#17

71 15 20
                                    

—Cuidado ahí —Jungkook señaló unas piedras que estaban atravesadas en el camino de tierra en aquella montaña.

Hasta ahora, no sabía porqué rayos había aceptado venir a la montaña junto a él a estas horas, nunca me imaginaría que diría eso, porque para ser honesta, estaba esperando que mencionara cualquier otro lugar.

Pero aquí estaba, atada a su pensamiento de que la ciudad entera desde allá en la cima se veía más bonita y valía la pena apreciarla al menos una vez.

Estaba subiendo una parte algo empinada y con bastantes rocas alrededor cuando di un paso en falso haciendo que casi cayera al suelo lleno de hojas, pero agradecí que Jungkook fue lo suficientemente rápido para evitarlo.

—Ya esta es la tercera vez —dijo mientras me soltaba —Tendré que cargarte para que no te termines cayendo de verdad —comentó pensativo.

—No te atreves.

—¿Tú dices? —asentí, pero en ese momento se agachó para tomarme de las piernas y montarme en su hombro, algo que pasó tan rápido que apenas me dio tiempo de procesar.

—¡Jungkook, bájame! ¡Yo puedo sola! ¿No recuerdas cuando te dije que no me gustaba esto porque sentía que me caía? Bueno —pedía sin parar de moverme, y a la vez estaba sorprendida por la fuerza que poseía para llevar encima un peso como el mío en este tipo de camino —¿Cómo tienes tanta fuerza? —pensé en voz alta sin poder creerlo.

—Ejercicio —contestó orgulloso —Además, eres ligera, podría cargarte fácilmente.

—Creí que el cardio no era tu parte favorita —repetí sus palabras, lo habíamos estado haciendo desde hace alrededor de 20 minutos.

—Pero cuando no estás solo se vuelve divertido.

—Bueno, realmente no estoy haciendo cardio porque no me dejas bajarme —recordé con ironía.

—Falta poco para llegar, solo espera un poco más —informó y decidí rendirme, ya me había cansado de darle golpes y suplicarle que me bajara, algo que sabía perfectamente de Jungkook era como mantenía su palabra.

Cuando finalmente tocamos la cima, me bajó cuidadosamente pero al momento de estar de pie otra vez un leve mareo invadió mi cabeza haciendo que perdiera el equilibrio, Jungkook tomó mi mano con fuerza y comencé a reír por el posible hecho de caerme de nuevo ya estando aquí arriba.

Miré hacia un lado donde se encontraba la ciudad y quedé totalmente sin palabras, dándole toda la razón a Jungkook sobre lo que había dicho anteriormente, de verdad era una vista increíble que toda persona debería ver al menos una vez en su vida.

—Te dije que valía la pena.

—Esto es hermoso —comenté fascinada —Podría mirarlo por horas.

—¿Por qué no lo hacemos? —lo miré con sorpresa, pero su mirada me decía que estaba dispuesto a hacerlo sin vacilos.

—Pero casi oscurece.

—No hay nada que pueda asustarnos, a menos que me esconda e intenté pasarme por un animal salvaje.

Me dejé convencer y nos sentamos para seguir apreciando la naturaleza a nuestro alrededor, señalando también algunos lugares que desde aquí conocíamos. Fue un rato bastante agradable y que tampoco me permitiría olvidar, ya que pasar tiempo junto a Jungkook se iba convirtiendo poco a poco en una de mis cosas favoritas, él siempre llegaba cuando algo estaba roto para reunir las piezas y arreglarlo.

Fuimos de vuelta al auto cuando comenzó una pequeña llovizna que luego se intensificó con los minutos, durante el camino hacia abajo sentía como mis fuerzas se iban a agotando poco a poco por lo que no quería seguir caminando, Jungkook se percató de esto y se ofreció a llevarme en su espalda, cosa que no reprocharía como lo hice anteriormente, así que casi me lanzo a él.

It's Always YouOnde histórias criam vida. Descubra agora