Capítulo 8

4.5K 261 20
                                    


Una vez cada uno de nosotros ya vestía como un osado oficial, nos dirigimos al comedor grupal que se encontraba en una zona algo más amplia que las que había podido ver.

-Chicos, a comer, en tres cuartos de hora os quiero a todos en la habitación. Os pasaremos a buscar allí y nos iremos unas cuantas horas a la sala de entrenamiento, debéis poneros en forma lo antes posible - informó Cuatro.

Todos asentimos inconscientemente de forma seria y sosegada. Sería duro, estaba segura de ello, pero no me importaba, necesitaba que mi cuerpo se fortaleciera de una forma casi imposible. Heridas, sangre, moratones, dolor, eso sería suficiente para poder desconectar de mi propia cabeza por una larga temporada.

Llegué a sentarme en una mesa donde se encontraban varias caras conocidas, la de la abnegada, que según había escuchado se llamaba Tris y unos cuantos chicos más, sin nombre por el momento, en mi cabeza. Me encantaría decir que comí sin parar, pero no fue así. No solía comer demasiado en Cordialidad, pues siempre hacía calor y el hambre se esfumaba como el agua en el pelo, después de un largo baño en el mismo lago que tanto me gustaba observar. Aquí era diferente, las ropas con las que nos habían obsequiado eran pesadas y probablemente creadas para soportar el frío, como también el calor.

Sabía que debía comer, pues era de mareo rápido, pero mi estómago estaba cerrado en banda, habían sucedido demasiadas cosas en cuestión de horas, no estaba como para disfrutar de un buen manjar.

Cuando se fueron levantando todos mis compañeros hice lo mismo, los seguí hasta la habitación pues el camino en mi cabeza estaba algo difuso, como cada decisión que había tomado estos días. La cara de mi padre se me aparecía de vez en cuando. Sé lo que dijo, sé que quería verme feliz, pero mi elección deparaba para ambos un futuro en el que vernos sería algo más complejo de lo estrictamente necesario.

Llegué a la habitación intentándome imaginar como sería el gran entrenamiento que nos esperaba. Cuatro no apareció, Eric sí lo hizo, al cabo de unos cinco minutos de haber llegado todos y cada uno de nosotros.

Nos encontrábamos de pie y bastante rígidos, pues sabíamos que nos esperaban unas largas horas.

-Bien chicos, veo que al menos sois puntuales – comentó Eric al vernos a todos en la habitación común – Os aconsejo que no penséis en lo que os queda por delante, sino, creedme, podéis abandonar ya, pues nada de lo que podáis llegar a pensar sucederá. Espero que estéis preparados – dijo con una sonrisa algo más terrorífica de lo normal.

Su mirada, durante varios minutos, pasó de uno a otro mostrando el terror que él mismo se había encargado de enseñarnos. Quería que fuéramos conscientes y por una parte conseguía verle lo bueno, por la otra...No podía pedir gran cosa.

En el momento en el que su mirada se cernió sobre mí, pensé que me mostraría lo mismo que a los demás, pero fue diferente, al percatarse de que era yo cambió de persona, algo que me hizo sentir un poco aislada, fría y sola. ¿Sería que las palabras que le había dirigido antes le habían sentado mal? ¿O quizá me la tenía jurada y me la devolvería?

Cuando terminó de incrustarnos el miedo en cada articulación con la que contaba nuestro cuerpo, dio media vuelta y todos lo seguimos a paso firme. Ninguno sabía en qué parte se encontraba la gran sala de entrenamiento, por lo que, más nos valía no perderlo.

Al llegar allí Cuatro apareció con algún que otro cuchillo entre sus dedos.

Eric, cuando todos entramos, cerró la extensa puerta corredera que había y se situó a su lado.

En ese momento empezó la instrucción de nuestras miserables vidas.

-Qué hayáis elegido esta facción hace de vosotros personas valientes, pero hay una diferencia entre ser valiente y estar loco y os aseguro que para poder sobrevivir aquí, debéis ser ambas cosas, sino os será mucho más complejo de lo que tenéis en mente. Hoy, por ser el primer día, vamos a inaugurarlo con unos cuantos combates. Eric y yo os enseñaremos algunas técnicas que podéis utilizar sin problema, las practicaréis con alguien y después diremos los combates que se realizaran. No combatiréis todos, pues el tiempo corre y aún debemos hacer muchas cosas más antes de que el Sol desaparezca. Algunos tendréis suerte de ser los primeros y los demás combatirán mañana. Así que no os lo penséis mucho – dijo Cuatro con una voz elevada para que nadie se quedara fuera. Por un momento mis nervios se erizaron y la locura se instaló en mí, quería combatir, cuando el silencio se hizo presente me relajé y ni siquiera tuve el placer de ser valiente.

Eric y Cuatro se desplazaron hacía la zona de combate y se situaron uno en frente del otro. Por un momento me pareció ver en la mirada de Eric algo más que el odio que mostraba a cada momento, cuando sus ojos se topaban con los de Cuatro, pero como una ilusión óptica, desapareció al instante.

Empezaron a hacer varias llaves en las que o bien Cuatro terminaba en el suelo y con un pie de Eric encima, o bien Eric terminaba doblado de una forma algo exagerada y con un puño de Cuatro en la cara.

Cuando terminaron con ese espectáculo, nos ordenaron ponernos con un compañero cualquiera y practicarlo.

Un chico bastante más alto que yo se situó frente a mí y con un gesto de asentimiento me pidió "permiso" para practicar conmigo. Al principio pensé que estaba bromeando, era el triple que yo, pero iba bastante enserio por lo que no pude hacer otra cosa que ceder, pues como bien había dicho Cuatro: debía estar loca además de ser valiente.

La primera caída que me provocó una de sus llaves me dobló un poco el tobillo por lo que un quejido algo más alto de lo que hubiera querido, se escapó de mi boca. Vi como Eric se acercó al escucharme.

-¿Qué pasa, ya te has hecho daño? – preguntó encarándome con un semblante divertido.

-No – negué seria y decidida, estaba cansada de esas miradas desafiantes.

-¿Nombre? – le preguntó a mi compañero alzando su mirada un poco, pues era incluso más alto que Eric y eso ya era decir.

-Maverick – dijo él con una voz terrorífica, ¿qué le sucedía a sus cuerdas vocales, iban de acuerdo a su cuerpo o qué?

-Maverick, ¿me dejas que le muestre una cosa? Es un momento – tras un leve asentimiento de su parte que prácticamente ni esperó, se situó frente a mí. Me sentía algo observada, pero no me importó.

No dijo ni una sola palabra más. Se acercó violentamente a mí y en un abrir y cerrar de ojos me encontraba en el suelo y me dolía la espalda a groso modo.

Su pie derecho se había situado detrás de mis piernas, su brazo, también derecho, sujetó mi hombro izquierdo de forma dolorosa y sin saber cómo, me había dado la vuelta, por lo que mi pecho tocaba el suelo. Al finiquitar la llave, mis pies se encontraban prácticamente tocando mis glúteos y una de sus manos tenía mis brazos retenidos encima de mi cabeza.

-Ahora quéjate – dijo con una voz más que rabiosa.

No fui capaz de pronunciar ni una sola palabra, ni siquiera un suspiro, por alguna extraña razón el aire no entraba en mi cuerpo, me ahogaba y él parecía no percatarse.

-Vamos, quiero oírte – ordenó por segunda vez.

-¡Eric! – gritó Cuatro acercándose, sus pasos resonaban en el suelo – ¡Suéltala! ¿Ya quieres perder a una el primer día?

Entonces la presión que ejercía sobre mi cuerpo desapareció, por lo que mis brazos ya dormidos cayeron al suelo de forma brusca, como también lo hicieron mis piernas. Mi espalda dejó de estar tan presionada y el aire consiguió entrar en mí, por lo que respiré.

Mis ojos estaban algo más mojados de lo normal, pero no cayó ni una lágrima, ser fuerte, es lo único que se repetía en mi cabeza.


JenGVargas

Me compadezco de Altaira. Eric se pasa bastante, ¿no creéis?

Siento no haber cumplido con la actualización diaria, el trabajo me ganó estos días, un cambio de horario me impidió escribir, pero hoy ya vuelve todo a la normalidad. Gracias por leer, porque realmente esto está siendo leído y estoy como... :o Gracias, gracias, gracias!!!!!!!!!! Besos desde España a todo ser viviente que lea esto! jajajajaj Hasta mañana!!!

CAPÍTULO EDITADO

Treat you betterWhere stories live. Discover now