The last

VIII. Asuntos pendientes

Estábamos en el carro de Addison rumbo al hospital, hace algunos minutos había comenzado a llover.
Yo iba manejando y ella sumida en sus pensamientos, por lo que el vehículo se encontraba en completo silencio, un silencio muy distinto al de hace unas horas, era incómodo. Por una parte, estaba lo de Jake y por otra, lo que pasó entre nosotras hace apenas media hora.

—Meredith, yo... —Addison volteó a verme.

—Déjalo, no hablemos del tema, al menos no ahora —mi vista seguía al frente.
—Enfócate en Jake, luego hablaremos de eso —retiré una mano del volante y la puse sobre su hombro.

Addison dobló su brazo, colocó su mano sobre la mía y suspiró.

Seguí manejando por al menos 10 minutos y finalmente, llegamos al hospital. Detuve el carro y al parecer, ninguna de las dos tenía ganas de salir de el.

—Ni siquiera puedo pensar... —cubrió su rostro con sus manos.

Tomé sus muñecas y las bajé, su cara quedó descubierta, tenía la mirada hacia abajo.
—¿Quieres olvidar lo que pasó? ¿Eso te ayudará? —pregunté y sentí un nudo en la garganta mientras lo hacía.

Se mantuvo en silencio.
—Yo... —subió la mirada y nuestras miradas conectaron, se podía ver la confusión en sus ojos.

Salí del carro antes de que pudiera decir algo. Ella no había dicho nada, pero no podía evitar pensar en lo peor.

Addison salió del auto, me miró desde el otro lado del carro y a pesar de la escasez de luz pude notar cómo sonrió ligeramente.

Ella no lo decía, pero casi podía apostar que "esto" se había acabado antes de iniciar.

No fue hasta que la vi alejarse por el estacionamiento rumbo a la entrada del hospital cuando me di cuenta que la quería, quería a Addison.

[...]

[Addison]

Una cosa era mandarle los papeles del divorcio a Jake sin mirarlo a la cara, y otra muy distinta era decirle frente a frente que ya no podíamos seguir juntos... Que comenzaba a querer a alguien más, que en estos meses comencé a querer a Meredith...

No sé cuándo pasó ni cómo, pero lo cierto es que no dejaba de pensar en ella, al principio dudé en decirle, pero después de lo de hoy, ese momento donde solo importamos ella y yo, a la luz de la luna. La verdad es que tenía miedo de decirle a Jake que quería el divorcio, además estaba Henry de por medio.

—Meredith, yo... —volteé a verla, necesitábamos hablar de lo pasado hace un rato.

—Déjalo, no hablemos del tema,al menos no ahora —me dijo con la vista aún en la carretera
—Enfócate en Jake, luego hablaremos de eso —colocó su mano en mi hombro.

Finalmente, después de diez minutos llegamos al estacionamiento del hospital.

Estaba desesperada y con mil pensamientos rondando por mi cabeza.
—Ni siquiera puedo pensar —exclamé involuntariamente y cubrí mi rostro con mis manos.

Ella retiró mis manos dejando mi rostro al descubierto, ni siquiera la podía mirar a los ojos.
—¿Quieres olvidar lo que pasó? ¿Eso te ayudará? -preguntó.

No sabía qué hacer, el miedo se apoderó de mí.
—Yo... —subí la mirada para encontrarme con sus ojos verdes.

Tenía miedo si, tenía miedo de aceptar todo esto que he estado sintiendo, que fuera una broma del destino.
Miedo de aceptar que me empezaba a gustar el sonido de sus risas, que su compañía era capaz de pausarme el mundo a mi alrededor.
Miedo por Henry, al divorciarme comenzaríamos a luchar por su custodia ¿y si perdía?, no podría seguir sin él. Me sentía mal por hacerle esto a Jake, ante los ojos de cualquier mujer él era el hombre perfecto y creo fielmente en las segundas oportunidades.

Abandonó el carro antes de que pudiera decirle algo.

Suspiré y salí del auto, miré a Meredith desde el otro lado del auto, se podía notar la preocupación en su rostro.

La miré por última vez, sonreí ligeramente en un intento absurdo por tranquilizarla y di media vuelta para caminar hacia el hospital.

Nunca debí alejarme.

Ingrese al hospital buscando a Jake o Richard con la mirada.

—Addison —escuché una voz masculina detrás de mi y di la vuelta.

—Jake...

—¿Podemos hablar? —preguntó mientras me tomaba los hombros— estas empapada, te puede hacer daño —retiro mi abrigo mojado y se quitó su saco para ponerlo sobre mis hombros.

—Gracias...

—¿Entonces...? ¿Podemos hablar?

Necesito reunir valor para decirle.

Lo tomé del brazo y lo llevé a la sala de titulares.

—Tengo que decirte algo —me recargué sobre la puerta.

—Addison, déjame hablar primero.
Henry te extraña y a decir verdad, yo también —se acercó a mí.
—Yo sé que podemos superar esto, yo te amo Addison y no veo un futuro si no es a tu lado —tomó mi barbilla entre sus dedos.

Todos merecemos segundas oportunidades.

Dudosa de lo que iba a hacer, asentí, sentí cómo él tomó mi rostro entre sus manos y finalmente me besó.

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𝑵𝒐𝒕𝒂 𝒅𝒆 𝒍𝒂 𝒂𝒖𝒕𝒐𝒓𝒂:

Lo sé, no me vayan a mataaar.
El drama es justo y necesario en toda historia y no quería que esta fuera la excepción 😋.

Muero por que lean el siguiente capitulo, me gustó mucho y espero a ustedes también <3.