NUESTRO INFIERNO I || OFICIAL

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Henry

Voy enseguida a James y Julie echándoles en cara las pruebas que Matt había conseguido, las que ya tenía y las de la Italiana.

—¡Ahí tienen a su superheroína Emma Ridley! La mujer intachable. —Digo soltando lágrimas dolido. <<Mi última esperanza se había ido>>. —¡Miren! ¡Es una traidora que es capaz de decirme "Créeme mi amor" mientras me mira a los ojos sabiendo su puta culpa! —Grito.

Julie toma las pruebas poniéndose pálida y seria y James hace lo mismo.

—Esto... esto tiene que ser falso James. ¿Es posible? —Julie lo mira y el exhala.

—No lo sé. Queda seguir investigando Julie. Esto... es evidencia aparentemente real. Pero... eso solo significa que la persona que está jodiendo a Emma tiene mucho poder, contactos, influencias y medios. —Dice James y río limpiando mis lágrimas.

—¡Ya dejen de justificarla y vean de una vez por todas la puta realidad! ¡Me utilizó! ¡Me enamoré y se aprovechó de eso! Ahora entiendo porque al principio me rechazaba, seguro no había pensado que podía usarme para joderme. —Seco mis lágrimas y Julie me mira dolida. —¡Emma Ridley me destruyó! ¡Me jodió!. Y ahora todos van a conocer al verdadero Henry, al que no se deja de nadie jamás. —Julie intenta seguirme pero mis escoltas la detienen.

Voy al sótano donde tienen a Alessandra Rinaldi encadenada y ordeno que la liberen de inmediato. Ella me mira temblando de miedo.

—¿Vas a matarme? Yo solamente te quería proteger Henry. ¡Esa mujer te traicionó! Es lo que debiste hacer, matarla. —Me mira.

—No voy a matarte Alessandra. —La miro exhalando. —Tu vas a casarte conmigo y vas a ser mi esposa. —La veo sonreír. —Vas a caminar de mi mano como... como mi adorno personal. —Ella se acerca a mi.

—¿Y esa decisión tan repentina? ¿Ya te diste cuenta que la única mujer que está a tu altura soy yo? —Pasa los dedos por mi barbilla dándome caricias.

—¿Qué parte de "adorno" no entendiste? Alessandra, ve lo nuestro como un convenio. Yo necesito a una mujer a mi lado porque sabes como son los negocios, te necesito para que me acompañes a mis galas, a las fiestas, a los eventos... solo eso, un bulto. —Le digo y cruza los brazos.

—Emma no era eso para ti. Tu la ponías como líder y...

—Y tu no eres Emma. Te la pondré fácil Rinaldi. Si no aceptas, buscaré a cualquiera de mis ex sumisas que quiera tener ese lugar como mi esposa. Así que la pregunta es simple, ¿aceptas o te vas de mi casa en este mismo instante? —Digo.

—Claro que acepto. Pero no vas a estar hablándome así delante de toda la gente. Que piensen que me pediste matrimonio porque somos una pareja estable. —Acaricia mis labios y me aparto.

—Solo no olvides que para mi es un teatro.

—Un teatro que volveré realidad, Henry. Porque te demostraré que la única mujer que jamás te va a traicionar, soy yo. —Va a besarme y me separo. Ella rueda los ojos molesta. —Iré a traer todas mis cosas para mudarme contigo. —dice.

—Ordenaré que te preparen una habitación en el área de huéspedes. —Digo.

—¡Henry! ¡Voy a ser tu esposa! ¿Vas a enviarme a dormir a otro lado?

—"Adorno" "Teatro" ¿Quieres que te explique con dibujitos? —Salgo de ahí siendo seguido por Matt.

—¿Es enserio? ¿Le pides que se case contigo? ¡Solamente es despecho idiota! Esa mujer es una cocodrila.

—Ya deja de cuestionar mis decisiones. No voy a permitir que mis socios comiencen a pensar que la traición de una mujer me va a debilitar. Además Rinaldi tiene una muy buena reputación en este negocio. Me servirá para que continúen viendo a mi mafia como un imperio sólido.

—Tu mafia ya es un imperio sólido. Tu matrimonio solo será para herir a Emma y mientras más rápido lo aceptes menos daño te harás tú zopenco. —James aparece cruzando los brazos.

—Me queda claro que eres el rey de los pendejos papá. —Julie exhala. —Y no te preocupes, ya estoy preparando todo para llevarme a Emma de esta casa junto con James. Ya contacté a Bart que está en la ciudad y te juro papá que en tu vida vas a volver a verla y ese será tu castigo.

—¿Te vas a ir de lado de una traidora Julie Adams?

—No papá. Yo no me estoy yendo del lado de la Italiana como tú. —Mi hija y James se van hacia la habitación de Emma y yo los sigo porque todavía tenía algo que decirle a esa mujer antes de ponerle fin a nuestra historia que jamás debió comenzar.

Emma

Los tres entran a la habitación: Henry, James y Julie. Me incorporo un poco con dolor aún en la herida de bala.

—¿Todo en orden? —Digo mirando como Henry me ve con furia y rencor.

—¿En orden? —Ríe molesto. —Ya ni te molestes en escupir tus mentiras que ya terminaron de analizar las pruebas ¿y que crees? ¡Nada es falso! Eres una mentirosa de mierda que me miente mirándome a la cara.

—Henry... amor...

—¡No te atrevas a llamarme amor! —Me levanta la voz. —Si de algo me arrepiento en la vida, es haberme enamorado de ti Emma Ridley. ¡No te quiero ver jamás! —Me grita con la voz entrecortada. —Así que te vas de mi casa en este mismo instante para no volver jamás que mi verdadera mujer debe estar por llegar para mudarse. Mi prometida, mi futura esposa. Una mujer que si está a mi altura y no una oportunista de mierda que sólo utiliza a los que tiene alrededor para posicionarse.

—¡Ya basta Henry! —Dice James.

—Y ustedes dos... —Señala a Julie y a James mirándolos molesto. —Cuídense las espaldas que así como me jodió a mi, los joderá a ustedes tarde o temprano. Porque el que traiciona una vez, termina haciéndolo dos y si los dejas, hasta tres. —Se marcha de ahí dejándome con lágrimas en los ojos.

—Nosotros confiamos en ti Emma. —Julie me toma de la mano.

—Ya no importa. —Me limpio las lágrimas respirando hondo. —Creo que lo mejor es que me vaya de aquí a Italia con Bart y me olvide de tu padre. —Lloro y Julie me abraza.

—Nos vamos juntas a Italia porque yo no te dejaré sola. Además, ¿Quien estará cuando Nicholas nazca? No pienso perdonar a Ian así me llene de flores la casa. —Me dice y río un poco.

—También me voy con ustedes... si me aceptan, claro está. —Dice James.

—Yo no se que haría sin ustedes. —Lloro mientras los dos me abrazan.

Tengo que ser fuerte y quiero serlo pero, no puedo. Henry se quedará con un pedazo de mi corazón que nadie jamás podrá regresar.

Benson

Voy a la oficina de Michael Greg. Nos vemos las caras frente a frente nuevamente. No está solo esta vez, está con una mujer que se encuentra sentada en sus piernas mientras le hace caricias. Es como una copia casi idéntica de Emma.

—Te presento a mi esposa. Chloe Ridley. Mi mujer. —La mujer me sonríe. —Amor, el es Benson. Mi socio y de mis mejores infiltrados para destruir a mi medio hermano. —Dice.

—Un gusto, Chloe. —Le doy la mano y hace lo mismo.

—¿Que noticias me tienes Benson? Ya es momento de destruir la mafia de Henry Adams y darle la pena de muerte no legal que se merece. —Dice.

—Lo haremos. Ya casi obtengo toda la información que necesitamos y... ya tengo preparado el atentado en el que Henry Adams morirá. Solo necesito un poco más de tiempo Michael. La espera valdrá la pena. —Digo.

—Confío en ti Benson. —Dice.

Necesitaba tiempo para la información que necesitaba. Henry era tan estratégicamente perfecto que se que aún no tengo toda la información sobre su mafia pese a ser su hombre de mayor confianza. Y también quería que sufra por Emma. Cuando la vea en mis brazos.