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Todas suspiraron cuando terminaron la grabación, era una entrevista para el canal de YouTube de una revista, estaban agotadas y apenas era martes. Jihyo agradeció a todo el equipo y sus amigas la imitaron. Se dirigieron hasta el camerino para cambiarse de ropa y cambiarse el maquillaje, lo bueno era que decidieron grabar en la empresa y no tuvieron que moverse de allí.

—Má. —Apenas ingresaron a la habitación fueron recibidas por un leve lloriqueo, Sana se abrió paso entre sus amigas y cargo a su hijo para pegarlo a su cuerpo, Jihyo suspiro agotada.

Hikaru estaba en la mitad de su sexto mes de vida, por lo cual habia entrado en el proceso de dentición de un momento a otro, se encontraba irritable y la pareja no podía dejarlo con sus abuelos en ese estado. Sus noches eran difíciles y largas, apenas podían dormir un poco antes de que sus alarmas sonasen para ir a trabajar, el cachorro estaba inquieto y lloraba por el dolor en sus encías.

—Lo cargaré mientras te cambias, no te preocupes. —Jihyo tomó a su hijo y Hikaru no dudo en esconder su rostro en el cuello de esta. —Ya precioso, mamá está aquí.

—¿Podrías ponerle el gel? Quizás lo ayude un poco. —Sana se retiró hacia los cambiadores con rapidez.

Jihyo asintió mientras se dirigía hacia el bolso de su hijo con su manager detrás para ayudar a la chica. El Dr. Kang les habia recomendado una anestesia local para cachorros, venían en forma de gel y era fácil aplicarlo a las encías de su hijo para que esté tranquilo al menos por un rato.

—Tsk, Hikaru no se ve nada bien. —Nayeon tenía una mueca preocupada en su rostro, generalmente su sobrino estaba feliz por acompañar a sus madres y ver a sus demás tías pero era distinto en ese momento.

—Es normal, son sus primeros dientes y no creo que sea nada bonito sentirse incómodo con el dolor. —Jeongyeon suspiro. —Al menos es algo normal y no está así por alguna enfermedad o algo.

Mina asintió, tomando asiento para que las estilistas sacaran el maquillaje de su rostro. —Tienes razón ¿Cómo están los gemelos? —Observo por el espejo al matrimonio del grupo.

—Kyong vomito en la boca de Momo. —Dahyun cubrió su boca para reír mientras sus amigas, y parte del staff, estallaba en risas. —Hasta Kyong se río de ella.

—Les prometo que el vómito de los bebés parece blanco e inofensivo pero es la mayor mentira que pueden creer, esa cosa parece de otro mundo, el olor no sale con nada. —Momo se cruzó de brazos mientras la estilista limpiaba su maquillaje.

—Ustedes dos son todo un caso. —Jihyo ingreso de vuelta a la habitación, Hikaru estaba recostado en sus brazos mientras mordía un juguete con vehemencia, tomo asiento en el sofá y estiro sus piernas. —Pero nadie te manda a que lo muevas mucho si acababa de comer.

—Él no come mucho, no pensé que podría salir esa cantidad de vomito de ese pequeño cuerpo. —Lloriqueo por lo bajo al recordar el momento.

Dahyun se inclinó para acariciar los suaves cabellos del cachorro de su amiga y sonrió cuando el niño fijo sus ojos en ella. — ¿Está mejor?

Jihyo asintió, acariciando suavemente la pancita de su hijo. —El gel que receto el Dr. Kang realmente ayuda mucho, aunque su efecto dura como una hora. Además, mamá consiguió estos juguetes que él puede morder para aliviar la comezón en sus encías, se siente mejor aunque se lo quito cuando se lastima al morder muy fuerte.

—Sigo sin creer que paso todo en dos días. —Chaeyoung jugaba con los piecitos del cachorro, haciendo a este sonreír levemente.

—El Dr. Kang dijo que es normal que pase, posiblemente sus encías se hayan estado preparando desde hace un tiempo y simplemente paso. —Sana tenía una sonrisa mientras hablaba, acercándose a su hijo para que su pareja se pudiera cambiar. Intento tomarlo pero Hikaru frunció su ceño y lloriqueo, no quería ser alejado de su madre alfa. — ¿Hikaru? ¿Qué pasa? —Intento tocarlo pero el niño se removió incómodo. —Hey, amor, necesito cargarte para que mamá Jihyo se cambie. Será un momento. —El niño pataleo cuando fue separado de la alfa, amaba a sus madres pero el aroma de la menor lo hacía sentirse mucho mejor. —Ya bebé, ya está. Zyo, apúrate, por favor cielo. —Sana tenía una mueca en su rostro, no le molestaba que su bebé prefiera estar con su madre, de hecho el aroma de esta también la ayudaba cuando se sentía mal y por eso lo entendía, solo que no podía ver a su niño en ese estado.

Mint and Roses - DahMoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora