Capítulo 53

1.4K 78 1
                                    


Esperar el regreso de Eric junto a la comida que supuestamente había ido a buscar para alimentarme, estaba siendo realmente eterno.

Tanto es así que de forma no intencionada no pude evitar empezar a sumergirme en los recuerdos que había adquirido desde que estaba en Osadía. Me percaté de esa manera de que, en la gran mayoría de ellos, estaba él, en algunas acciones, momentos incómodos, otros cómodos, pensamientos, distracciones... Todos llevaban su nombre.

El sonido de alguien picando a la puerta desestructuró cada uno de esos recuerdos que no dejaban de aflorar en mi cabeza, pero también en mi mente.

- ¡Adelante! – grité sin pensarlo.

La cabeza de Tris asomó, una vez la puerta se entreabrió.

- ¡Hola! – saludó de forma efusiva.

- Hola Tris – le respondí intentando imitar esa emoción que transmitían sus ojos.

El poco tiempo que habíamos pasado juntas cada noche había sido suficiente para crear algo, un vínculo, que, aunque no se demostraba con palabras era suficiente con sentirlo, porque lo hacíamos y sé que era algo mutuo.

Sabía perfectamente que ella también se sentía bastante fuera de lugar aquí, en algunas ocasiones claro, exactamente igual que yo.

En unos segundos después, la puerta de nuevo se encontraba cerrada y ella ahora se había sentado a un lado de la cama, justo en el mismo donde Eric había estado minutos antes, largos y desesperantes minutos, por supuesto.

- Quería ver como estabas – dijo ella demasiado concentrada en inspeccionarme palmo a palmo.

- Pues aquí me ves – dije como si toda esta situación fuera realmente normal.

- Quise venir des del primer día, pero tanto Cuatro como Eric me aconsejaron que no lo hiciera – confesó escondiendo parte de la realidad.

Mis cejas se elevaron.

- Así que te lo aconsejaron, ¿eh? – dije yo en un tono de sospecha.

Mi mirada funcionó a la perfección.

- Bueno... Cuatro me dijo que ni se me ocurriera venir y en cuanto a Eric... Al verlo entrar en el comedor he decidido que era el momento de actuar.

- Pensaba que eras diferente – le dije demasiado seria.

El efecto fue el imaginado, una tensión sobrehumana se situó en el espacio donde nos encontrábamos.

- Tranquila, lo entiendo, solo que pensé que eras más dura que todo esto, que esos dos – dije en un tono de burla.

Todo se normalizó tras ese comentario y no pude evitar preguntarle sobre el resultado de sus pruebas.

¡Se había convertido ya en una osada definitiva! Me alegré muchísimo por ella, aunque era un tema, en mí, que debía preocuparme, no lo hacía en absoluto. Desconocía lo que sería de mí, pero ahora no debía, ni quería pensar en ello. Al parecer Tris pensaba igual que yo, pues no alegó absolutamente nada sobre mi situación.

El poco rato que estuvo allí conmigo se dedicó a contarme otro tipo de cosas, pequeños avances que habían realizado Cuatro y ella y poca cosa más.


NARRA ERIC

- No tengo tiempo para esto – dije con un tono autoritario, al menos fue lo que intenté.

- ¿Crees que me importa realmente? – me respondió ella furiosa.

Entendía su situación, es más, deseaba más que nada ir a verla y pasar tiempo con ella, pero no era el momento, no podía dejar a Altaira, aunque al pensar en la situación en la que me había ido, un sentimiento de rabia mezclado con uno de paz absoluta me recorrió.

- Te he dicho que me des un tiempo, ¿vale? Iré en cuanto pueda, ahora mismo estoy realmente ocupado – dije serio.

- Es tu hermana, no la mía, pero no pasa nada, ella ya sabe por quien la has sustituido. Está al corriente de tu nueva novia. Evidentemente yo me he encargado de contárselo, algo así no podía dejarlo a su ignorancia, ya son demasiadas las cosas que ignora, ¿no crees? Gracias a ti está creciendo de una forma genial, encerrada, sin vida y sin conocer nada más que el sentimiento de volver a verte a ti o a nuestros padres.

Esas palabras solo habían creado en mí furia y destrucción. Odiaba la veracidad de cada una de ellas. Debía hacer algo con toda esta situación y lo haría, pero después de darle de comer a la chica que yacía en mi cama. Debía fortalecerse para ayudarme en esto, no deseaba obligarla a hacerlo, pero al menos esperaba eso por su parte.

Me di media vuelta y me alejé de mi hermanastra.

Debía darle de comer a Altaira, después ya me encargaría de pensar en el siguiente paso. 

JenGVargas

Un día interminable tuve ayer, por eso no pude venir aquí y haceros partícipes un día más de la vida de estos dos grandes personajes.

El capítulo de mañana o de quizá esta tarde (quien sabe) estará lleno de acción y quizá (yo no he dicho nada) de palabras, palabras de amor o desamor...

Un beso enorme para todas y un día más os doy las gracias por tanto amor!!!! Y os regalo este momento que me ha causado muuuuuuucha gracia:

Un beso enorme para todas y un día más os doy las gracias por tanto amor!!!! Y os regalo este momento que me ha causado muuuuuuucha gracia:

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

<3


CAPÍTULO EDITADO

Treat you betterWhere stories live. Discover now