Mundos Paralelos 4: "Cristales Rotos" (LGBT)

Capítulo 82

-M-mírame -Pedí, pero el no realizó ningún tipo de movimiento -A-Aiden...-

-N-no puedo -Susurró.

-¿Por qué no?-

-Porque siento la culpa consumir mi cuerpo cada vez que te veo a los ojos-

-¿Y por ello huyes? -Pregunté, causando que sus músculos se tensaran.

El no decía nada y yo, tenía miedo de aflojar mi agarre pues sentía que se escaparía de mi alcance y,obviamente, no quería averiguar qué es lo que iba a ocurrir después.

-¿Lo recuerdas?- Dije en un tono tranquilo. 

-¿Q-qué cosa?-

-Cuando te dije que te amaba con toda mi alma y que nunca iba a dejar de hacerlo por nada del mundo -

-¿Eh?-

Su cabeza se giró rápidamente en mi dirección tras oír lo que le había dicho. Pude ver en sus ojos la sorpresa y la confusión, pero en el fondo, también esperanza.

-¿C-cómo...?-

-Acabo de recordarlo -Interrumpí -Estábamos sobre una cama y tu... parecías preocupado porque no quisiera salir contigo cuando fuera mayor de edad. Tienes pensamientos muy raros -

Su labio inferior tembló y una enorme sonrisa se dibujó sobre ellos, como si hubiera rememorado aquel instante que tan precioso parecía.

-F-fue...la vez que ibas a volver a Los Ángeles con los tíos...-Dijo.

-Oh...ahora entiendo todo mejor -Sonreí e hice silencio algunos minutos -¿Sabes algo?-

Su cabeza negó y su cuerpo giró completamente en mi dirección, para así poder verme de la forma correcta. Aunque, de todas formas, no solté su mano.

-Cuando recordé esto...sentí muchas cosas en mi pecho. Y no sólo en esta ocasión, ya me ocurrió antes. Esto me da a entender que aunque no pueda recordar en mi memoria, mi cuerpo y corazón si lo hacen -Me quedé en silencio unos segundos -Y-yo sé que en el fondo, mis sentimientos te pertenecen y siento que cada vez necesito más que mis memorias vuelvan porque ya no aguanto tener todas estas sensaciones por culpa de ti y no ser capaz de entenderlas. Por eso, Aiden...ayúdame a saber que son y por qué van dirigidas hacia ti. Quiero comprenderlas sólo con tu ayuda. Así que te lo ruego...no me dejes-

El se mantenía en silencio, su sonrisa se había esfumado y sus ojos continuaban dejando caer miles de lágrimas, pero no pronunciaba una sola palabra y yo, ya comenzaba a sentir la desesperación aumentar en mi sangre.

-Aiden...a-ayúdame a que pueda amarte otra vez -

Sus luceros se ampliaron como dos platos y su expresión de frunció, llena de dolor, a la vez que se soltaba de mi agarre y, al igual que en la azotea, se abalanzó sobre mi en un abrazo, el cual me robo una sonrisa, antes de que lo correspondiera.

-¿Q-qué pasa s-si...t-te vuelvo a herir?- Preguntó entre sollozos.

-Me has hecho daño y el amor que te tengo no pareció cambiar. ¿Por qué debería ser diferente esta vez? -Lo abracé más fuerte -Ahora que no recuerdo nada...podemos comenzar de vuelta -

-¿Y si n-no te enamoras...o-otra vez?-

-Dudo que no lo haga. Las cosas que mi cuerpo sienten por ti, son demasiado fuertes. No me imagino mi corazón. Así que no le des mas vueltas -Lo separé de mi para poder verlo a los ojos -Ayúdame a enamorarme de ti una vez más, Aiden-

Sus labios se fruncieron y las lágrimas continuaron bajando de sus ojos, mas su cabeza asintió algunos pocos segundos después, antes de volver a abrazarme para llorar a mi hombro.