Un desastre

4.5K 419 60
                                    

Pov Calle.

Ambas íbamos en el carro de Sebas, Poche tenia una mano en el volante, mientras que con su otra mano sostenía la mía. Estaba muy emocionada, hoy tendremos de nuevo una cita, espero no haber exagerado con mi atuendo. Mi mamá me dijo que me lo colocará en una ocasión especial y la verdad considero que está lo es, no lo sé...simplemente me quería ver linda para Poche. Me encanta la forma en la que me vio cuando baje las escaleras, deseo con el alma que jamás se acabe ese brillo en sus ojos al momento de mirarme.

-Amor, este no es el camino para el pueblo-Le dije al no reconocer la ruta que ella había tomado.

-Es que no vamos para el pueblo, mi chiqui-ella me dijo viéndome rápidamente con una sonrisa.

-¿Ah, no?-Le pregunté alzando una ceja y ella negó.

-Ya verás a dónde iremos-Ella me respondió y yo asentí.

Ella continuó manejando, ambas íbamos platicando sobre varios temas a la vez y dentro de esos estaba el de mi mamá, a las dos aún se nos hacía muy raro el cambio que ha reflejado últimamente, Poche sigue necia que quizá mi mamá consumió algo y yo le dije que no, que mi mamá no es de las que hacen eso. Después de un tiempo prudente en el que Poche manejo llegamos a lo que parece ser el lago, yo la mire en busca de una respuesta y ella se limitó a encoger sus hombros.

-Llegamos a nuestro destino-ella me dijo apagando el motor del auto y luego abrió la puerta para ayudarme a salir.

Al salir mi mandíbula cayó al piso, todo era hermoso, había una tienda de campaña, una fogatas y aparte velas iluminando el lugar, también habían sobre el piso pétalos de rosa, comida y un ramo de girasoles.

-Poche...¡Esto es hermoso!-La miré y me lancé a sus brazos para abrazarla y dejar sobre su rostro varios besos.

-Es para ti, mi amor-ella me respondió, tomo el ramo de girasoles y me lo entregó-y estos también son para ti.

Los tomé y me agradecí con una sonrisa y un beso delicado sobre su mejilla.

-No te hubieras molestado con todo esto-Le dije y ella tomo mis manos entrelazandola con las de ella.

-No es ninguna molestia, mi amor. Solo espero que no te moleste que no te haya dicho y que te haya traído acá, en vez de llevarte a algún lugar para lucirte con ese hermoso vestido que traes puesto-ella me dijo un poco apenada.

-No te proecupes por eso, la única persona que me interesaba que me viera lo está haciendo en este momento-Le respondí viendo cómo se sonrojaba. Poche abrazo mi cintura y recostó su cabeza sobre mi pecho, yo la envolví en mis brazos y besé la coronilla de su cabeza, me encanta tanto tenerla así.

Poche se separó lentamente de mi, me miró a los ojos, dio un suspiro profundo y me sonrió.

-Ven, sentemonos, hay algo importante que te quiero decir-Al escuchar la palabra importante mi corazón empezó a latir con fuerza.

Ambas nos sentamos en uno de los troncos que estaba enfrente de la fogata. Sentí el nerviosismo de Poche al quererme hablar, yo la veía atenta, ella mordió su labio inferior, cerró sus ojos por un par de segundos y luego los abrió de nuevo.

-Estoy muy nerviosa-ella me confesó y me hizo sonreír-Calle, esto que siento por ti es tan inmenso que ya no soporto más tenerlo guardado en mi pecho. Debo admitir que me siento patética al haber practicado esto muchas veces en el espejo y que ahora mis nervios me traicionen-ambas nos reímos, ella tomo mis manos y empezó a jugar con ellas-Yo te he querido desde que éramos niñas, siempre mi amor por ti ha sido muy puro y lo más valioso que he tenido...contigo tuve las primeras sensaciones de amor y creo que el toque final para darme cuenta de lo que siento por ti fue ese beso que me diste ese día mientras estábamos jugando en tu casa e hicimos la promesa...nuestra promesa, me besaste y sentí una sensación extraña pero muy placentera, sentí que tenía un millón de mariposas revoloteando dentro de mi, luego tú mamá me echo de tu casa y le conté a mi papá, quería encontrar una repuesta a eso que estaba sintiendo y debo admitir que la primera desilusión que tuve fue al darme cuenta que te habías ido, te fuiste dejando algo inconcluso entre nosotras. Pero cuando regresaste encontré la repuesta a todas mis preguntas y me di cuenta que yo no te podía ver cómo una amiga, porque a los amigos no se les ama de la forma que yo te amo a ti y ahora solo quiero aprovechar este momento para pedirte que me des la oportunidad de llevar lo que tenemos a otro nivel y poder ser tu novia, así que...Calle, mi gigantona...¿Me das ese privilegio de ser tu novia?, Te prometo por mi goma de mascar favorita que serás siempre la persona más feliz a mi lado-Ella terminó de decirme y yo no podía contener mis lágrimas, sentía un nudo en la garganta, espere tantos años por este momento.

Nuestra Promesa G!PWhere stories live. Discover now