Capítulo 88: Hechos importantes.

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Parte 1.

*POV 3ra persona*

Después de su pelea, Leohart sintió como su consciencia se desvanecía y rápidamente se vio envuelto en oscuridad. Su consciencia vagó por la oscuridad en total tranquilidad. Aun sentía su cuerpo, descansando y podía decir que no estaba en peligro, pero no se despertaba.

“…”

Después de lo que pareció ser una eternidad, la oscuridad rodeándolo cambió. Conforme flotaba estrellas brillantes comenzaron a aparecer y en cuestión de segundos un bello cielo estrellado.

“Woah.”

Su cuerpo giró y sus pies pisaron la superficie de lo que parecía ser un lago que se extendía más allá del horizonte. Antes de darse cuenta, Leohart había terminado en el mismo espacio al que Narza había accedido usando sus habilidades de interferencia mental.

“¿Qué es este lugar?”

Caminando por el área, Leohart se planteó esa pregunta. De igual manera se cuestionaba como podía caminar sobre el agua como si nada y el por qué estaba allí. Sin importar cuanto pensara, no encontraba la respuesta a sus preguntas, pero solo había una cosa que tenía clara.

“Una vez más estoy teniendo un sueño increíblemente realista…”

Estaba dormido. Como podía sentir que su cuerpo estaba descansando y dadas las otras ocasiones en las que había hablado con su hermana a través de sus sueños, entendió rápidamente que estaba dentro de un sueño.

“Hm… pero el lugar es diferente… ¿Por qué?”

“Porque yo te he traído aquí.”

De forma inesperada, su pregunta obtuvo una respuesta. Una voz fuerte y grave resonó claramente a través de aquel espacio.

Rápidamente Leohart miro a su alrededor en busca del origen de la voz lo que le trajo una gran sorpresa.

“Pero que rayos…”

Después de dar una vuelta mirando alrededor, Leohart se encontró con un dragón frente a él. Su apariencia era similar a la de un dragón occidental. Un par de cuernos blancos sobresalían desde los lados de la parte superior de su cabeza. La característica pupila vertical resaltaba en sus ojos dorados y sus escamas marrones brillaban tenuemente al recibir la luz de las estrellas. Su apariencia era impresionante, pero lo más impresionante era…

“Enorme…”

Era su tamaño. El dragón era más grande que un edificio de 5 pisos y para Leohart en su forma humana, esa criatura no era nada más que enorme. Su tamaño le recordaba a Fafnir.

“Joven, bienvenido.”

“Ah… um… Es un placer, pero… ¿Dónde estamos exactamente?”

“En tu interior.”

“¿Perdón?”

Desconcertado, Leohart miro al dragón con una expresión que exigía respuestas.

“Hm… ¿cómo lo explico de forma simple? Mira, de la misma forma en que tu consciencia va al reino divino cuando hablas con las diosas, yo traje tu consciencia hacia el mismo lugar donde se encuentra tu alma. Este espacio existe en todas las criaturas y acceder a él es toda una hazaña a menos que tengas un buen conjunto de habilidades que faciliten el trabajo o haya circunstancias especiales de por medio.”

“Ajá… entonces ¿tú tienes habilidades que te permitieron acceder a mi alma?”

“No.”

“¿Hm? Entonces ¿cómo estás aquí…?”

Empecé como serpiente, por lo tanto empecé desde abajo.Where stories live. Discover now