Poder, libertad y una flor francesa

Capítulo 66: Un carril de memoria de viaje

AN: Es hora de avanzar un poco en la trama del quinto año.
Espero que disfruten el capítulo.

Las secciones reconocibles pertenecen a JKR

Capítulo 66

10 de marzo de 1996

La situación en Hogwarts se había calmado un poco. La mayoría de los estudiantes se dieron cuenta de que Umbridge estaba aquí para quedarse y que había poco que pudieran hacer sobre el sapo rosa.

Mientras Fudge la respaldara y ocupara su cargo de Ministro de magia, no había mucho que Harry pudiera hacer al respecto. Aún así, Harry la estaba vigilando de cerca. Después de todo, solo necesitaban captar el más mínimo paso en falso e informarlo al público, para que la reputación de la mujer sufriera más daños.

Sin embargo, eso fue más fácil decirlo que hacerlo. Umbridge fue muy cuidadoso para evitar confrontaciones con él. Aparentemente, ella había aprendido su lección sobre la guerra verbal con él. Por supuesto, ella todavía trató de atraparlo por posibles irregularidades, pero Harry apenas le dio una oportunidad.

Además de algunos nuevos decretos, Umbridge había decidido finalmente despedir a Trelawney. A Harry no le importaba mucho el profesor de adivinación. Si no fuera por la mujer extraña, Voldemort probablemente nunca habría ido tras su familia.

Pero, de nuevo, sus padres ya lo habían desafiado tres veces y eran miembros de la Orden de Dumbledore. Lo más probable es que los hubiera matado de todos modos. Además, ¿cuántas personas habrían muerto si Lily Potter no se hubiera sacrificado por su hijo? ¿Cuántas vidas al azar fueron las del valor de sus propios padres? Docenas? cientos? Tal vez miles?

Al final, debido al despido de Trelawney, hubo una espectacular batalla por el dominio entre Umbridge y McGonagall. Curiosamente, Umbridge había pasado por alto una regla adicional en su ambición de dar forma a la escuela como quería.

Como la Alta Inquisidora, tenía pleno derecho a despedir a cualquier maestro que pareciera no apto. Sin embargo, ella no tenía la autoridad para prohibirlos en los terrenos de la escuela. Dumbledore había dado un paso al frente y le había pedido al profesor de la adivinación que permaneciera en el castillo.

Harry, por supuesto, sabía por qué razones lo hizo el hombre. Trelawney sería un blanco fácil para Voldemort si el hombre quisiera saber más sobre la profecía. Después de todo, el Señor Oscuro no podría haber perdido la conexión entre Dumbledore contratando a un nuevo profesor de adivinación y una profecía reciente que apareció casi al mismo tiempo.

Quizás Voldemort ya sabe que fue Trelawney quien profetizó el problemático relación entre él y Harry. Después de todo, Harry no sabía cuánto le había dicho el espía del Señor Oscuro a su maestro. Por supuesto, quienquiera que fuera, había escuchado la primera parte de la profecía, pero ¿qué más podría haber sabido sobre el contexto?

En cualquier caso, Harry regresó del ROR después de su entrenamiento matutino y se vistió con algunas túnicas limpias. Tenía la intención de desayunar pronto, y sus clases comenzarán justo después. Justo cuando sacó un par de calcetines nuevos, un sobre se cayó de su baúl de varios compartimentos.

Harry frunció el ceño cuando se inclinó para volver a levantarlo. Reconoció el artículo. Sirius le había dado este sobre, diciendo que había sido una carta de su madre. ¿Cómo se olvidó de eso tan rápido? Apenas habían pasado dos meses desde entonces.

Harry decidió que debería tener tiempo suficiente para leer antes del desayuno y rompió el sello, para sacar la carta. Reconociendo la letra de su madre, comenzó a leer con entusiasmo: