Capítulo 10. "Hey Hey My My"

1.3K 85 32
                                    

Hey hey, my my. Rock and roll can never die. There's more to the picture than meets the eye. Out of the blue into the black. You pay for this and they give you that. Once you're gone, you can't come back. It's better to burn than to fade away. The king is gone but he's not forgotten.

Sin lugar a dudas, teníamos demasiados frentes abiertos y demasiada incertidumbre como para dar pasos seguros. A pesar de que no habíamos contado mucho con John, cuando apareció, nos aferramos a él y nos dejamos llevar y ahora que ya no estaba, era como si estuviésemos dando nuestros primeros pasos de nuevo. De hecho, yo los estaba dando, pero Sam y Dean iban perdidos, entumecidos por el dolor.

La muerte de su padre les había afectado de manera diferente y de manera contraria a la que imaginaba. Sam lo mostraba mucho más de manera exterior; había llorado bastante y yo me había ofrecido como hombro para que él lo hiciese. Se arrepentía de todo lo que había pasado y no dejaba de revivir momentos en los que ahora desearía cambiar sus decisiones. Dean, por otro lado, no había llorado en ningún momento. El hijo más fiel a su padre, era el que menos estaba siendo afectado por su muerte. Evidentemente, cada uno siente el dolor y la pérdida a su manera, pero era una reacción extraña en Dean. Era como si supiese algo más que no le permitía darse un momento de debilidad. Era como una carga más que tenía que sobrellevar y algo me decía que la carga tenía que ver con las últimas palabras de su padre.

-¿Creéis que irnos hoy es lo mejor? -lancé al aire- Chicos no es por desanimaros, pero los preparativos tardan unos días.. además, deberías daros un descanso..

-No podemos -negó Dean, a pesar de querer lo contrario- Esta tarde Sam y yo haremos los preparativos. Esta noche nos pondremos en marcha.

-Entonces decidme como puedo ayudaros.

-Haciendo lo que tengas que hacer antes de irte.

La frase de Dean fue tan directa que me extraño. No entendía por qué no quería que le ayudase. Era como si se estuviera deshaciendo de mi mientras ellos se encargaban de todo. No comprendí por qué rechazaba mi ayuda, hasta que caí. Los agentes de la Interpol querían mi atestado y si nos íbamos esta noche, mañana no estaría para hacerlo así que tenía que ocuparme de ello esa tarde. Asentí y le agradecí con la cabeza, pero entonces me detuve. ¿Cómo sabía lo de la Interpol si Dean había estado inconsciente? ¿Quizás estuvo ahí como espíritu y lo vio todo? ¿Que debía pensar ahora sobre mi? No conocía toda la historia, pero ya sabía mucho más que Sam.

Mis ganas de ir al juzgado estaban bajo mínimos, pero era algo por lo que tenía que pasar y iba a hacerlo sola. En parte estaba decepcionada, no sabía exactamente con qué, ya que siempre había hecho las cosas sola, pero era como que esta vez tenía la expectativa de que alguien me apoyase y me acompañase en este trámite.

Una vez más, tenía que afrontar las situaciones sola, aunque para ser sinceros, muchas veces lo agredecía. Además, fue más rápido de lo que pensaba. Me presenté allí diciendo que tenía que hacer un atestado que requerían en España. La espera fue un poco larga, pero una vez me acompañaron a la sala, en media hora estaba fuera. Tal y como habían prometido, cuando volví al hospital ya se habían hecho cargo de todo. En parte, esperaba que Dean me preguntase por cómo me había ido, pero estando en la situación en la que estaba, era normal que no estuviese al caso de mis asuntos.

Esa misma noche, con todo preparado en los coches, nos dirigimos a un bosque a afueras de la ciudad y allí los chicos empezaron a recoger leña para hacer una pira de fuego. Mientras les ayudaba me contaron el por qué el funeral de cazador era así. El cuerpo se colocaba encima de la pira para la cremación. Es una tradición para los cazadores caídos, además de echar sal y quemar el cuerpo, nos aseguramos de que la persona no vuelva como fantasma vengativo. Ambos hermanos encendieron la pira a la vez, como gesto de despedida. Estuvimos un rato en silencio observando cómo las llamas consumían el cuerpo de John. Después del mal rato, ambos consideraron apropiado tomar unos días de descanso y asimilación de los hechos. No tuvieron que pensar mucho a dónde íbamos.

Heart of the Darkness [Dean Winchester]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora