Sangre Y Polvo: Capítulo 5

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Los goblins alterados empezaron a correr por todas partes preparándose para la batalla incluido el propio rey, lo que permitió a Elena a escabullirse entre ellos y finalmente salir fuera donde una terrible batalla se estaba haciendo.
Por un lado los goblins montaban sobre los dragones más pequeños y atacaban con ellos las fuerzas de Tarian mientras que intentaban también levantar a los más grandes para luchar, mientras que del otro lado habían elementales de lava saliendo de los ríos y lanzando bolas de fuego por todas partes mientras que habían esqueletos y muertos vivientes luchando tanto por tierra como por aire gracias a unos murciélagos enormes, que Elena supuso que eran vampiros. Pero el más impresionante era Tarian, él iba con su armadura puesta sobre sus huesos y con los ojos en llamas mientras gritaba de furia lanzando bolas de fuego con su hacha llameante y todo eso montado encima de la cabeza de un dragón serpiente esquelético hundido en el magma del río, el cual echaba llamaradas azules mientras tanto. Aunque lo que más llamó la atención fue que justo debajo de él estaban Mudi y Máximo, este último con su casco, luchando contra la horda de goblins, así que Elena se acercó a ellos y estos la recibieron con un abrazo tras haber acabado con sus adversarios.
-¿Estás bien Elena? - dijo Máximo compartiendo el abrazo con Mudi que estaba sofocado en medio de ellos dos aunque después se soltaron segundos después.
-Pues estoy bien pero por los pelos, un poco más y me hubiera convertido en la madre de un ogro o peor - dijo Elena, lo que dejó confuso a Máximo hasta que Tarian bajó de su montura.
-¿Esta es la dueña de ese prodigioso asesino? - dijo Tarian imponente como siempre.
-No soy su dueña, soy su socia, ¿verdad Mudi? - pero este como siempre no respondió y simplemente levantó los hombros.
-Da igual, el caso es que ahora que estás a salvo vamos a ejecutar tu plan Máximo.
-¿Qué plan?
-Mientras estabas encerrada nosotros estuvimos planificando una manera eficaz de terminar con Godor y sus goblins pero para ello necesitamos tu ayuda. Lo que haremos es muy sencillo: primero subiremos al volcán con la ayuda de uno de los murciélagos gigantes, luego aterrizaremos dentro del cráter y sacaremos de allí a Terrasix para destruir a todos los goblins y tomar el control sobre los dragones, ¿alguna pregunta? - dijo Máximo mientras Tarian se lanzaba contra los goblins que intentaban huir de él tras verlo.
-Solo una, ¿no nos vamos a quemar si entramos en un volcán activo?
-No te preocupes por eso, en realidad ahora mismo según mis cálculos Terrasix debe de estar descansando por lo que el volcán estará más frío ahora mismo, además de que hay una parte que es solo roca donde los goblins pasan para visitar al rey dragón.
-Entonces vamos a por ellos.
Así entonces se montaron encima de uno de los murciélagos que pasaron por allí para recogerlos, luego entraron dentro del cráter y el murciélago los dejó en la base de piedra del volcán junto a la piscina de magma.
-Bien, ahora solo falta que tú...-dijo Máximo aunque justo Godor apareció por detrás y cogió a Elena mientras que sus guardias, armados con picas, se pusieron en contra de Mudi y Máximo.
-Vaya, si es el general de las fuerzas de Tarian, que sorpresa encontrarte aquí - dijo Godor vacilando.
-Déjala Godor, de todas maneras estás perdido.
-No del todo joven humano, todavía tengo mi arma secreta - dijo el rey orco sacando un cristal elemental de color blanco de su bolsillo con su mano libre - ¿sabes lo qué es esto?
-Un cristal elemental del hielo, los dragones se vuelven más dóciles ante el frío, ¿cómo lo conseguiste?
-Vamos a decir simplemente que mis ancestros poseían ya este artefacto desde antes de la guerra de los titanes e incluso se lo daré a mi descendiente una vez que haya implantado mi veneno en esta escurridiza rata - entonces cogió el cristal y lo levantó en el aire aunque justo el cristal de manera inesperada explotó en sus manos - ¡¿Qué?! ¡¿Cómo es posible?! Un cristal así no puedo ser reventado así como así.
-Parece que estás acabado Godor.
-No del todo, todavía tengo a la chica - entonces Godor se metió rápidamente en el túnel secreto por donde había venido y los guardias se lanzaron sobre mudi y Máximo - ahora sí eres mía - dijo Godor besando a Elena e introduciendo en ella un líquido negro que escapaba por su boca.
Por suerte, de repente la lengua de Godor se quedó helada tras tocar la de Elena y mientras esté gritaba de dolor, la joven se escabulló y poniéndose en frente de la lava, puso su mano encima de esta. Entonces de la lava salió un dragón del tamaño de una montaña con la piel verde y una corazada echa de piedra que se quedó mirando a Elena con sus grandes ojos grises. Pero antes de que reaccionará, Godor se acercó una vez más por detrás de Elena aunque esta vez el dragón fue más rápido y le atravesó con uno de sus dientes antes de devorarlo dando a muerte al rey orco.
Entonces Elena y los demás salieron por el túnel secreto mientras que Terrasix se elevaba en el cielo negro y con sus poderosas alas desplegadas lanzó un grito que hizo que todos los dragones tirarán a los goblins al suelo y se inclinaran ante su rey, Tarian había ganado la batalla. Así entonces Elena y Máximo estaban a punto de gritar de alegría pero justo Elena vomitó un líquido negro y cayó desmayada en el suelo ardiente del recién proclamado territorio de los dragones de Terrasix.

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