CAPÍTULO 48: "NO TE DEJARÉ IR"

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El cuerpo de Li Chengxiu estaba temblando, sabía que no podía escapar de Shao Qun, pero aun así lo empujó con fuerza, porque el simple toque de Shao Qun hizo que todo su cuerpo sudara frío. Estar en un espacio tan reducido y sin ningún lugar donde refugiarse, pero al mismo tiempo tener que enfrentarse a una persona que lo hacía sentir desagradable, le daba una sensación desesperante de no saber a dónde ir.

Shao Qun lo abrazó con fuerza.

La sensación de este abrazo largamente perdido era a la vez familiar y un tanto extraño, el hombre en sus brazos parecía más delgado que nunca, y sus brazos incluso se sentían un poco torpes cuando los envolvía alrededor de sus omóplatos con fuerza.

A veces se preguntaba por qué un hombre tan delgado y tímido, que podía lloraría fácilmente, lo haría sentir a gusto con solo tocarlo con fuerza. Incluso una pizca de calor de su piel era suficiente para mantenerlo caliente, y su cuerpo helado sentía que se calentaba gradualmente con un solo abrazo.

El corazón tenía la ilusión de descongelarse, adolorido y muy lentamente.

Justo cuando Shao Qun seguía ensimismado abrazando a Li Chengxiu, un dolor le llegó del hombro.

Los ojos de Li Chengxiu estaban húmedos, mordiendo su hombro con fuerza.

Shao Qun apretó los dientes, "Me muerdes, morder el puto hombro no sirve de nada, si tienes las agallas, muerde aquí". Shao Qun levantó su cuello, exponiendo violentamente la aorta a su vista.

Li Chengxiu soltó la boca y tembló: "Suéltame, quiero ir a casa".

El coche ya había arrancado hace tiempo, y Li Chengxiu no sabía a dónde sería llevado, pero no importaba a donde fuera, mientras sea Shao Qun, no quería ir.

Shao Qun apretó los dientes y dijo: "¿Ir a casa? ¿Cuál es tu casa? Li Shuo te dio una casa y la convertiste en tu hogar, ¿por qué no aceptaste la que te di, acaso está hecha de oro?"

Li Chengxiu llevó sus manos al pecho de Shao Qun, queriendo mantener fuertemente la distancia.

Tenía miedo de Shao Qun, la fuerza de las manos de Shao Qun, el olor de su cuerpo, la expresión enfurecida, todo le daba miedo...

Li Chengxiu temblaba de miedo, encogiendo su cuerpo y ahogándose: "Quiero irme a casa".

A Shao Qun le dolía el corazón, y le sujetó la cara e intentó besarle.

No sabía qué hacer, nunca antes había tratado con alguien así, no sabía cómo protegerse, cómo defenderse, cómo luchar, cualquier cosa que Li Chengxiu dijera o hiciera podría enfurecerlo fácilmente, así que sólo podía intentar amordazar la boca.

Li Chengxiu evitó a un lado su rostro y torció su cuello al máximo.

Shao Qun lo agarró por la barbilla y acarició sus labios vagamente. Li Chengxiu de repente luchó salvajemente, "¡Maldito imbécil, bastardo!"

¿El violento acto de esa noche también empezó con un áspero y cruel beso? No recordaba, y no quería recordar, aquel vergonzoso dolor producto de aquella agresión sexual, el bochorno y la desesperación mientras yacía en el hospital, todo era como una sangrienta pesadilla, ligeramente volteada para ser vista como un maldito recuerdo.

Cuanto más se resistía, más ansioso estaba Shao Qun por exigirlo.

"¡No! ¡No, no lo hagas! Shao Qun suéltame, no...", gritó Li Chengxiu de repente, haciendo que el hombre que conducía el coche se asustara, sin poder resistirse a mirar hacia atrás.

Shao Qun estaba atónito, abrazó desesperadamente a Li Chengxiu, tratando de calmarlo.

Li Chengxiu lloró y acurrucó la parte superior de su cuerpo, "No me toques ... No me toques, Shao Qun, eres, bastardo, no me toques ..."

MARIQUITA ✔Where stories live. Discover now