El Patio Trasero Del Protagonista Está En Llamas [GL]

Capítulo 22: Ser arrebatada

Capítulo 22: Ser arrebatada

Wei Chi Li retrocedió 2 pasos mientras la miraba con alegría: "Se ve tan hermosa".

Liu Luo Yi rápidamente le dio la espalda, no queriendo que Wei Chi Li viera su cara.

"Entonces volvamos juntas. No he comido y me muero de hambre". Al ver que había engatusado a Liu Luo Yi, Wei Chi Li bostezó relajadamente.

Liu Luo Yi emitió un sonido y las dos se quedaron allí durante mucho tiempo. Nadie se movió.

Liu Luo Yi miró a Wei Chi Li, confundida. Sólo entonces Wei Chi Li se frotó la cara avergonzada: "Bueno, no conozco el camino de vuelta, tú conoces la capital. ¿Cuál es el nombre de la posada de ahora?"

Liu Luo Yi: ........

Los días siguientes, Wei Chi Li ya había ordenado todo el cofre y contado el oro y las joyas hasta que sus manos se ablandaron. También había ordenado las escrituras de las tierras y las casas. Como algunas de las casas y tierras no habían sido atendidas, estaban abandonadas. Por lo tanto, tuvo que contratar a alguien para que se ocupara de ello, por lo que estaba agotada de todo el trabajo.

Por el momento, no se planteó volver al Territorio del Norte.

También estaba el problema de Liu Luo Yi. Aunque Liu Luo Yi no lo había mencionado, Wei Chi Li sabía que estaba preocupada por la situación de su padre, Liu Ru. En la novela se decía que Lu Yun Kui había colaborado con alguien para inculpar a Liu Ru, llevándolo a la cárcel, aunque no se explicaba con gran detalle.

Pero Wei Chi Li sentía que, aunque se hubiera enredado de nuevo en la novela original. No era suficiente que Lu Yun Kui, que acababa de aprobar el examen imperial, inculpara a un primer ministro por sí solo.

Por lo tanto, debía haber algún personaje importante escondido detrás de Lu Yun Kui. Tal vez tuviera que ver con alguna complicada disputa política. Si este fuera el caso, ella teme que para resolver el asunto de Liu Luo Yi, ella tuvo que quedarse en el País Yan por algún tiempo.

Aunque, con el temperamento de Liu Luo Yi, ella no diría nada que hiciera que Wei Chi Li la ayudara. Ella no tiene el corazón para simplemente dejarlo así.

Pero, sea cual sea su plan, no podía seguir quedándose en esta pequeña posada para siempre.

"Xin Ran, te he pedido que elijas una casa adecuada, ¿lo has hecho?" Wei Chi Li giró la cabeza y gritó después de arreglar las cuentas finales.

"Lo he hecho; la princesa quería una espaciosa y la casa que el emperador le había recompensado era bastante buena. Era una antigua casa del príncipe y era grandiosa. A dos pasos está la calle ChangQi y es el lugar más próspero de la capital. Hay todo tipo de tiendas especialmente en la parte más oriental, hay una tienda de pasteles de carne de Cao, llamada......"

Wei Chi Li no pudo soportar más y se tapó la boca.

"Puedes contratar o comprar unos cuantos sirvientes y pajes y hacer que limpien la casa. Deja la habitación más grande para mí y limpia las restantes para Liu Luo Yi y Liu Wen Chang".

Xin Ran hinchó las mejillas y asintió, se dio la vuelta y estaba a punto de marcharse cuando de repente pensó en algo y se volvió: "Princesa, el 4º príncipe ha enviado a alguien a pasar un mensaje hace un momento, diciendo que hoy tiene tiempo. Y que le gustaría reunirse en el restaurante QinChun a mediodía".

Wei Chi Li sintió que era un poco repentino, pero pensando que aún le debía a Chen Chu su agradecimiento, asintió y aceptó.

Una hora más tarde, se vistió con pulcritud y llamó a la puerta de Liu Luo Yi.