Los Elementales

Renacido De Las Cenizas: Capítulo 11

Después de un largo viaje en el cual Decim contó toda su historia a Morgan, al final llegaron a la Gran Ciudad del Sur, gracias a la gran velocidad del dragón del hielo, y por lo que concierne la ciudad, estaba completamente destruida y en llamas, eso sí no había rastro de ningún dragón por lo que Tarian debió de haberle matado.
Decim y Morgan descendieron del dragón pero el trasgo no.
-Os voy a dejar aquí si no os importa - dijo el trasgo - porque tengo una familia en este reino y además me prometiste que podría regresar con ellos si te ayudaba, Morgan.
-Lo sé pero si tienes informaciones sobre Igor o sobre cualquier cosa que pasé en este reino, no olvides de comunicarme.
El trasgo asintió y se fue con el dragón de aquel lugar.
-¿Y ahora cómo vamos a hacer para encontrar a Tarian? - pregunto Decim.
Entonces Morgan cerró los ojos por unos minutos y después los volvió a abrir.
-Está bajo aquellos escombros de allí - dijo Morgan señalando unos escombros a lo lejos.
-¿Cómo lo has hecho?
-Digamos que no eres él único que tiene poderes aquí.
Entonces fueron allí y efectivamente encontraron el esqueleto de Tarian que Decim lo cogió y se lo llevó en brazos de allí.
-Podría poder revivirlo pero para ello tenemos que ir a la fortaleza del caos - dijo Morgan.
-Voy a coger otro dragón y iremos volando hacía allí, debería haber alguno en el valle desolado - dijo Decim con seriedad sujetando el cuerpo de Tarian.
-¿Estás bien?
-Sí claro, ¿por qué preguntas?
-Porque mis poderes me han quitado mis sentimientos humanos pero no sé si los tuyos han desaparecido igualmente porque no has ni siquiera soltado una lágrima ni has dicho nada cuando has cogido el cuerpo de Tarian.
-Tienes razón hermana y la verdad es que yo creo que también son mis poderes que me han impedido sentir algo pero también siento una conexión.
-Dime, háblame más de esa conexión.
-Es como si sintiera lo que cada criatura del caos siente, es como si estuviera obligado a ayudarlos, como si alguien me estuviera tirando de las cuerdas.
Morgan no dijo nada más y cuando llegaron al valle, Decim cogió un dragón y salieron volando hasta una fortaleza que se situaba debajo de un volcán el cual a Decim le resultaba familiar. Después descendieron del dragón y pusieron el cuerpo de Tarian sobre un altar de piedra en medio de la sala principal.
-Aquí mi poder aumenta en gran cantidad pero no sé cuánto tiempo meteré para resucitar lo - dijo Morgan.
Entonces Decim miró hacia el exterior y vio los ríos de lava, las piedras volcánicas, los demonios y criaturas que andaban por los lugares. Para Decim ese sitio tenía una belleza inexplicable.
-Ya veo que habéiss vuelto mi señora - dijo un vampiro bien vestido entrando en la sala.
-Hola Drax, te presento a Decim, mi hermano - dijo Morgan al vampiro.
-Encantado de conoceross, vuesstra hermana me ha hablado mucho de ussted.
-És xases ec soso sío si cesos (el placer es todo mío mi señor) - respondió Decim.
-¿Dessde cuando ssabess hablar la legua de los vampiross?
-Me lo enseñaron además de que es un dialecto bastante fácil de hablar puesto que los vampiros habláis con 'x', 'c', 'z' y 's' únicamente porque os he más cómodo hablar así.
-¿Entoncess también hablass la lengua de loss elementaless?
-Nieb rûs (claro).
-¿La lengua del agua?
-Xirífilkejge ñefo wí (difícilmente pero sí).
-¿Y la lengua elfica?
-Dal xa yjh aqyka (eso es muy fácil)
-Esstoy impressionado, aquel que te ensseñará essass lenguass debe de sser un genio al igual que tú.
-Me elogia con tales palabras.
-Bueno el caso es que, ¿qué hace aquí Drax? - interrumpió Morgan.
-Pues he oído el rumor de que Tarian ha derrotado al poderosso Narix y ademáss te debemoss un favor por haber revivido a nuesstrass familiass difuntass, assí que he venido aquí para sserviross.
-Muchas gracias Drax pero...
-Llama a tus tropas y diles que vuelvan aquí dentro de unos meses cuando hayamos levantado a Tarian de su sueño - dijo Decim con determinación.
-Con mucho gussto - dijo Drax sonriendo.
Entonces el vampiro salió y se fue volando.
-¿Qué tienes en mente hermano? - dijo Morgan.
-Tarian se levantará muy confuso y lleno de ira contra los humanos por lo que necesitará ayuda para cumplir su venganza - respondió Decim.
-¿Estás seguro de esto?
-Sí, mi instinto me incita a hacerlo.
Y era cierto, algo le empujaba a Decim a tomar ese camino, a ayudar a Tarian en su venganza, a provocar el caos.
Entonces meses después Tarian se levantó y como Decim predijo, Tarian estaba sediento de venganza por lo que desplegó todo su nuevo ejército en dirección hacia la montaña helada y destruyendo todo lo que se interponía en su camino. Así fue como cayó la ciudad de Elaria, dejando el templo de Atlas intacto, y con ella muchas otras ciudades humanas fueron cayendo bajo el poder del caos y las llamas de Decim.
Por otro lado, los demás pueblos hicieron igual que el ejército de los no-muertos y empezaron a matar a todos los humanos que se encontraban en su camino. Era un genocidio en que los enanos, los trasgos, los elfos, las criaturas del océano, los dragones y otros estaban de acuerdo con una cosa: había que destruir a los humanos.
Fue entonces cuando Tarian reventó la muralla de la capital que Decim lo quemó todo a su paso dejando solo cenizas y polvo, nadie podía hacerle frente y nadie lo deseaba salvo una persona que salió del castillo con una espada apuntando hacia Decim.
-Atrás maldito demonio - dijo Igor.
-Vaya, ¿qué modales son esos Igor? - respondió Decim sonriendo.
-He dicho que te alejes.
-De acuerdo, pues en ese caso...
Entonces un rayo de fuego salió de las dos manos juntas de Decim y desintegró a Igor, la guerra había terminado.