Strangers. (FreenBecky)

Capitulo 12: Consejos.

Disfruten :)

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Algunas veces odiaba un poco mi cabeza, utilizaba altas horas de la noche o madrugada para hacerme pensar y revivir cada momento que pase con la señora Sarocha, haciéndome sentir una vez mas aquella sensación de nervios en mi cuerpo y emoción, como si corriera por varias horas y luego de detenerme sintiera aquel temblor en las piernas. No podría compararlo con algo, era la primera vez que lo sentía, pero odiaba un poco que aquellos pensamientos llegaran en la madrugada, haciendo que me desvele, moviéndome en la cama de un lado a otro, sin lograr conciliar el sueño, solamente haciéndome verla a ella de pie frente a mi. 

El día anterior lo había pasado preparando los planos, finalice en la noche, cuando ya todo el mundo se había ido, Freen vio los planos y solo sonrió, sabiendo que eso era lo que ella quería para su cocina, a pesar que le deje una enorme montaña de papeles con ideas desechadas; mi padre lo ojeo un poco y luego con orgullo, silbo, elogiando mi trabajo, como si supiera que mi futuro era la arquitectura. Por otro lado, Heng parecía observar cada detalle, pasando sus dedos por la tinta del rotulador rojo y luego colocando su mano bajo la barbilla, pensando. Al estar aprobada aquella remodelación, una enorme responsabilidad se poso sobre mi cuerpo, sabia que seria quien la llevara a cabo, pero también sabia que si algo salia mal, seria yo la responsable. 

Sin embargo, la emoción nunca se fue de mi cuerpo, para mi sorpresa Freen me despidió con un abrazo que duro un largo rato, mi hermana solo me miraba con una sonrisa picara y solo podía insultarla por lo bajo, sabiendo que ella nunca haría nada para avergonzarme frente a la señora Sarocha o sus amigos, pero no quitaría que me avergonzaría a mi sola con sus comentarios.

Ya que era la primera vez que experimentaba algo como aquello, necesitaba de la ayuda de personas que conocieran el tema, quería hablarlo con papá, después de todo es alguien que se adapto a la crianza de dos mujeres y conoce todo con respecto a la adolescencia y todo lo que tenga que ver con sentimientos, pero no podía evitar sentirme algo avergonzada cuando pensaba en lo que le iba a decir. A pesar de que nos cuido y enseño bien, no creía que un tema como ese fuera bueno para hablarlo con él. 

Charlotte podría ser un poco bromista al respecto, pero sabia que era la indicada para hablarlo, ella me dijo que esperara al siguiente día, pues era un tema que se tendría que hablar con mucha seriedad en el asunto, donde me daría consejos de que hacer y que no hacer, eso sinceramente, me causaba miedo.

Era un día agotador, tuve que sacar los escombros de la isla de cocina que Freen y yo destruimos, para dar inicio con la remodelacion de la cocina, Seng seguía ayudándome, pero aun así, teniendo conocimiento de su horario, todo el trabajo pesado me toco a mi; pase el día un poco de mal humor y no comprendía el por que. Mi hermana se acerco a mi susurrándome que era porque no había visto a Freen merodeando por el lugar, pero trate de ignorarla. No tenia el humor suficiente para soportar sus bromas el día de hoy. 

Al finalizar nuestra jornada, fue Nam quien apareció durante la noche, despidiéndonos sin dar muchas explicaciones, papá había llevado el auto, así que lo agradecía completamente, me estaba quedando dormida en el asiento cuando estábamos llegando a la casa del señor Heng, sentía mi cuerpo agotado por el trabajo, eso sin mencionar mi estado de animo el día de hoy. Charlotte toma mi brazo, impidiendo que entre a casa, papá no nota aquello así que él pasa de largo, dirigiéndose hasta el interior del lugar; un auto familiar aparece, estacionando a un lado del nuestro. Miro a mi hermana sin entender muy bien que es lo que sucede pero ella esta mas que sonriente y feliz. Para mi sorpresa una alegre Nesa aparece cuando la puerta es abierta, corriendo hasta Charlotte y saltando sobre ella, abrazándola.

- ¡Que bueno es verlas! -Su alegría me recuerda mucho a la de Nam.- ¡Nunca mas conduciré tres horas! -Dice fuertemente.- No siento el trasero. -Ella me abraza, no importándole que estemos sudadas y llenas de polvo.- Vine preparada para nuestra noche. -Ella sujeta mi rostro, y luego choca su mano con mi hermana.- También traje compañía. -Señala el auto, de allí baja una mujer demasiado hermosa para ser real, vestida tan casual que pasaría desapercibida en cualquier lugar, ella sonríe enormemente pero es mi hermana quien corre esta vez, abrazándola.-