Hombre Bestia Criando a la Fuerza a una Esposa

Capítulo 56: Aceptación gradual

Capítulo 56: Aceptación gradual

El viento frío se mezcló con una pequeña cantidad de copos de nieve, acariciando el cuerpo de Shu Jintian que estaba a punto de erosionarse por el viento. Shu Jintian volvió rígidamente la cabeza y le preguntó sin comprender a Shu Hanyu, "¿Qué acabo de hacer? ¿Viste volar las pequeñas serpientes?"

Shu Hanyu le dio un asentimiento afirmativo, de muy buen humor.

"Lo vi. Tiantian los aventó".

"Entonces, ¿qué pasa con ellos? ¿Por qué desaparecieron? No cayeron a la nieve, ¿verdad?" Solo entonces Shu Jintian recuperó el sentido y corrió hacia el costado del montón de nieve para mirar.

Pero en la nieve blanco puro, no había una sola mancha de color o la figura verde esmeralda de las pequeñas serpientes. La brillante extensión blanca era como una magdalena enorme, y las pequeñas serpientes que cayeron no dejaron ninguna marca en la superficie de la nieve.

"Esto no me gusta. Con un clima tan frío, definitivamente se congelarán hasta morir. Hanyu, tenemos que encontrarlos lo antes posible". Shu Jintian entró en pánico. Las pequeñas serpientes acababan de nacer y definitivamente se encontraban en su estado más débil en este instante. No deberían morir congelados. Shu Jintian ahora estaba increíblemente arrepentido.

Aunque Shu Jintian no era tan cercano de las pequeñas serpientes, todavía tenía la sensación de ser un padre primerizo para ellas. Shu Jintian se precipitó agitado hacia la nieve, queriendo buscar a las pequeñas serpientes.

La felicidad de Hanyu se debilitó gradualmente y permaneció inmóvil, con leves celos en su corazón. ¿No quería Tiantian tirar las serpientes? ¿Por qué de repente cambió de opinión?

Cuando el pie de Shu Jintian pisó la nieve, la capa esponjosa de nieve dejó escapar un crujido al apretarla. Escucharlo dio a la gente una sensación de la pureza y limpieza de la nieve.

Cuanto más avanzaba, más se hundían sus piernas. Cuando Shu Jintian caminó hacia donde la nieve estaba nivelada, sus muslos ya se habían hundido. Shu Jintian estaba prácticamente sentado en la nieve, y querer siquiera dar un paso era excepcionalmente difícil.

Shu Jintian estaba increíblemente ansioso, y cuando se giró para ver a Hanyu todavía de pie en su lugar original, se enfureció.

"Hanyu, ¿por qué aun no vienes, ah? ¡Apúrate, no dejes que los niños se congelen!" El tono de Shu Jintian era urgente, la ansiedad en sus ojos era tan clara como el día.

"Está bien, ya voy. Tiantian, sal de ahí. No te enfríes". Hanyu soportó los amargos celos y caminó hacia el lado de Shu Jintian con la cara rígida.

"No te preocupes por mí, date prisa y encuentra a las pequeñas serpientes". Cuando Shu Jintian vio a Shu Hanyu acercarse, instantáneamente sintió como si tuviera un pilar de apoyo y su corazón extremadamente inquieto se estabilizó un poco.

¡Hmph! Estas serpientes eran realmente buenas para provocar problemas; incluso llamaron la atención de Tiantian. Shu Hanyu extendió su lengua bífida y sintió la situación en la nieve por un momento, luego caminó hacia la pequeña serpiente más cercana.

Aunque Hanyu no estaba satisfecho con las pequeñas serpientes, sin importar que, estas culebras bebé, aún no pasaban la etapa de las serpientes jóvenes, por lo que Shu Hanyu todavía responsable y diligentemente las busco.

Shu Hanyu tiene piernas largas, cuerpo fuerte y ágil, así que podía dirigirse rápida y libremente por la nieve de casi un metro de profundidad.