Prólogo

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POV MAXIMILIANO O'CONNOR WALTON

Doce años atrás...

-Estas fueron las mejores fiestas de navidad de mi vida-, dijo mi madre desde el asiento del copiloto.

-Hablas por ti, para mi fueron un asco-, escupí sentado en los asientos traseros del auto, mi padre conducía.

-Max, hijo...-, expresaba ella cuando la interrumpí abruptamente.

-Nada de lo que digas cambiara lo que vi, lo sabes-,

-Max, no le hables así a tu madre-, espetó mi padre con sus ojos fijos en la carretera.

-No te meta papá, esto es entre Walton y Walton-

-Max, no permitiré que le hables a si a tu padre-, gruñó mamá.

-Déjalo Maite, ya sabes como es tu hijo-, manifestó papá.

Resoplé volteando mi cara para mirar a la carretera.

-Max, lamento mucho lo que viste, de verdad-, se lamentó ella.

-Olvídalo mamá, es lo que quieren todos, es lo que quiere el tío Emerson e Hilda, que yo haga de cuenta que nunca los vi-, solté.

-Hablé con ellos cariño, todo estaba bien-, explicó.

-¿¡Cómo puedes decir que todo está bien cuando ellos se burlan de Will en su propia cara!?-, vociferé.

-Max, solo tienes catorce, eres un niño, no puedes entender esto tipos de cosas-

-No soy un niño mamá, sé perfectamente lo que vi y lo que escuché, Emerson e Hilda se besaban a escondida mientras todos celebraban en la sala, el tío Emerson le dijo que quería decirle la verdad a Will, que él era su padre-, manifesté sintiéndome colérico.

-Sé que tu y Will son muy cercanos, sé que lo aprecias demasiado incluso más que a Erick o a las niñas, pero esto es algo en lo cual no podemos interferir, no es nuestro asunto, Max-, sostuvo Maite.

-Odio a esta familia, ¡odio a los Walton! -, grité.

-Para el coche, Darren-, le pidió mi madre a mi padre.

-Cariño, Max solo esta enfadado por Will, es entendible, aparte de que es su primo son amigos, no es necesario hacer esto-, indicó papá tratando de sensibilizar la situación.

-Darren, ¡para el maldito auto! -, volvió a pedir ella, molesta.

Mi padre se estacionó a la orilla de la carretera, ella abrió la puerta del copiloto saliendo del auto para ingresar a los asientos trasero, sentándose a mi lado.

Mamá me tomó el mentón obligándome a mirarla, estaba furiosa, podía ver la vena en su frente latir.

-Escúchame bien puberto estólido, puedes decir y hacer lo que quieras, intentar ser el chico rebelde que me hace ir a la escuela cada día encontrándote en la oficina del director, el chico que se queda en detención después de cada maldita clase, puedes intentar manipular a tu padre, ser el chico malo que tanto anhelas ser, pero nada en este mundo cambiara el hecho de que eres mi hijo, yo te di a luz, llevas mi sangre y por ende, eres un maldito Walton, ¿me escuchaste?-, rabió ella, moví mi cara intentando zafarme de su mano, pero ella soltó mi cara, pegándome una cachetada con la misma mano.

-Te hice una pregunta Max-, declaró volviendo a sujetar mi cara.

Clavé mis ojos en ella.

-Si tanto te importan los Walton, debiste de quedarte en Oregón con ellos-, escupí sin miedo, -Puedes quedarte con ellos, con la falsa de familia perfecta, yo y papá nos vamos a Irlanda-

Seduciendo a un Walton Where stories live. Discover now