#64

39 5 45
                                    

“Creo que todavía te quiero”.

Cinco palabras que me atormentaban desde que me lo había dicho, y ya eran altas horas de la noche donde me encontraba sentaba en mi cama rodeando mis piernas doblabas. 

No tenía ni idea de lo que tramaba Jungkook con su comportamiento tan extraño y volátil, pero a mí lo que me producía era desesperación y nada de gracia. Quería gritar, golpearlo, pero a veces solo quería abrazarlo. 

No sabía cómo actuar con él, porque no conocía sus intensiones, a pesar de alguna vez haber tenido el gusto de conocerlo, pero ahora las cosas habían cambiado. 

Después de su pequeña confesión, no obtuvo respuesta de mi parte, por lo que simplemente le pedí que se fuera al terminar con su rostro y abdomen, siendo mis últimas palabras un "cuídate" que sonó muy mísero y amargo. 

Los siguientes días llegamos a toparnos múltiples veces, él estaba en algunas ocasiones con Jin y Jimin, con personas que yo no conocía, otras con Chiara, Seowoo y Sooah, o con Yoomi. Por mi lado, siempre estaba sola, pero lo peor de todo no era eso, sino que hubieron momentos donde nos vimos al mismo tiempo, y la sensación no era nada más que incomodidad mezclada con clavos sueltos.

Todo lo que había hecho Jungkook había sido decir aquello, sin ir más allá, sin tomar acciones, sin demostrarme nada.

Y aún así le di espacio al tema para entrar en mi cabeza y dedicarle un tiempo que me servía para querer golpearme, porque si algo me describía ahora, era la palabra estúpida. 

—Noona —llamó Taehyung —Yoongi hyung me va a dar a Holly por dos días, podré jugar con el y pasearlo, ¿no es increíble? —preguntó con emoción sentado a mi lado en el comedor. 

—¿En serio? —cuestioné con asombro y él asintió repetidas veces —Eso quiere decir que te lo robaré a ti por unas horas —bromeé.

—¡Sueña! —sacó su lengua a mi dirección y empecé a reír. 

—¡Tará! —Seonmi puso sobre la mesa una bandeja de mochis de distintos colores.

—Tú solo haces postres en ocasiones especiales, ¿qué hay por ahí? —pregunté muy curiosa y con aire divertido. 

—Mañana es tu cumpleaños, mi amor —amplié mis ojos sin creer lo que había dicho, miré a Taehyung y éste asintió a las palabras de mamá —No me digas que se te olvidó.

—Ay no —pegué mi frente de la mesa haciendo que mechones de cabello descendieran alrededor de mi rostro —Sí —admití avergonzada.

—Has estado estudiando para muchos exámenes, es normal que se te pase —dijo de manera comprensiva —Pero tranquila, ya tengo algo preparado para ti —sonrió con dulzura. 

Cuando terminamos de comer los mochis y me había cambiado para salir a verme con Yoongi, pasaba por los callejones de la ciudad para cortar a camino a mi destino, pero a mitad de éstos alguien jaló mi brazo y me desvió de mi ruta. 

—S-Seung —pronuncié a duras penas, teniendo su cuerpo muy pegado al mío ya que estaba presionándome contra la pared.

—Me debes una, Seoyeon —amenazó de mala gana —Tu novio me partió la cara el otro día, así que muero por devolverle el favor a él contigo —al terminar de hablar, me presionó mucho más contra el muro a mis espaldas, haciendo que mi cabeza golpeara éste sin cuidado alguno. 

—No sigas, por favor —pedí —Ya déjame tranquila —agregué, respirando difícilmente debido a su antebrazo apretando mi cuello.

—Me temo que eso no pasará —replicó con rudeza, soltándome segundos después cuando su vista dio con alguien a unos metros, haciendo que tosiera unos segundos para recobrar aire —Bebé, por aquí —cambió su tono drásticamente a uno más suave, haciéndole señas a Inha de su paradero. 

It's Always YouWhere stories live. Discover now