La Luz De La Salvación: Capítulo 12 (final)

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La batalla contra los golosos fue la última batalla que harían los insectos porque después de aquel ataque Splite guió a los supervivientes de aquella masacre al sur donde construirían sobre las cenizas de la Gran Ciudad del Sur una colonia construida gracias a las hormigas que sobrevivieron a los que vinieron después. Costó un tiempo pero finalmente consiguieron crear una segunda cueva subterránea para los insectos que se habían acostumbrado a estar bajo tierra mientras que otros simplemente se expandieron por todo el reino ayudando a los demás y luchando tanto contra los golosos como contra los pocos humanos que sobrevivieron.
Parece un final justo para este pueblo y Splite hubiera estado orgullosa de saber que su pueblo era completamente libre como el resto de las bestias de los reinos, aunque lamentablemente no pudo observar los frutos de su sacrificio, murió después de haber construido la nueva colonia y haber dado la última y única ley que para entonces todo el pueblo de los insectos debía de seguir, y era seguir su instinto no a los demás. Así pues ella se fue, con esa última orden, y su espíritu viajo hasta el reino de los muertos donde se volvería a encontrar con Bob y Ebon, sus dos mejores y únicos verdaderos amigos que incluso en la muerte permanecieron unidos.
Así pues parece que todos los cabos de esta historia están atados, ¿no? Pues no porque recordemos que esta historia no habla solo de Splite y el reino de los insectos sino que también está incluida Mariah, esa mariposa que quedó encerrada en ámbar y que fue la única que se quedó entre las ruinas de la vieja colmena, que por culpa de la falta de vida y de los cristales recogidos por los hombres de Tarian, se llenó de hongos que daban al aire un gas tóxico que hacía alucinar a todo aquel que lo respirase, pero eso no significa que nadie pudiera entrar. Cierto es que no quedó nada después de que los mineros de Tarian sacaran todos los cristales y mucho menos cuando se hicieron sorprender por unos goblins que les atacaron una vez las obras terminadas, así pues lo único que quedaba allí eran los hongos y las ruinas del castillo donde Mariah esperaba a ser liberada.
Como habéis podido imaginar por la forma en la que os he dicho esto efectivamente alguien entró, unas sombras que tras el caos de la guerra aspiraron todo el gas con una máquina y entraron dentro de las ruinas del castillo. Una vez allí una de las sombras cogió una pistola de color negro con un símbolo parecido a una llama en uno de los lados y tiró una bola de fuego con ella sobre la prisión de Mariah. Esta última se levantó tras meses de sueño y miró a sus libertadores los cuales eran altos, fuertes aunque habían otras características que los destacaban más: había uno que tenía pinzas, otro que tenía puños de hierro y una cabeza parecida a un tiburón martillo, otro que tenía una cabeza puntiaguda y otro que tenía un gorro de marinero sobre la cabeza y una marioneta de un tiburón en su mano izquierda. Pero el que más destacaba entre las figuras sombrías que no se veían bien por la falta de la luminosidad de aquellas ruinas, era el que estaba plantado delante suya con la pistola que la salvó en su mano izquierda y un traje elegante que cubría todo su cuerpo y un sombrero de capitán sobre la cabeza. Y aunque Mariah no pudiera ver bien los cuerpos de aquella gente, ella sabía que no habían venido a hacer nada bueno y se puso enseguida a la defensiva echándose hacia atrás y preparando sus alas para cualquier ataque aunque el que parecía el jefe de aquella banda guardó su pistola y miró fijamente a Mariah con sus ojos rojos como la sangre.
-Calmate, llevas mucho tiempo aquí encerrada y te puede parecer todo un poco confuso pero nosotros no queremos hacerte ningún daño - dijo la sombra.
-¿Y quién erez tú? ¿Por qué me haz liberado? - dijo Mariah confusa.
-Porque conocemos una isla en el mar donde hay una criatura que nos sería de gran utilidad para conquistar el reino de Atlas y todos los demás, pero lamentablemente esa criatura está dormida como tú desde hace muchos años.
-No haz rezpondido a mi pregunta.
-No lo entiendes, ¿verdad? Los insectos os extendisteis por todo el reino y os mezclasteis con la naturaleza perdiendo todo vuestro verdadero potencial, pero tú tienes poderes que todavía siguen intactos y por lo tanto solamente tú y tu sangre de guerrera Rhino podéis ayudarnos -
Entonces soltó una sonrisa con sus dientes afilados y dio una señal para que uno de los piratas que era un cangrejo de dos metros vestido de marinero cogiera a Mariah de las alas y la llevará junto al resto de la tripulación a un barco volador que estaba esperando sobre el agua - siguiente parada la isla olvidada o como entonces se llamaba la Isla de Taken.

Los ElementalesWhere stories live. Discover now