Nuestra Promesa G!P

Evitar la tentación.

Pov Poche.

Nos separamos lentamente y ella me sonrió.

-No puedo creer que hayas venido hasta acá solo porque sabes que le tengo miedo a los...¡Ay noo!

Calle me abrazó de nuevo al escuchar nuevamente un trueno, yo me reí, la envolví en mis brazos y ella me dijo consentidamente que no me burlara.

-Es mejor que nos acostemos, no te preocupes por mí, yo velare tu sueño-Le dije invitándola a la cama.

Calle se acostó en la cama, tuve que ver hacia el balcón para no verle las piernas, quizá fue mala idea haber hecho esto, pero se que ella me necesitaba. Yo me quite los zapatos y cuando me iba acostar en la cama ella me interrumpió.

-¿Te vas a dormir con Jeans?, Será muy incomodo-Calle me preguntó y yo me puse nerviosa.

-No, pero no traje pijama-Le respondí y ella se río de una forma muy hermosa.

Adoro escuchar el sonido de su risa, es una sinfonía para mis oídos.

-Mirá, allá en mi clóset tengo otra de estas camisas grandes, colocatela para que te sientas más cómoda-Ella me dijo señalando su clóset.

Caminé hasta su clóset, lo abrí y saqué una camisa negra larga. Me tenía que quitar toda la ropa pero sentía pena de que Calle me viera.

-Calle...¿Podrías cerrar tus ojos?-Le pedí y ella me miró confundida.

-Poche, somos mejores amigas, no soy ninguna desconocida-Ella me dijo poniendo los ojos en blanco.

-Lo sé, pero...tú sabes que yo...bueno yo no soy como tú y...

-Ya, tranquila, mirá, me tapare los ojos y así no te veré.

Calle cubrió sus ojos con sus manos y yo me sentí un poco más aliviada, le di la espada a Calle, me quite la blusa y los pantalones, luego me coloqué la camisa que por suerte me llegaba casi a las rodillas. Regresé hacía donde estaba Calle, me subí a la cama y me coloqué a su lado. Los truenos eran más continuos y además empezó a llover fuerte, Calle me abrazó y recostó su cabeza sobre mi pecho. Sentí que mi corazón empezó a latir con fuerza y además sentía unas inmensas ganas de hacerle mimos, estar así con ella me hacía sentir mucha paz.

-Todo esto me recuerda a cuando éramos niñas, gracias a ti podía controlar mi miedo a los truenos-la escuchaba atenta y acariciaba su cabello-todo fue muy díficil cuando me fui, cuando tenía miedo no tenía a quién acudir, no hasta después que conocí a Pepe, él me ayudó a poder controlarme un poco-Rodé mis ojos al escuchar el nombre de su novio.

-Después de que te fuiste le tome más amor a la lluvia, porque me recordaba a ti, pero a la vez me hacía sentir triste al pensar que ya no estabas conmigo-Le confesé con melancolía, ella alzó su rostro y nuestras miradas se conectaron, solté un suspiro al ver su hermoso rostro iluminado con la tenue luz de la luna.

-Pero ya estoy aquí, ambas lo estamos y el saber que no perdí tu amistad es lo más importante para mí-acaricie su rostro con mi mano y luego la mantuve en su mejilla.

-Eres tan hermosa, Calle-acerque lentamente mi rostro al de ella, cerré mis ojos, un impulso enorme por besarla se apoderó de mí y justo cuando lo iba hacer ella se separó de mí y se corrió en la cama dejándome atónita.

-¡Gracias por estar aquí ,Poche!, tengo sueño y si no te molesta me voy a dormir.

-Tranquila, sueña lindo, Calle-Le respondí y lleve mis manos a mi cabeza.

¿Qué mierda me pasa?, Estuve a punto de besar a mi mejor amiga, es que...ella está removiendo muchas cosas dentro de mi, es como un remolino que está causando un desastre con su pasó, de seguro Calle piensa que soy una idiota y la verdad ves que si lo soy.