El Patio Trasero Del Protagonista Está En Llamas [GL]

Capítulo 72

Capítulo 72: Yo También La Amo

Wei Chi Li quería esquivar inconscientemente, pero en ese momento, Liu Luo Yi estaba completamente apoyada en ella y si la esquivaba, Liu Luo Yi caería al suelo.

Como si se enfrentara a la muerte sin inmutarse, Wei Chi Li cerró los ojos.

Después de que Liu Luo Yi vomitara limpiamente y se apartara de Wei Chi Li, sólo entonces Wei Chi Li movió las piernas, se quitó el horrible abrigo, levantó la mano y la pellizcó con asco.

"Ven aquí, abrázame fuerte". Wei Chi Li dijo ferozmente en tono de mando.

Liu Luo Yi se mostró muy obediente en ese momento y la abrazó. Wei Chi Li la miró con un poco de placer en su corazón. Después de todo, una Liu Luo Yi tan obediente era poco frecuente.

Wei Chi Li cargó el paquete en su espalda, otra mano la sostuvo y luego usando Qing Gong, aceleró y pronto las 2 llegaron al río. Wei Chi Li encontró el lugar más remoto, sin nadie alrededor, sólo entonces dio un suspiro de alivio y tiró el abrigo al agua.

La brisa nocturna de otoño era un poco fría y Wei Chi Li se estremeció. Se sentó con las piernas cruzadas en el césped, abrió el paquete y los reunió.

Los pétalos de la flor de la linterna de río estaban hechos de papel de aceite carmesí y había que doblarlos uno a uno con las manos, y luego poner una vela dentro. Wei Chi Li bajó la cabeza y se concentró en hacerlo. Después de completar la mitad de las linternas de río, levantó la cabeza, sólo para ver que los ojos de Liu Luo Y estaban cerrados, tumbada sobre sus rodillas y durmiendo profundamente.

Wei Chi Li dejó el farol de río, encendió una vela y la dejó a un lado. Inclinó la cabeza para mirarla.

La luz del fuego, acompañada de la brillante luz de la luna, hacía que su rostro pareciera nebuloso, su piel era aún más nívea, un par de cejas ligeramente fruncidas, aparentemente incapaz de dormir plácidamente.

Wei Chi Li se miró a sí misma, se quitó otra prenda y la colocó ligeramente sobre el hombro de Liu Luo Yi. Sin la influencia del viento frío, las cejas de Liu Luo Yi se relajaron y murmuraron algo.

Así, Wei Chi Li dobló las linternas del río mientras miraba la cara dormida de Liu Luo Yi. Después de un tiempo desconocido, sus pies estaban llenos de linternas.

Caminó hacia Liu Luo Yi y le dijo suavemente cerca de la oreja: "Pequeña Liu'er, voy a soltar las linternas del río".

Liu Luo Yi abrió un par de ojos brumosos de sueño pero se negó a moverse. Wei Chi Li sabía que estaba cansada después de beber tanto vino, así que no la llamó más para que se despertara y caminó hacia la orilla del río tranquilamente. Encendió cada vela y colocó las linternas en el agua.

Con más y más linternas de río, la superficie del agua, originalmente oscura, se iluminó. En el centro de la linterna en forma de pétalo, había una llama que brillaba a través del papel de aceite carmesí. Si uno no lo mira de cerca, sentirá que la flor era vibrante y brillante, como si estuviera viva.

Un río lleno de luces, girando junto con la corriente, derivando lentamente hacia la noche oscura y hacia la lejanía de las montañas.

Wei Chi Li estaba embelesada, así que no se dio cuenta de que Liu Luo Yi se le había acercado. De repente notó un movimiento, se dio la vuelta y, simplemente agradable, Liu Luo Yi se abalanzó sobre sus brazos.

Pero como había estado en cuclillas soltando las linternas, tenía las piernas y los pies entumecidos y no podía soportarlo. Con una pierna estirada y otra agarrada, se tumbó directamente de espaldas sobre la hierba. Liu Luo Yi se echó sobre su cuerpo y dijo aturdido: "Princesa, las linternas del río son tan hermosas".