Hombre Bestia Criando a la Fuerza a una Esposa

Capítulo 9: Fuente de fuego

Capítulo 9: Fuente de fuego

Cuando Shu Jintian se despertó, descubrió que había regresado a la cueva de la serpiente. La gran serpiente estaba acurrucada sobre la pila de hierba y estaba enrollada en un disco. Y él estaba justo en el centro del disco de la serpiente, fuertemente rodeado. La cabeza de la serpiente estaba apoyada sobre su hombro, sus ojos verdes nublados, parecía haberse quedado dormido.

Shu Jintian miró a su alrededor y se dio cuenta de que el árbol frutal que había sobre el acantilado ayer sorprendentemente también había sido traído por la gran serpiente. Había varias frutas rojas del tamaño de un huevo creciendo en la parte superior.

*¡Cough cough!*

Los pulmones de Shu Jintian estaban extremadamente doloridos, y pensó para sí mismo que tal vez sus órganos internos habían sido lastimados ayer.

Se movió un poco rígido y Shu Hanyu inmediatamente abrió sus párpados transparentes, mirándolo fríamente.

"Me levanté para comer algo; no tienes ninguna queja contra eso, ¿verdad?"

Cuando Shu Jintian abrió la boca, sintió que le dolían los pulmones, lo que le dificultaba un poco hablar.

Shu Hanyu relajó su vigilancia contra la hembra cuando escuchó esto y aflojó su cuerpo para liberar a la hembra. Luego buscó una postura cómoda para dormir y cansado se quedó dormido.

Shu Jintian salió rápidamente del círculo de la serpiente y discretamente acarició su cuerpo que había sido rodeado por esta. Se agachó junto a la rama de fruta y chasqueó los labios. No había comido nada en los últimos dos días y su cuerpo estaba algo débil y sin fuerzas.

Cogió una fruta completamente roja y le dio un gran bocado. La fruta tenía una gran cantidad de contenido de agua, pero era más agria que dulce. 'Posiblemente fue porque creció en un lugar abundante con agua, por lo que la dulzura se diluyó', pensó Shu Jintian desinteresado.

Shu Hanyu perezosamente echó un vistazo a la hembra. Al ver que la hembra estaba bien, cerró los ojos y descansó. Su zambullida de ayer lo había impactado y lastimado sus órganos internos, así que tenía que descansar bien para recuperarse.

Shu Jintian comió unas cuantas frutas agrias y una oleada de ácido se elevó en su vientre, haciéndole sentir más hambriento. Pero en este maldito lugar, ni siquiera podía salir a buscar comida, por lo que no pudo evitar sentirse un poco abatido.

Recordó haber nacido en una familia importante y rica. Aunque no había recibido mucho amor paternal, había sido criado en condiciones de vida superiores. ¿Cuándo había sufrido penurias y humillaciones?

En su mente, recitaba en silencio: la persona a quien el cielo otorga una gran responsabilidad primero debe sufrir sentimientos amargos, fatigar sus músculos y huesos, morir de hambre hasta que uno sea piel y huesos, sufrir hasta que no tenga nada... Siempre hay un arcoíris después de la tormenta. En ~ Esperando que no se refríe directamente.

Shu Jintian se apoyó contra la pared de la caverna. Hacía un poco de frío con su camisa sin mangas, así que levantó el edredón del suelo y lo envolvió alrededor de él. Buscó un montón de hierba lejos de la gran serpiente y se sentó ahí.

La luz del sol dispersada por el agujero de la caverna se veía muy cálida y formaba un claro contraste con la sombría y fría caverna. Shu Jintian estaba un poco molesto por su comportamiento impetuoso y grosero de antes. Fallo en su escape esta vez y causó que la gran serpiente levantara la guardia contra él, y no sería tan fácil mentirle la próxima vez.