Mint and Roses - DahMo

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Momo y Myungsoo se encontraban en algún tipo de competencia de miradas, ninguno había dicho nada luego de que el muchacho haya realizado la pregunta. Momo siempre imagino que el conocer a la familia de su omega se presentaría en un tipo de escenario completamente distinto. Por el que estaba viviendo no era para nada normal.

No sabía si su suegro estaba bien o mal, incluso si lograría salir de toda esta situación, la madre de la chica era más lágrimas que persona y su hermano estaba delante de ella intentando intimidarla con su mirada, lo cual no estaba funcionando en lo absoluto.

Podría decir que no lo era y evitarse toda la molestia de explicar la situación en ese momento o ser valiente y callar al chico confirmando que era la alfa de Dahyun. Decidió hacer lo segundo.

—Sí, lo soy. Soy la alfa de Dahyun. —Su voz era firme y segura, como su postura, no se iba a dejar intimidar por un alfa mucho menor que ella en edad y jerarquía.

El muchacho la observo fijamente por varios segundos, que parar Momo fueron horas, hasta que avanzo tranquilamente hasta ella. Se preparó mentalmente para recibir un puñetazo, nunca en su vida había peleado a golpes con otra persona, pero, si el chico la atacaba no se iba a quedar atrás.

Myungsoo avanzo hasta quedar a una distancia prudente de la mayor, puso ambos brazos a sus costados y se inclinó hasta llegar a un ángulo de 90 grados.

—Es un honor para mí conocer a la alfa de mi hermana. —Se irguió de nuevo y estiro su brazo derecho hacia la japonesa. —Estoy feliz de que Dahyun haya encontrado una alfa que se preocupe por ella, por favor, cuídala mucho. Cuando termine todo esto las invito a ambas al restaurante de mi omega, es una chef increíble. —La sonrisa inocente del menor y sus acciones la dejaron al aire por unos segundos.

— ¿Eh? —Podía sentir incluso a su lobo estar en bastante confundido, ella esperaba puñetazos y patadas, no una invitación para una cena.

— ¿Noona, se encuentra bien? —Momo sacudió levemente su cabeza para luego extender su brazo y estrechar la mano del chico.

—Descuida, estoy bien. —Sonrió intentando sacar de su cabeza los cientos de escenas de acción que se imaginó recrearían con el chico que tenía delante si llegaban a pelear. —El placer es mío, siento tener que presentarme en una situación como esta, hubiese preferido hacerlo de la manera correcta.

El chico negó mientras soltaba la mano de la alfa. —No te preocupes, lo entiendo, también me hubiese gustado que todo esto no haya pasado. —Sonrió tristemente y luego suspiro. —Mi padre siempre fue mucho más estricto y duro con Dahyun que conmigo. Cuando éramos pequeños ella siempre me cuidaba, mucho de lo que sé fue porque ella me enseñaba. —Suspiro mientras pasaba sus manos por su cabello. —Amo a mi hermana más de lo que puedo decir o demostrar, ella es una gran luz e inspiración para mi vida. Es mi ejemplo a seguir en todo y estoy orgulloso de decir que soy su hermano, ni siquiera me interesa si me creen o no. —Cruzo sus brazos sobre su pecho y recostó su espalda en la pared. —Por eso he tenido cientos de discusiones con mi padre, para que sea más flexible con ella, entiendo que sea la mayor y todo lo demás pero Dahyun se merece mucho más reconocimiento del que recibe. —Momo asintió ante lo dicho, la omega era alguien digna de admirar y seguir, se merecía solo lo mejor. —Siendo sincero estuve a punto de contactarme con la empresa en estos últimos meses. —La mayor lo miro confundida, se dirigió al otro lado del pasillo, para estar frente a frente con el chico.

—Aprecio y estoy de acuerdo con lo que has dicho de Hyunie pero ¿Por qué quisiste contactarte con la empresa?

—Realmente no puedo decir si mi padre estuvo en contacto o no con su jefe porque no hablaba mucho sobre esos pero...—Frunció su ceño, como si estuviera pensando en lo que había pasado. —...escuche que Dahyun no estaba avanzando demasiado en su recuperación y mi padre estaba bastante molesto por ello. Hoy nos dijo que acompañaría el a Dahyun a su sesión, generalmente la que la lleva y la trae soy yo. —Suspiro posando sus ojos en la alfa. —Estaba preocupado de que mi padre no esté diciendo nada de ello a la empresa, sé que ustedes son muy importantes para ella y que seguro estaban preocupadas por su situación. Mi padre es un alfa muy terco que creer tener el control de todo y que puede solucionarlo a su manera. Es ese tipo de actitudes las que hicieron que Dahyun, literalmente, buscara una manera de irse de casa temprano.

Momo mantuvo la mirada del chico, sus labios apretados en una fina línea sin saber que decir sobre la información que estaba recibiendo. —No sabía nada de lo que me estás diciendo, me estoy enterando que Dahyun no estaba avanzando bien en su recuperación. —Apretó sus manos en puños a sus costados, la rabia que tenía en su interior solo acrecentaba con el tiempo.

—Lo supuse, no me gustaba nada como estaba siendo su trato con ella. Incluso intente que se quede conmigo en mi departamento pero mi padre se negó por completo. —Paso sus manos por su rostro. —Sé que hay cosas que seguro quieres saber pero no creo que sea el indicado para hablar de ellas contigo. Solo quiero que sepas que estoy de su lado en lo que sea que pase. Dahyun es mucho más importante para mí que mi padre. —Se acercó a la mayor, inclinando un poco su cabeza hacia abajo debido a la diferencia de altura. —Estoy muy feliz de que seas tú la alfa de mi hermana, siempre escuche muchos comentarios buenos de ti. Siempre me contaba todo lo que hacían juntas y los regalos que se daban, realmente la haces muy feliz, noona, por favor sigue así.

—Gracias por decirme todo esto, hablaré con las demás luego. —Puso una mano sobre el hombro del chico. —No nos conocemos bien aún pero puedo darme cuenta de que eres un hermano increíble, Myungsoo. —Sonrió para tranquilizar al menor. —Gracias por cuidar y velar por el bienestar de Dahyun, prometo cuidarla con mi vida si es necesario. Dahyun significa demasiado para mí.

—Lo sé, noona, ni siquiera hace falta que lo digas. —Momo sintió la necesidad de abrazar al chico y así lo hizo, con ese abrazo sellaron su conversación y se dirigieron juntos a la sala de espera.

Había ganado un amigo o un hermano, aun no lo sabía pero estaba feliz.