capítulo 105

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Sandra mira a todos los lados del despacho, viendo por primera ver a los hombres que están en el despacho.

Uno de los hombres se acerca hasta Sandra diciendo.
- Soy del FBI, y estoy investigando a una organización y usted está relacionada con ella.

Sandra los mira y responde.
- No se de que habla, yo no estoy en ninguna organización señor.

El hombre del FBI responde.
- A nosotros no nos puede engañar. Tenemos su teléfono móvil, así como también tenemos grabadas todas sus llamadas. En estos momentos están deteniendo al hombre con el que acaba de hablar  desde su celda.

Sandra muy  nerviosa responde.
- Yo no tengo ningún móvil, no he estado hablando con nadie.

El hombre del FBI responde.
- Sabemos la verdad, no quiera engañarnos. No estamos aquí para darle explicaciones, solo debe saber que la vamos a trasladar y que el negocio que tiene aquí se ha acabado y que el dinero que tiene oculto le ha sido requisado.

Sandra muy pálida dice.
- No pueden hacer eso. El dinero que tengo guardado me  lo ha dado mi familia.

El hombre del FBI responde.
- Sandra mientes muy mal, no  nos vas a convencer con respeto al dinero.  Ahora sólo queremos saber una cosa pero estoy seguro que también vas a mentir.

Sandra niega con la cabeza diciendo.
- No miento, de verdad que no miento.

El hombre del FBI responde.
- Sandra te vuelvo a repetir ya lo sabemos todo y tenemos pruebas, así que si estas intentando hacer un trato con nosotros te digo desde ya que no habrá ningún trato, olvidalo.

A continuación el hombre se gira, abre un maletín y saca unos documentos, se sitúa delante de Sandra diciendo.
- Lee, te conviene.

Sandra agarra los documentos, y se pone a leer. Al cabo de un buen rato levanta la mirada y dice.
- Todo esto es mentira, son unos mentirosos.

El hombre muy tranquilo responde.
- Sandra, nosotros no mentimos, a ti fue a quien te engañaron. No invetigastes .  Te creíamos más lista.

Sandra furiosa agarra los documentos y los rompe diciendo.
- Esto es lo que hago, no le creo.

La directora interviene diciendo.
- Sandra vas a ser trasladada ,  eso ya está decidido. En cuanto a los negocios que tienes dentro de la prisión ha sido todo desmantelado junto con tus cómplices. Todas han sido detenidas y trasladadas. Estos hombres te van a trasladar a tu nueva prisión, tus cosas han sido recogidas. Espero que en tu nuevo lugar de ingreso no des problemas, allí no son tan benévolos como aquí, sigue el consejo que te acabo de dar, es por tu bien.

Sandra completamente en shock no puede hablar en ese instante debido a la impresión, cuando reacciona ya los hombres la están trasladando por lo que no puede decir nada.

Sandra al  comprender que ya no puede hacer lo que le han pedido, ni seguir con sus negocios, que todo lo ha perdido se desespera por lo que intenta soltarse sin conseguirlo.

Uno de los hombres le dice.
- Estese quieta, sino la tendremos que amordazar, enseguida llegaremos a su destino, solo son un par de horas de viaje, será corto.

Mientras en otro lugar, tocan a la puerta y sin que de tiempo a responder entran varios policías y empiezan a disparar,  los hombres responden pero no consiguen su objetivo.

Al cabo de unos minutos, se oye una voz que dice.
- No se lo que quieren pero están completamente equivocados, estamos en una reunión de negocios, salgan inmediatamente de aquí.

El jefe de equipo responde.
- No estamos equivocados. Pongan las manos  por encima de sus cabezas muy lentamente, quedan todos detenidos.

El hombre responde.
- Como se atreven a interrumpir una reunión, además de decir que estamos detenidos, no saben con quien están hablando.

El jefe de equipo responde.
- A mi no me vuelva a gritar, se quien es usted y quienes son los hombres que le acompañan. Deje de tratar de engañar me. Todo lo que diga será usado en su contra, si no tiene con que pagar el Estado le asignara un abogado de oficio....

El hombre enfadado dice.
- No me preocupa, con una sola llamada puedo conseguir el mejor equipo de abogados del mundo. ¿ Cuales son los cargos que se me imputan?.

El jefe del equipo responde.
- Asesinato, fraude, secuestro, trata de blancas, esclavitud, venta de drogas, falsedad documental, esos son los que me acuerdo, seguro que el fiscal General le dice el resto de los cargos.

El hombre mira con mucha altanería al policía y le responde.
- En una hora estaré fuera.

El policía responde sonriendo.
- Lo dudo mucho, no se haga ilusiones.

Mientras todos los hombres son detenidos, se oyen unos pasos que se acercan  rápidamente y al llegar dicen.
- Todos estos hombres serán trasladados inmediatamente a la cárcel que se le informó anteriormente. El fiscal y el juez ya están avisados. No hay tiempo que perder, continúen con la misión, recuerden nada de informar por los canales habituales, utilicen el que se les ha indicado.

El policía asiente con la cabeza, después ordena que se pongan en marcha a los detenidos.

Cuando ya todos están fuera y  no les pueden escuchar nadie el policía dice.
- Carol, estas segura de la operación. Te estas jugando tu puesto.

Carol muy seria responde.
- Se lo que estoy haciendo, y si estas preocupado por tu puesto recuerda que cuando empezó la misión te dije que habían personas poderosas implicadas, pero  no son intocables como creen. Una de esas personas es quien acaba de salir por esa puerta pero aún existe otros y vamos a detenerlos. Cuando lleguen a la prisión que queden incomunicados y que no puedan hacer ninguna llamada. .

Mientras Constanza llega a la nueva prisión  y nada más llegar la trasladan a la zona de ingresos. Una vez allí, uno de los presos al verla  dice.
- Constanza, así que al fin te atraparon, esto si que es una alegría, ahora si que puedo decir que existe la justicia.

Constanza se gira, se pone muy pálida, intenta hablar pero no lo consigue al seguir amordazada.

Otro de los presos que estuvo pendiente de la conversación dice.
- Así que conoces a esta zorra..

El otro preso responde.
- Tú lo has dicho, es la peor zorra, pero ten cuidado tiene garras y es muy venenosa.

La Prometida AusenteWhere stories live. Discover now