NUESTRO INFIERNO I || OFICIAL

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Emma

Tardo aproximadamente tres semanas en recuperarme un poco de la herida. Bart ya tenía listo el avión privado que nos llevaría a Italia.

Julie no iría, quería ir pero su embarazo sufrió complicaciones. Y James se quedaría con ella porque ni uno de los dos quería volver con él Lord. Con Henry.

Últimamente los rumores se han esparcido como agua. Henry tenía muchísimo más poder porque se había enfocado tanto en sus negocios que además de abarcar territorios recónditos, destruía a pequeñas mafias que se levantaban sin pensar en hacer tratos con él. Cada día se volvía mucho más poderoso. Y... cada día se rumoraba más la fecha de la boda entre la Italiana y Henry. Aunque aún no había ni una confirmada.

—No me digas que te vas a ir a esa puta cabaña Emma. —Me dice Bart negando molesto. —Que Julie se haya reconciliado con Ian no quiere decir que cupido esté de buenas y tú vayas a reconciliarte con Henry. ¿Que esperas? ¿Que al ir a la cabaña de "Henry y Emma" se le conmueva el corazón? ¡Te ve como una traidora! —Me dice Bart.

—No tienes que recordarme que sigue con la Italiana. —Exhalo. —Solamente quiero ir a esa cabaña por algunas cosas importantes que dejé ahí. —Digo tomando las llaves del auto de Bart.

—A mi no me mientas. Quieres ir porque escuchaste que James dijo que Henry se la pasa en esa cabaña casi todos los días embriagándose por las noches.

—Claro que no. —Ruedo los ojos. —Ya, no tardaré. Solamente iré por mis cosas y regreso. —Digo.

—No olvides que nos vamos en tres horas así que no llegues tarde. —Dice y asiento.

—Tranquilo papá, estaré aquí en una hora.

Salgo encendiendo el auto para dirigirme a la cabaña, tenía algo de ropa ahí y algunas fotografías de cuando era pequeña. Quería recuperarlas.

Siento alivio cuando no veo ni un auto en la cabaña <<Al menos no tendré que toparme con Henry>>. Bajo y utilizo mis llaves para entrar. Parecía como si alguien estuvo aquí anoche porque hay botellas de alcohol vacías, muchas.

Entro a la habitación abriendo el armario para llevarme mi ropa <<La de Henry no está, ya se llevó todas sus cosas que tenía aquí. >> volteo y me percato de las fotos que nos tomábamos arrugadas en la cama. Tomo una de las fotografías y una lágrima se me escapa recordando esos momentos que se fueron para no volver. Dejo la foto ahí y me llevo mis cosas al auto para marcharme.

Me doy cuenta que olvidé las llaves en la sala y regreso a la cabaña deteniéndome cuando miro dos invitaciones de boda sobre la mesa.

"Alessandra Rinaldi y Henry Adams"

Pese a que están un poco arrugadas se distingue sumamente bien. Es oficial, ellos dos se van a casar.

—¿Qué haces aquí? —Se escucha su voz y respiro hondo dejando la invitación sobre la mesa.

—Vine por el resto de mis cosas. —digo. Se ve bien. Lleva un traje que resalta sus músculos y parece que estas tres semanas se la ha pasado haciendo ejercicio porque se ve más bueno. —Veo que ya no están las tuyas aquí.

—Si... este lugar me trae pésimos recuerdos así que me llevé todas mis cosas para no tener que regresar nunca. —Dice.

—Pensamos igual entonces. —Digo haciendo como que no me importa lo que me acaba de decir. —Vine por mis cosas porque me voy de la ciudad con Bart. —Su mirada se enfoca en la mía y lo noto tensarse.

—Lástima. Te perderás mi boda. —Dice y siento cómo si me apuñalaran el pecho una y otra vez.

—Si. Lindas invitaciones. —Bajo la mirada.