Capítulo 13. "Weight Of The World"

985 75 23
                                    

"Feel the weight of the world over me tonight. If I break down this time, hope you know I tried. My mind's such a mess, I can't handle it, I'm at the end of my rope. I don't like myself very much, despite all your kind words. Can't explain why I'm hurting myself, but it feels deserved"

Había pasado una semana desde nuestra experiencia con los cruces de camino. Una semana en la que la tensión se había apoderado de nosotros. Sam apenas dormía, ya que cuando lo hacía tenía pesadillas o visiones. Dean estaba más callado, más pensativo. Sabía que seguía dándole vueltas a lo que había pasado, a lo que el demonio le había dicho y se torturaba por no poder hacer nada. Por otro lado, yo intentaba relajar el ambiente. Intentaba sacarles conversación y que hablasen, de cualquier cosa, pero que hablasen. No me gustaba la distancia que había entre ellos. Una noche, Sam tuvo una visión más clara que las que había tenido últimamente. Sabiendo que eran reales y que conseguiríamos llegar a tiempo, nos pusimos en camino.

-Vi un cuarto oscuro, algunas personas y un chico atado a una silla. 

-¿Y yo le disparaba? –Dean preguntó en un tono incrédulo- ¿Estaba poseído?

-No lo sé.

-Todas tus visiones están atadas al demonio de ojos amarillos. ¿Había algún humo? ¿Tratamos de exorcizarlo?

-No, nada. Tú sólo le disparaste.

-Bueno, estoy seguro de que tenía una buena razón.

-Espero que sí –Sam murmuró.

-¿Qué significa eso? –preguntó de vuelta su hermano algo molesto, pero Sam no contestó- No voy a matar a un hombre inocente. ¡No lo haría!

-Nunca dije que lo harías.

-Chicos –hablé, intentando evitar una nueva discusión- No sabemos qué es esto. Vamos a encontrar a este chico y descubrir qué está pasando.

Llegamos al pueblo de River Grove, en Oregón, pronto por la mañana. En cuanto aparcamos, Sam nos señaló desde su asiento a un hombre afroamericano sentado en el porche de su casa limpiando una escopeta. Al parecer, él aparecía en la visión. Salimos del coche y como era normal, dejé que los hermanos tomaran la iniciativa.

-Buenos días, ¿puedo ayudaros? –preguntó seriamente.

-Sí, Billy Gibbons, Frank Beard y Linda Ford –enseñamos nuestras credenciales mientras nos presentaba- Policías federales.

-¿Sobre qué se trata?

-Estamos buscando a alguien –Sam entró en la conversación- Un joven, sobre unos 20 años. Tiene una delgada cicatriz en la parte superior de la frente.

-¿Qué ha hecho? –preguntó antes de darnos el nombre.

-Nada, de hecho estamos buscando a alguien más pero pensamos que este joven puede ayudarnos.

El hombre se quedó en silencio, analizándonos a los tres y dudando sobre si ayudarnos o no. Entonces, me fijé en un tatuaje que tenía en el brazo, sin saber cómo, intenté empatizar con él.

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Heart of the Darkness [Dean Winchester]Where stories live. Discover now