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Capítulo 35: Perderse

Las calles estaban tan abarrotadas como cabría esperar, pero después de pasar un tiempo pasando por las concurridas calles llegaron al centro de la ciudad, donde había una gran torre.

Esta era la Asociación de Comercio de Amber, el sindicato comercial más grande en todo el continente. Tenían tiendas donde uno podía encontrar casi cualquier cosa, y organizaban subastas regularmente. La asociación comercial también administraba hoteles que estaban conectados a sus tiendas.

Cuando entraron al hotel, Luo Xiao vio muchos muebles y arte caros. El lugar era mucho más extravagante que cualquier cosa que hubiera visto antes, y sus ojos se abrieron con asombro.

Al ver su expresión, Jiang Yao se rió un poco antes de llevarlo hacia el mostrador. Al ser sostenido por la mano, Luo Xiao se sintió mucho más seguro, pero siguió mirando por todas partes, observando todo a su alrededor.

Al ver a los dos, el empleado sintió que debía ser respetuoso. Si Luo Xiao estuviera solo, habría sido expulsado del hotel, pero el hombre a su lado era claramente extraordinario. Una mirada a su ropa y se dio cuenta de que venía del Imperio Tiansong.

El empleado casi instantáneamente reconoció que el lustre especial que tenía la ropa de Jiang Yao era un rasgo de la seda de una bestia rara. Esta seda era tan rara y exquisita que solo los miembros de la realeza y los cultivadores más fuertes podían permitirse ropa hecha de ella, sin mencionar su cara y aura diabólicamente guapos. Todo esto combinado le dijo al empleado que era una persona muy importante.

"Mis señores, ¿qué puedo hacer por ustedes?" preguntó el empleado mientras les sonreía a los dos. Una vez más, Jiang Yao sacó el sello que le había mostrado al guardia antes y se lo entregó al empleado detrás del escritorio.

Como ya lo había usado una vez, usarlo dos veces no sería un problema. Cuando el empleado aceptó el sello, sintió curiosidad por saber exactamente qué era, pero cuando lo sostuvo en la mano y reconoció las runas encima, su reacción fue similar a la del guardia.

"¿Su Alteza querría dos habitaciones?" preguntó con voz temblorosa, pero Jiang Yao sacudió la cabeza. "Una habitación es suficiente", dijo con decisión. El empleado se sorprendió. Este era un miembro real del Imperio Tiansong, los gobernantes del continente, pero ¿quería compartir una habitación con un cultivador de almas débil?

¿Era este cultivador de almas no su sirviente? ¿Quién querría compartir una habitación con un sirviente?

Fue entonces cuando recordó que estaban tomados de la mano y el empleado tuvo una repentina epifanía. ¿Era este joven tal vez especial?

La mente del empleado estaba en ruinas, pero rápidamente los condujo hacia la mejor habitación que tenía su hotel. Era una habitación para uno, pero la cama era tan grande que tres o cuatro personas podían dormir sin problemas. Había tres habitaciones en total en esta lujosa suite: el baño, el dormitorio y un salón.

"Disculpe a este humilde", dijo el empleado mientras se inclinaba profundamente y se iba.

Cuando la puerta se cerró detrás de ellos, Luo Xiao comenzó a explorar su suite. Era un lugar enorme y estaba lleno de artículos de alta gama.

Caminando, Luo Xiao disfrutó viendo todos los artículos y arte. "Ven aquí", dijo Jiang Yao con una sonrisa cuando pensó que Luo Xiao había examinado el lugar lo suficiente.

Al escuchar a Jiang Yao llamarlo, Luo Xiao se acercó instantáneamente. Sus ojos estaban grandes y llenos de asombro como un niño pequeño en la mañana de Navidad. Estaba tan emocionado y asombrado por todo dentro de la suite.

Descansa en el abrazo de un demonioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora