Capítulo 97 - Dos hermanos

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Hermano, esto es desgarrador... - dijo recordando las últimas palabras de Yoriichi, toda su vida había sido un fracaso, una derrota tras otra. Hakuji lo había vencido, había sido mejor que él y había escogido el camino que realmente quería redimiéndose de sus errores.

Hakuji clavó la hoja de la espada en su cuello y la empujó con fuerza golpeándola, pero notó que el cuerpo de Kokushibo ya se había estado desvaneciendo desde antes. Miró hacia los ojos de la Primera Luna Superior confundido mientras desaparecía y se encontró con una mirada tranquila.

¿Q-qué? - dijo sorprendido, no podía creer que estaba tan cerca de la victoria.
Has ganado... Hakuji - dijo cerrando sus ojos con una mirada de agradecimiento llamándolo por su verdadero nombre - espero que puedas derrotar a Muzan - expresó antes de desaparecer por completo.

Hakuji soltó la espada y cayó al suelo. Lo habían conseguido. Había vencido a Kokushibo de verdad, era más fuerte. Las lágrimas empezaron a caer por su cara.

He cumplido mi promesa... - dijo mirando hacia el techo. Ahora por fin podría ir a por Muzan, se vengaría por todo de una vez.

Hakuji se acercó a las cenizas de Kokushibo y agarró la flauta que había caído al suelo, era un regalo que le había hecho a Yoriichi cuando eran pequeños, recordó cuando Kokushibo le contó su vida, toda su historia era terrible, no había conseguido nada incluso después de convertirse en demonio. Cogió los restos de la ropa que había quedado y envolvió la flauta, juntando sus dos manos y arrodillándose frente a ellos.

Descansa en paz - dijo entristecido. Se levantó y fue hacia Himejima, quien sostenía a Sanemi herido gravemente - ¡idiota del viento, no mueras ahora que hemos ganado!
Cógelo, Hakuji. Yo iré a por Genya - dijo Himejima yendo a ayudarlo, estaba en un estado lamentable, el cuerpo del cazador no se regeneraba.
No te preocupes por mí... ve a por Tokito - dijo Genya adolorido. Al haber absorbido las células de Kokushibo, él estaba desvaneciéndose también. Miró a su hermano sonriendo - estás vivo... gracias a Dios.

Himejima fue con Tokito, pero era demasiado tarde, su joven cuerpo no había podido aguantar las heridas que tenía. Gyomei empezó a llorar y cerró sus ojos rezando por él. Vencerían a Muzan como fuese. Escuchó un grito y se giró a ver cómo Sanemi se levantaba para correr a por Genya.

¡No! ¿¡por qué!? ¿¡por qué tu cuerpo se está desintegrando como el de un demonio!? - Sanemi cubrió las partes que se estaban desvaneciendo inútilmente - ¡no te preocupes! ¡arreglaré esto!
Lo siento... por haber sido una carga - dijo llorando Genya - y gracias por protegerme.
¡No mueras ahora! ¡nunca has sido una carga para mí! ¡no te protegí una mierda, idiota! - gritó Sanemi. Hakuji y Gyomei los miraban con el corazón agitado, era terrrible. Hakuji recordó cómo se había convertido Senjuro en demonio, era exactamente el mismo dolor que sintió Kyojuro.
Yo solo quería protegerte a ti también, quiero que no mueras... mi hermano mayor... eres la persona más amable del mundo. Gracias por todo, hermanito - dijo antes de desvanecerse por completo. Sanemi empezó a gritar entre lágrimas.
¡Dios, no! ¡no te lleves a mi hermano! ¡por favor, te lo ruego! ¡devuélvemelo! ¡Genyaaaaa! - expresó agarrando con fuerza los restos que habían quedado de su ropa.
Himejima lo miró enfadado y tocó su hombro - esto no se ha acabado, tenemos que seguir. Derrotaremos a Muzan.

Los tres supervivientes se levantaron para ir a por Muzan. Los cuervos empezaron a avisar de las muertes de los jóvenes Genya y Tokito, dejando entristecidos a los que los escuchaban, eran los primeros en caer.

Doma llegó hasta Muzan pero al intentar cortarlo un capullo de carne se formó en su cuerpo protegiéndolo. Empezó a absorber a Tamayo y Doma intentó tirar de ella sin poder salvarla.

¡No, joder! - Doma agarró con fuerza su mano, si Muzan la absorbía estarían en desventaja. Intentó cortar el capullo para sacarla pero fue en vano - ¡mierda!

Senjuro lo miraba asustado, ¿podría Doma contener a Muzan? quizás no era suficiente. Fueron llegando cazadores a inspeccionar el lugar y miraron asqueados el caparazón que Muzan había formado.

No os acerquéis, es muy peligroso - dijo Doma. Muzan estaba regenerándose de sus heridas dentro.

Tanjiro, Kyojuro y Giyu estaban cerca de llegar a Muzan. Hakuji, Sanemi y Gyomei también estaban de camino. Pronto se unirían para combatir contra él. Doma congeló la coraza de Muzan para intentar retrasar su ataque todo lo que le permitiese el hielo, si salía reforzado ahora no tendría ninguna posibilidad de ganarle.

CUANDO EL SOL Y LA LUNA SE UNEN - Akaza × Rengoku +18Where stories live. Discover now