Heart of the Darkness [Dean Winchester]

Capítulo 51. "Broken Parts"

"There was no conversation, we never shared our doubts. I've tried to play it cool, but damn I'm missing you. What if I had told you baby I'm sorry, would you still be wearing my shirt every morning or were the broken parts waiting in the dark"

Habían pasado dos semanas desde la última vez que había visto a los Winchester. Después de vivir en esa realidad alternativa y no ser capaz de sacarme de la cabeza lo que había pasado con Dean, decidí que era mejor alejarme un tiempo hasta que se calmaran las cosas. Necesitaba estar con Jackson, que era la persona con la que había decidido estar el resto de mi vida. Ese par de semanas, aproveché para pasar tiempo con Jackson organizando nuestra boda, saliendo a sitios a cenar.. Intentando revivir el principio de nuestra relación y sinceramente, estaba feliz con él. Había momentos en los que ni tan siquiera pensaba en los problemas que venían, hasta que recibí una llamada de Bobby.

Al parecer habían descubierto que las cenizas de fénix quemarían a Eva, así que Castiel transportó a Sam y Dean al pasado, a 1861 dónde Samuel Colt mató a uno. Se unieron a él y juntos cazaron al fénix, trayendo al presente esas mismas cenizas. Ahora que teníamos algo contra ella, habían decidido que era hora de atacar, así que me llamaron. Evidentemente, no les iba a dejar tirados.

-¿Cuántos días estarás fuera esta vez? -Jackson me preguntó mientras observaba como acababa de hacer la mochila.

-No lo sé, un par de días o tres.. -respondí sin pensar bien la respuesta, ya que le había mentido. Le había dicho que iba a trabajar un caso normal, no a enfrentarme a nuestro nuevo enemigo.

-Recuerda que tenemos la fiesta este sábado -se acercó y me abrazó por la cintura- Ten cuidado, ¿de acuerdo?

-Sabes que siempre lo tengo.

Nos despedimos con un beso y bajé las escaleras para salir y meterme en el coche cuando Jackson me llamó desde la puerta.

-¡Ah! ¡Invita a los hermanos y a Bobby a la fiesta!

Asentí con la cabeza y me metí en el coche, apoyé las dos manos en el volante y exhalé. No sabía lo que se venía, pero aún así tenía que afrontarlo. Cuando llegué a casa de Bobby, Sam fue quién me recibió. Le seguí hasta el sótano, dónde Dean y Bobby estaban llenando las balas con las cenizas del fénix. Bobby tuvo la cortesía de levantarse a saludarme, mientras que Dean simplemente me hizo un gesto con la cabeza. De nuevo, todos volvíamos a estar incómodos por la situación.

-¿Todo bien? -pregunté para tranquilizar el ambiente.

-No lo sé, mirad -Dean cogió las cenizas de fénix y se colocó un poco en el antebrazo- Esta cosa que se supone que va a convertir a Eva en cenizas, a mí ni siquiera me calienta.

-Según la leyenda funciona -Bobby añadió.

-Bueno, puede que sea como el hierro o la plata, que solo les afecta a ellos -pensé.