#56

41 7 29
                                    

Ese día, tal comentario de Namjoon fue lo máximo que pude escuchar, según él, no merecía saberlo y lo mejor sería que me mantuviera alejada de ese tema por el bien de todos.

Aún así, mis salidas con mis amigos siguieron en pie, solo que seguía ese espacio vacío queriendo ser llenado, y nosotros no hacíamos nada más que ignorarlo.

Por otra parte, Jungkook era el responsable de que sintiera que todo estaba bien cada vez que hablábamos por teléfono, salíamos a lugares nuevos en la ciudad o simplemente pasábamos la noche juntos. Sabía que tenía muchas cosas atrapadas dentro de mi cabeza en estos momentos, pero solo bastaba con un mensaje de su parte para hacerme ver como una adolescente al momento de que su crush se acercara a hablarle.

También aproveché de pasar tiempo con Taehyung como solíamos hacerlo cuando estaba Hoseok, pero esta vez mamá se nos había unido, y con ella Seungtae.

No quería armar mucho drama por eso, ni tampoco quería convertirlo en la razón de mis dolores de cabeza, así que simplemente llegué a la conclusión de que dejaría el asunto en manos de quienes realmente pertenecía, Seonmi y Seungtae. Según ambos, no debía preocuparme por la ex-esposa del hombre, porque finalmente había firmado los papales de divorcio y cada quien iba por su lado actualmente.

Taehyung parecía encantado con él porque le quedaba bien ese papel paternal que un niño como mi hermano necesitaba, lo llevaba a la escuela, acompañaba a Seonmi a las reuniones de padres que hacían, nos visitaba constantemente para ver si estábamos bien, e incluso se sentaba conmigo para escuchar cualquier cosa que quisiera decir, no olvidando mencionar que estaría ahí si necesitaba ayuda en algo.

—¡Te queda hermoso! —chilló Inha detrás de mí, viendo como me quedaba aquel vestido hecho por ella frente al espejo de su habitación.

Luego de tanto pensar por el vestido perfecto para mí, me hice el favor de recordar que tenía una hermosa amiga la cual tenía pasión por la moda y crear atuendos, así que solo bastó con decirle que necesitaba de sus dotes creativos para empezar a hacerlo.

—Está lindo, no, ¡está bellísimo! —lo miré de arriba a abajo con encanto —Eres increíble —halagué dándole un abrazo —Me verás en tu tienda todas las semanas —avisé.

—Más te vale, sino no te doy descuento —bromeó haciéndome reír —Pero mírate, estás radiante, vas a resaltar entre tanta gente —tomó mi mano para darme una vuelta —Tengo una amiga bien sexy.

—Y yo tengo a una amiga talentosa —volví a enganchar mis brazos en su espalda —Siento que lo amo.

Inha había decidido hacer un vestido rojo vino que caía exactamente a la par de mis pies, con finos tirantes rodeando mis hombros y cuello en forma de V.

—¡Yo también! —concordó en un chillido de orgullo —Ahora quiero hacerte miles —sonrió tomando mis hombros y apoyando su barbilla en uno de éstos —El cumpleaños de Seung es en menos de 3 meses, concédeme el honor de vestirte para esa ocasión también.

—Acepto —hice una pequeña reverencia para luego compartir risas.

—Pero haré uno más para la ocasión, no creo que te guste estar con vestido largo en medio de una discoteca llena de gente borracha —negó, frunciendo sus labios —Lo que sí puedo dejar es el escote, se te ve hermoso.

—¿Qué haces viendo tanto mi escote, eh?

—Lo envidio porque es más grande que el mío, seguro tu novio lo disfruta mucho.

—¡Inha! —reprimí una risa ante el comentario.

—Oh, Seung me está llamando —miró su celular y se alejó para atender luego de guiñarme el ojo.

It's Always YouWhere stories live. Discover now