Heart of the Darkness [Dean Winchester]

Capítulo 24. "Who Wants To Live Forever"

"There's no time for us. There's no place for us. There's no chance for us. Who wants to live forever, who dares to love forever, when love must die. Forever is our today, but who waits forever anyway?"

Era cuestión de días para que el contrato de Dean llegase a su fin. A pesar de eso, nada nos hacía incansables. Trabajábamos menos casos, pero por qué la mayor parte del tiempo estábamos viajando de un lugar a otro, esta vez intentando averiguar qué demonio tenía el contrato. Habíamos torturado e interrogado a un demonio ese día y después de enterrar su cuerpo, estábamos reventados. Sam estaba durmiendo en la cama, cuando Dean me sorprendió leyendo. Cogió el libro de mis manos, lo dejó a un lado en la cama y sin decirme nada me llevó al exterior del motel. Yo estaba sorprendida, ya que era pasada la medianoche.

-Dean, ¿a dónde vamos..? -susurré mientras le seguía.

-A dónde tú quieras -respondió con el mismo volumen mientras se giraba y me lanzaba las llaves del coche.

-Espera, ¿de verdad me vas a dejar conducir tu coche? -pregunté de forma incrédula- Apenas me dejas tocarlo.

-He pensado que ya iba siendo hora -hizo una breve pausa en la que se acercó a la puerta del coche- Llevas con nosotros un tiempo y creo que te lo mereces.

-¿Estás seguro? -volví a preguntar dudosa, a pesar de que me moría de ganas por conducirlo- Sé lo importante que es este coche para ti.

-Tú también eres importante para mí -me miró con ojos brillantes y una delicada sonrisa- Bueno, ¿nos vamos a quedar aquí o vas a conducir?

Miré las llaves del coche y me acerqué al sitio del conductor. Abrí la puerta y me senté, entonces me di cuenta de que ni siquiera llegaba a los pedales. La diferencia de altura entre nosotros era brutal, así que sin decir nada, Dean me ayudó a ajustar el asiento hacia adelante.

-Mete la llave y arranca.

-He conducido un coche antes sabes.. -le miré de reojo, a lo que él me respondió con una mirada seria- Está bien, indícame si eso va a hacer que estés más tranquilo.

Encendí el motor y cuando el coche ronroneó, no pude evitar quedarme quieta unos segundos y admirar el precioso coche. Dean me indicó cómo colocar los pies, que por otra parte era de la misma forma que en otros coches, y de que el siguiente paso era colocar la palanca en la "D" para iniciar el movimiento.

-Ahora suelta el freno despacio y no aprietes el gas hasta que no te sientas cómoda -continuó explicando- Es importante que tengas las dos manos en el volante, pero como eres una conductora ejemplar, puedes llevarlo con solo una.

-Te sorprendería de cuántas cosas puedo hacer con una mano libre del volante.

-Entonces yo tengo que recordarte, que desde donde estoy sentado, tengo las dos manos libres- Dean soltó una risa ligera mientras colocaba su mano sobre mi muslo y lo acariciaba suavemente.

Hice la maniobra necesaria para salir del parking del motel y nos aventuramos hacia la carretera. No llevábamos ni un par de minutos, cuando Dean decidió poner música. El segundo álbum de Led Zeppelin empezó a sonar con la canción de "Whole Lotta Love", y cómo era evidente, ambos no podíamos evitar hacer movimientos acordes a la canción y mover nuestras cabezas a su ritmo. Dean no paraba de sonreír al ver lo mucho que estaba disfrutando. Admiraba su coche desde el primer momento en el que lo vi e instantáneamente me imaginé conduciendo el Impala en mitad de una carretera, con la música lo suficientemente alta cómo para que la escuchasen a kilómetros.

-Creo que nunca te había visto tan feliz.

-¡Estoy conduciendo el puto Impala, claro que estoy feliz! -respondí emocionada, sabiendo que los ojos de Dean no dejaban de observarme.