La transmisión en vivo de la emperatriz

Capítulo 115: Qué sorpresa (III)

Traductor: Nyoi-Bo Studio Editor: Nyoi-Bo Studio

Jiang Pengji y Feng Jin entraron trepando la pared, pero salieron por la puerta principal con un carruaje prestado por Wei Yuan. El viaje no fue del todo agradable, ya que el viaje no fue tan estable como el del carruaje de Liu y dieron vueltas vigorosamente en la carretera.

Feng Jin suspiró. "Nunca imaginé que Meng Heng tendría un hermano legítimo tan descarado".

"¿Eso cambia tu opinión sobre tu amigo?" preguntó satíricamente, mirándolo fríamente.

"No. Lo siento por él ". Feng Jin era sensible a las emociones y comprendía el descontento de Jiang Pengji. Aclaró: "Lanting, es posible que no lo sepas... aunque Meng Heng es un hijo legítimo, sus padres descuidan tanto su forma de vivir que uno puede pensar que es un hijo de una rama menor de la familia. Solo supe de su nacimiento por casualidad ".

Cuando Jiang Pengji se volvió para mirarlo, continuó: "En el próximo examen, mi amigo puede eclipsar a muchos en términos de antecedentes familiares, educación, temperamento, apariencia y habilidades, pero las fechorías de su hermano ciertamente afectarán los comentarios sobre su disciplina. . "

Dongqing clasificó a sus burócratas en diferentes niveles según su nacimiento, rasgos personales, apariencia física, conocimientos, habilidades y destrezas, y estándares morales. En el marco del examen preliminar, los últimos tres criterios pesaron el sesenta por ciento de la puntuación total, el otro treinta por ciento y la impresión del examinador el diez por ciento.

Pero luego, bajo la influencia de las casas, los criterios con mayor peso fueron el nacimiento, la moral y el conocimiento, constituyendo más del sesenta por ciento de la puntuación general. Los examinadores también fueron autorizados a ajustar la puntuación para actuar a favor de las casas.

La disciplina de Meng Heng podría haber alcanzado el grado más alto, pero el impacto de Meng Liang arrastraría su grado al más bajo. Es por eso que Feng Jin estaba sorprendido por los hechos de Meng Liang y simpatizaba con Meng Heng.

La consecuencia de una calificación podía ser inmensa, ya que la mayoría de los candidatos provenían de casas y familias importantes. En la feroz competencia, Meng Heng podría haber clasificado entre los tres primeros, pero se vería afectado por su hermano y recibiría una calificación general mediocre.

¿No fue una pena?

La gente antigua tenía un concepto débil sobre los individuos, y juzgarían a una persona junto con su familia. Era previsible cuán gravemente se vería afectado Meng Heng debido a su estrecho vínculo de sangre con Meng Liang.

"¿Porqué estás tan preocupado? ¿Qué puede probar un examen? Mientras sea el hijo legítimo de los Meng, ¿quién realmente lo maltratará? Jiang Pengji puso los ojos en blanco. "Si debes encontrar algo de qué preocuparte, ¿por qué no me ayudas a crear una excusa para dejar la Mansión Yingchun sin notificar a mi padre?"

"..." Eso sonaba cierto.

Los resultados del examen solo decidieron los primeros puestos de los candidatos en la corte. Aunque sus padres ignoraron a Meng Heng, seguía siendo el próximo heredero de la casa y tenía muchas posibilidades de prosperar en el futuro.

Jiang Pengji lo miró y mostró que su desdén por Dongqing creció. El reino ya estaba condenado por el control de las casas. El de Meng era solo una chispa que iniciaría el fuego que se tragó todo el reino.

"Nunca podremos engañar a un hombre como el oficial Liu". Feng Jin negó con la cabeza. Preferiría ser honesto.

Jiang Pengji resopló. "Tengo una idea. ¿Y si le digo a mi padre que me llevaste a otro burdel por invitación de vírgenes? No le informé porque salimos apurados y temíamos su oposición ".

Feng Jin abrió mucho los ojos. ¡Qué clase de amiga era!

"¡Lanting!" Sus mejillas estaban enrojecidas por la ira. Nunca se había burlado de él de esa manera.

"Sólo bromeo. ¿No confías en mí? Jiang Pengji actuó como si su corazón estuviera roto.

Feng Jin sabía qué no responder.

¡Suspiro! ¿Cómo se hicieron amigos?

"Dicen que Liu tiene un hijo disoluto tanto en acción como en discurso. Estoy empezando a creerles ".

"Al menos no soy demasiado mayor para ser disoluto". Como si no pudiera discernir su ironía, comenzó a sermonearlo. "¡Mírate! ¡Eres tan joven, pero habla y actúa como un anciano! ¿O eres una dama? Por eso caminas con pasos tan pequeños y ligeros y hablas con tanta suavidad ".

Tenía la intención de vivir como quisiera durante toda su vida.

Feng Jin no pudo reprimirse más y replicó: "Soy demasiado gentil y suave en comparación con una chica como tú".

"..."

La audiencia, que había estado disfrutando tranquilamente de su pelea, encontró la escena muy dulce.

Lancui Yu Buzhe: "¡Jajaja! ¡Por fin Feng Jin comienza a contraatacar! "

Jinnianni Naocanlema: "¡Tonterías! Lo que veo es que el anfitrión mima a Feng Jin y le permite decir lo que quiera ".

Zaixia Yeliangchen: "El anfitrión varonil y el delicado Feng Jin son mi pareja favorita".

Zaixia Longaotian: "Estoy de acuerdo. Su contraataque es solo un cosquilleo ".

Laosiji Lianmeng: "¡Je-je, novios de la infancia! Me encanta la sonrisa complaciente en el rostro del anfitrión ".

Pindaokanni Juhuayoudu: "¡De ninguna manera! Soy el verdadero amor del anfitrión. No sabes cuánto me ama y ... con qué frecuencia. (tímido)"

Tan ingeniosa como era Jiang Pengji, a menudo perdía las palabras frente a su hiperactiva audiencia.

Esa fue la primera vez que Feng Jin mencionó su sexo.

"Huaiyu, me he estado preguntando por qué me consideras un amigo, incluso después de saber sobre mi género".

Feng Jin la miró y dijo directamente: "No puedo ver nada femenino en ti, excepto tu apariencia".

De hecho, a menudo se olvidaba de que ella era una niña y la trataba como a un amigo. Además, se llevaban bien, y eso era mucho más importante que su género.

Mientras los espectadores se reían, Jiang Pengji arqueó la ceja. "Palabras toscas".

"Solo para ti."

"..." ¿Qué le pasaba a Feng Jin?

Pronto, decidió ser generosa y perdonarlo. En cuanto a su audiencia, es mejor que los deje por su propio bien.