser su recipiente?”

Mientras pensaba para sí mismo, la muñeca, que estaba cortada limpiamente por el torso de forma horizontal, comenzó a desvanecerse en partículas de luz. Por su parte, Leohart observaba el fenómeno tranquilamente cuando de repente sintió que perdía fuerza en las piernas.

“Oh rayos… me pesa el cuerpo. Usé demasiada esencia mágica. Muy bien… Frey puso a estos tres aquí, así que le preguntaré a ella al respecto más tarde. Por ahora, me voy a descansar… En serio, este cansancio no es chiste.”

Dijo Leohart mientras se daba la vuelta para dirigirse hacia el área donde estaban aquellos que no participarían en los combates, pero no sin antes lanzar una mirada rápida en dirección hacia el área del espíritu gigante de seis brazos que se encontraba rodeado por un gigantesco domo formado por raíces y ramas, y al extraño fenómeno que estaba teniendo lugar allí.

Parte 2

Un área llena de raíces gigantescas e innumerables ramas, dos personas corrían ágilmente.

“Volar es muy cómodo y útil, pero al final, tener los pies bien puestos en terreno solido se siente mejor.”

Dijo Hinata mientras corría sobre una raíz acortando su distancia con el gigante Asura.

“Bueno, bueno. Resulta que eres un bastardo bastante resistente.”

Mientras Hinata rodeaba a Asura, este se encontraba en medio de un acalorado intercambio de golpes con una mujer que portaba una guadaña.

*Slash* *Clang* *BAM*

La mujer manejaba espléndidamente su guadaña mientras repelía los ataques de las palmas del gigante, atacando cada vez que encontraba la oportunidad de deslizarse entre los brazos de su enemigo para acortar las distancias, aunque cada vez era repelida por otro poderoso ataque de palma.

“…”

El par estaba enfrascado en ese intercambio desde el inicio del combate y se encontraban en un punto muerto, con ambos incapaces de asestar un golpe correctamente.

Por otro lado, Hinata había intentado apoyar a su aliada atacando desde la distancia mientras Asura estaba enfocado en el enemigo frente a él, pero fue su plan fue arruinado cuando su enemigo cambió su aspecto. Para poder observar los movimientos de Hinata, manifestó otras dos caras en su cabeza revelando la apariencia de un verdadero Asura mitológico.

“Señorita Ulrich. Un paso atrás por favor.”

“…”

Al escuchar la calmada voz de una mujer, la mujer que portaba la guadaña saltó hacia atrás, desapareciendo entre las ramas y un segundo después, un grueso rayo de luz voló hacia Asura.