La transmisión en vivo de la emperatriz

Capítulo 41: Maestro Yuanjing

Traductor: Nyoi-Bo Studio Editor: Nyoi-Bo Studio

Jiang Pengji pensó por un momento y luego respondió misteriosamente: "Esa es una enfermedad cerebral crónica que es casi imposible de curar".

Después de un momento de confusión, Feng Jin recordó lo que se dijo anteriormente, y se dio cuenta de que estaba bromeando.

En ese período, la influencia de la corte se debilitó porque el poder de las casas eminentes se estaba expandiendo. Pero ella no debería haber hablado del rey de esa manera.

Feng Jin le dio una conferencia solemne, a pesar de que no era mucho mayor que ella. "Todavía eres joven, así que nadie te criticará por lo que acabas de decir. Pero debes callarte de ahora en adelante porque tus palabras podrían usarse en tu contra en la corte ".

Liu Heng compartió la misma opinión. La imprudencia de su primo lo preocupaba terriblemente. Sin embargo, dado que Feng Jin ya había dado una conferencia a Liu Lanting, podía guardar su propia reprimenda que había planeado darle a Lanting cuando llegaran a casa.

Jiang Pengji simplemente sonrió. No le importaba porque nunca pensó en convertirse en oficial.

Más tarde, Feng Jin probó su progreso de aprendizaje con algunas preguntas. Como las preguntas no eran demasiado difíciles, podía responder a la mayoría de ellas con el conocimiento de Liu Lanting.

Feng Jin luego cambió de tema y se volvió hacia Liu Heng. "Sin ofender ... Pero la escuela familiar, a pesar de su educación justa, no es lo suficientemente buena para Lanting. Debe seguir aprendiendo en otra parte.

Aunque se había asignado una gran cantidad de recursos a la escuela familiar, el fruto de la inversión a largo plazo no maduraría hasta años más tarde. La escuela se había establecido principalmente para aliviar las cargas de los miembros más pobres de la familia, y solo era adecuada para proporcionar educación primaria. Los que aspiraban a recibir educación superior tenían que buscar otros maestros.

Jiang Pengji dijo: "Normalmente no vengo aquí. Tengo lecciones en casa con otro maestro aprendido. Desafortunadamente, no he absorbido mucho de lo que él me enseñó. Debes haber visto mi lento progreso.

Después de escuchar su conversación, Liu Heng estuvo de acuerdo con Feng Jin. Siempre había pensado que su primo era inteligente, incluso si era tímido. Era una pena que no le gustara interactuar con los demás. Aunque el desempeño actual de Lanting no fue agudo, eso no tuvo nada que ver con su inteligencia; fue por sus primeras experiencias en la escuela familiar y la incompetencia de su actual maestro en casa.

Feng Jin preguntó: "¿Y quién te está enseñando en casa?"

Antes de que Jiang Pengji pudiera responder, Liu Heng respondió: "Es Wei Yuan, también conocido como Wei Gongcao".

Según los recuerdos de Liu Lanting, el maestro Wei Yuan era muy exigente y la regañaba por los errores más pequeños. Por lo tanto, la niña estaba bastante intimidada por él.

"Veo. No es de extrañar." Feng Jin parecía entender.

Un adolescente como él no estaba familiarizado con los famosos eruditos de la época, especialmente con alguien como Wei Yuan. Wei Yuan despidió a su jefe y abandonó la corte simplemente porque se había negado a hacer compromisos en ciertos asuntos. Había sido muy peculiar.

Sacudiendo la cabeza, Feng Jin dijo lo que pensaba. "No dudo de la competencia del Maestro Wei Yuan, pero Lanting no es un alumno ideal para él. Sugeriría encontrar otro maestro.

Después de pasar una noche con Jiang Pengji, se dio cuenta de que ella no estaría satisfecha con lo que tenía y definitivamente se esforzaría por obtener más. Aprender con el obstinado y duro Wei Yuan podría conducir a futuros conflictos si ninguno de los dos estuviera dispuesto a comprometerse, y esto era muy probable, dado su mal genio. Si Wei Yuan pudiera despedir a su superior sin dudarlo, definitivamente podría despedir a Liu Lanting, que era simplemente su alumno.

"¿Buscar otro maestro?" Liu Heng consideró poco práctico el consejo de su amigo. Hubo un dicho popular que decía "Un maestro por un día no es diferente de un padre para toda la vida".

Jiang Pengji, por otro lado, no mostró acuerdo ni desacuerdo.

Feng Jin sonrió y agregó: "Dado que el Maestro Yuanjing está enseñando en Langye, Lanting puede ir si quiere".

"¡Maestro Yuanjing!" La expresión de Liu Heng cambió de sorpresa a emoción. "Huaiyu, ¿es eso cierto?"

Jiang Pengji escuchó mientras examinaba todo lo que sabía sobre el maestro.

El maestro Yuanjing fue un respetado erudito en Dongqing, que fue dotado en todos los aspectos, y fue un amante de los sueños para las niñas en los cinco reinos. Se dijo que fenómenos extraños en la naturaleza acompañaron su nacimiento, lo que era una señal de que era extraordinario. También se rumoreaba que más tarde se encontró con un inmortal que le dio inteligencia y fortaleció su cuerpo.

Antes de los 20 años, ya estaba bien versado en el estudio del cielo y la tierra, y también tenía conocimientos de adivinación, música, ajedrez, caligrafía y dibujo. Redactar poemas y prosas fue pan comido para él. Además, era un experto en agricultura, negocios y militares. Nadie fue más consumado que él.

Su victoria de persuadir a las tribus del norte para que devolvieran tres ciudades a Dongqing hace ocho años fue lo que le dio fama mundial. Tenía una lengua afilada que había infligido serias torturas mentales al delegado extranjero, y la víctima murió pocos días después de regresar a casa.

Jiang Pengji no respondió, y Liu Heng se sintió ansioso por su primo.

"Sé que Lanting es inteligente, ¡pero es muy joven! Además, su educación va a la zaga de los demás debido a los cuatro años que perdió en la escuela familiar. A pesar de que está aprendiendo del Maestro Wei Yuan, todavía está detrás de sus compañeros. Me temo que su actuación no es lo suficientemente sobresaliente como para convertirse en alumno del maestro Yuanjing ".

Solo había un Maestro Yuanjing, pero la línea de personas que querían ser sus seguidores podía extenderse desde el este de Dongqing hasta el oeste de Xichang. ¡La competencia debe ser tan feroz! ¿Cómo podría su débil primito eclipsar a los otros fanáticos locos?

Aunque a Liu Heng le gustaba mucho Liu Lanting, sabía que no debía ponerle grandes expectativas. Sin embargo, no pudo evitar imaginar cómo Lanting podría beneficiarse del gran maestro si fuera capaz de destacarse del resto de los candidatos.

Feng Jin, que sabía más que Liu Lanting o Liu Heng, volvió su mirada hacia Jiang Pengji. "Otros pueden no tener éxito, pero Lanting sin duda será admitido tan pronto como el maestro se entere de los antecedentes de su familia. Incluso si no es aceptado como alumno, se le permitirá unirse a las lecciones ".

"¿Es amigo de mis padres?" Liu Lanting nunca había oído hablar de eso.

Feng Jin lo había aprendido por casualidad de su padre. "Él y tu madre se conocieron antes".

El rumor era que el Maestro Yuanjing había sido indigente cuando era joven. Había nacido en una familia pobre de plebeyos y casi tuvo que abandonar sus estudios porque su familia no podía pagar su educación. Sin embargo, un día, durante un invierno nevado, conoció a la esposa de Liu She, y ella le ofreció asistencia financiera.

Nadie podía explicar por qué el maestro aceptó su dinero después de haber rechazado la ayuda de otras personas. Sabían que no era por sentimientos románticos porque el Maestro Yuanjing era un joven de 22 años en ese momento, y la madre de Liu Lanting era solo una niña de seis años.

"Debo decir que tu madre fue visionaria. Tenía una condición a cambio de su ayuda: que el Maestro Yuanjing debía enseñar a sus propios hijos cuando algún día se hiciera famoso ".

¡Qué extraño era que un niño de seis años hablara con un hombre de esa manera!