Capítulo 37 - Esperaré

2.7K 276 48
                                    

Lo malo es que yo tampoco me arrepiento, Akaza - le dijo mirándolo a los ojos.
¿Qué? - le preguntó Akaza confundido.
Si no fueras un demonio, no nos habríamos conocido. Es algo egoísta que piense así, pero es la verdad - dijo algo avergonzado.

Akaza hizo una pequeña sonrisa, Rengoku se subió sobre él y le besó con delicadeza, no se podía creer que aquel Pilar estuviese volviéndose tan importante para él, casi no se conocían, eso estaba mal, un demonio no podía sentir esas cosas por un mero humano. Pero tampoco podía impedirlo, su cuerpo se lo pedía.

Dime, Kyojuro... - le dijo Akaza mientras se besaban.
¿Sí? - le respondió el Pilar mientras disfrutaba de cómo Akaza bajaba sus besos alrededor de su cuello.
¿Me querrías aunque te convirtiese en demonio? - Kyojuro se quedó pensativo, no sabía qué responder, Akaza tenía control total sobre su mente, por mucho que hiciera lo iba a querer.
Sí - le respondió con seguridad, no iba a mentir, no cuando se trataba de un sentimiento tan importante.
¿Y quieres convertirte en demonio, Kyojuro? - dijo mirándolo a los ojos dejando sus bocas a solo unos centímetros de distancia.
No - Rengoku tenía que mantenerse humano todo lo que su cuerpo le permitiese, si llegaba el momento decidiría qué hacer, pero ahora mismo iba a ser humano.
Entonces esperaré a que quieras ser un demonio, Kyojuro - le dijo Akaza uniendo sus bocas en una sola.

Akaza no le había mentido, lo había decidido. Tenía todo el tiempo del mundo para esperarlo, mientras simplemente disfrutaría de su humanidad y esperaría a que Kyojuro fuese fuerte mentalmente para convertirlo, no podía obligarlo, ni a él ni a Senjuro.

Rengoku fue quitando su parte de arriba de la ropa y agarró de los pelos a Akaza cuando sintió cómo pellizcaba sus pezones. Los dos estaban locos el uno por el otro y no iban a intentar esconderlo más. No tenía nada de malo, no importaba que él fuera humano y su amante un demonio, los dos sentían y estaban hechos de carne, ambos con sus ambiciones y deseos, no tenían ninguna diferencia.

Akaza retiró sus labios para bajar a disfrutar de los pezones de Kyojuro, chupándolos y tirando de ellos poco a poco. Kyojuro jadeaba mientras acariciaba el pelo de Akaza.

Nunca pensé que llegaría a tener a un Pilar tan hermoso como tú en mis manos, Kyojuro - le dijo Akaza besando su pecho.
Akaza... - Rengoku solo podía jadear, no podía disfrutar más de ser él quien estuviese en sus manos. Sentía todo su ser débil cuando Akaza estaba delante, y eso no le molestaba, le asustaba, haría lo que fuera por él.

Akaza se levantó cargando a Kyojuro y se puso encima de él, bajando sus besos alrededor de todo su torso hasta que llegó a la intimidad de su querido Pilar, quien estaba completamente rojo suspirando.

Te querré por toda la eternidad, Kyojuro - dijo antes de meterse su miembro en la boca y chuparlo lentamente.

Akaza también tenía miedo, él no se sentía tan normal desde que Kyojuro llegó a su vida, se estaba obsesionando con él. Aunque quisiera negarlo no podría, así que simplemente se dejaría llevar esta vez.

CUANDO EL SOL Y LA LUNA SE UNEN - Akaza × Rengoku +18Kde žijí příběhy. Začni objevovat