53.- "Caminos que convergen"

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El rey había sido apresado y el caos cundía en la tribu Nigrum, los Dragones custodiaban en silencio hasta que uno de ellos, con mayor rango, les comunicó las medidas del rey Tabard. Los Nigrum Cornu debían elegir un nuevo soberano hasta que Risha Hakkin fuese liberado. Además, el nuevo gobernante estaba obligado a terminar con el exilio de Zaran y llegar a un tratado de paz con la tribu Alba. Se trataba de una delicada situación que requería diplomacia, habilidad que la mayoría de los Nigrums carecía. Los ojos señalaban a Zaran, pero éste se negó debido a que tenía una deuda con el príncipe humano que le impediría permanecer durante algún tiempo en la tribu.

No llegaban a ningún acuerdo, así que un Nigrum que pertenecía al círculo más cercano del rey aceptó tomar el control de su pueblo sin proclamarse a sí mismo con el título de rey. Solo acataría las medidas del rey Dragón y mantendría el orden en la tribu. Zaran esperaba dicho resultado, pues la presencia de Risha aun imperaba en los suyos. Recordó la petición del príncipe Valtrana luego de enviar de regreso a Colibrí, así que se acercó a algunos de sus hermanos alados y les ofreció un excelente pago para contratar sus servicios. Debido a lo recién sucedido con su gobernante, aceptaron sin vacilación la propuesta.

Solo le restaba empacar algunos objetos, agradecer la hospitalidad de la reina Alba y despedirse de Baldor, aunque esto último le resultaba en especial difícil, pues cada vez que veía su cálida sonrisa, el corazón de Zaran se estremecía. Antes, esa sensación le era desconocida, por lo que no sentía la necesidad de preservarla. Luego de convivir con Baldor, se había vuelto codicioso, le era imposible imaginar la vida sin él, la cual no sería la misma luego de descubrir tan poderosa emoción.

No sabía con exactitud el tiempo que le tomaría regresar y no quería que su preciado Alba se olvidara de él. Zaran arrancó una de sus plumas y entrelazó hilos oscuros para hacer un collar. Se acercó a Baldor y le pidió que no se moviera, lo rodeó con sus brazos para colocar el objeto alrededor de su cuello, la repentina cercanía del Nigrum le provocó desconcierto y agitación. Aunque no podía ver, movió la cabeza hacia un lado para evitar tenerlo de frente. Cuando terminó de anudar el collar, Zaran tomó su mano y le entregó la pluma para que el joven la reconociera a través del tacto. Baldor se quedó sin palabras ante el asombro de descubrir su obsequio. Sus delgados labios se entreabrieron, pero no emitió sonido alguno.

—No preciso de una respuesta en este momento, tendremos mucho tiempo a mi regreso —El Nigrum envolvió con sus manos las de él.

Baldor permaneció con el collar en su mano, aun cuando la presencia del joven se alejaba para continuar con los últimos preparativos. El Alba se apresuró hasta sus aposentos para regresar de inmediato hasta la salida de la aldea. Cuando Zaran estaba por marcharse, Baldor se aproximó a él, pero la vergüenza que sentía le hacía difícil articular las palabras. Extendió ambas manos en las cuales tenía un collar hecho con una pluma blanca. Sus manos temblaban ante el silencio del Nigrum quién emitió una sonrisa y tomó el collar para colocarlo en su cuello. Zaran sostuvo la mano temblorosa del Alba y la acercó a sus labios para depositar un beso. Aunque su despedida carecía de palabras, su intercambio poseía un profundo significado. En la tribu Alba, intercambiar una pluma con otro ser simbolizaba un vínculo especial, el cual guardaba cierto parecido con un compromiso humano tras obsequiar un anillo.

Luego de guiar a los Nigrums hasta el territorio Élfico, Zaran obtuvo otro cometido, el príncipe le entregó a su Pegaso para que viajara a puntos específicos para que su majestuosa criatura fuese vista y así se crearan rumores benéficos para el príncipe. El Nigrum sería sus ojos y oídos discretos, podía pasar inadvertido a pesar de la marca en el rostro y sus alas, las cuales ocultaba con destreza. Tenía la habilidad de que sus movimientos fueran como caminar sobre una alfombra que absorbía el mínimo ruido audible.

Valtrana [BL]Where stories live. Discover now