Nuestra Promesa G!P

No cierres los ojos

Pov Calle

No podía creer todo lo que había escuchado. Sentía demasiada rabia contra Fernanda y contra mi también por no haber confiado lo suficiente en Poche. Me da repulsión pensar que Fernanda se atrevió a tanto, mirá que tener que drogar a alguien para poder estar con ella es no tener dignidad como mujer. Por suerte Pepe y Sebas descubrieron toda la verdad, esa es otra de las razones por las cuales amo a mi mejor amigo, el siempre es muy analítico y no suele juzgar sin razones.

-¿En que piensas?-Poche me preguntó besando por debajo de mi cuello.

Ambas habíamos decidido meternos a nadar un rato al lago ya que ella y yo nos habíamos quedado a solas.

-En lo tonta que fui al pensar que tú podrías haberme engañado. No sabes cuánto me dolió imaginar que te perdí. Sentí que mi mundo se derrumbaba, yo...yo no puedo imaginarte ajena a mi-Le dije de manera acelerada. Poche tomó mi rostro y plantó un corto beso en mis labios.

-Eso es imposible mi amor-Ella me dijo mirándome con esos intensos ojos color oliva-por qué yo jamás podré amar a otra mujer que seas tú. Estoy segura que lo que siento por ti jamás se podrá igualar al sentimiento por alguien más. Simplemente solo hay una Daniela Calle sobre la faz de la tierra y la que tiene suerte de tenerla soy yo-ella me dijo haciéndome sonríe como boba.

-Ya me siento en paz. Te juro que siento que ya nada ni nadie podrá separarnos, yo jamás permitiría que eso suceda, jamás permitiría que me vuelvan a separar de ti-Le dije acariciando sus definidos brazos con mis manos.

-Entonces...¿Me prometes que ya no volverás a desconfiar de mi, pero sobre todo que no dejarás de luchar por nuestro amor?-Ella me preguntó acariciado mi espalda baja con sus manos.

-Deja-me acerque a su oído para hablarle-que te lo demuestre con hechos-tome el lóbulo de su oreja entre mis dientes y tire de el-y no con palabras-lo chupé sonriendo al escuchar un gemido de placer escaparse de su boca.

Empecé a besar el cuello de Poche usando hábilmente mi lengua, clave mis dientes en el al sentir que ella había tomado mi trasero entre sus manos abriendo mis nalgas y luego apretando mi trasero de una forma deliciosa.

-¡Ah...no sabes cuándo me encantas Daniela!

La sensación de su piel mojada sobre la mía era tan excitante, la sensación era exquisita, Poche tomó mis labios en un beso hambriento y lleno de deseo de esos que te roban el aire por completo.

-Hazme tuya Poche...quiero sentirte en mi

-¿Enserio me quieres, Daniela?

-Oh, por supuesto que sí...

Ella bajo las tiras de mi sostén y luego lo desabrochó liberando mis pechos. Sentía mis pezones rígidos debido a que ya estaba excitada al sentir las caricias de Poche.

-¡Mierda! Me encantan tus pechos, para mí son perfectos-Ella dijo apretandolos con sus manos, cerré mis ojos e hice un gesto de placer al sentir como ella los separó con sus manos y luego los volvió a unir apretandolos de una forma tan deliciosa. Sentí sus manos moverse en masajes circulares sobre mis pechos.

Con mi mano traviesa sentí que el miembro de Poche ya estaba duro y firme tal cual me gustaba. Con mi mano empecé acariciarlo provocando un gruñido departe de Poche.

Poche beso mis clavículas y luego se dirigió lentamente a mis pechos donde beso de forma delicada hasta que llegó a mi pezón. Ella jugó con el moviendo su lengua en círculos que iban de un ritmo lento a un ritmo rápido mientras me veía con esos ojos llenos de lujuria.

-Mmm...sí, chupalos así Poche-gemí sin perder la vista de sus movimientos.

La sensación de sentir su boca cálida y húmeda chupando de ellos hacían que me sintiera en el éxtasis del placer. Mi corazón estaba demasiado agitado y mi boca se sentía reseca. Mierda, ella tiró de mi pezón con sus dientes, sentía mi centro demasiado húmedo y mi clitoris ya estaba hinchado y palpitante por la excitación.