Strangers. (FreenBecky)

Capitulo 50: Charlotte.

Disfruten:)

***

Si de algún modo las personas pudieran ver su vida antes de nacer, tal vez muchos no eligieran llegar a este mundo, algunas veces la vida podría ser tan cruel como favorecedora; lamentablemente, tenías que tener mucha suerte para nacer en el lado bueno, o simplemente, debías de trabajar duro para poder obtener la maravilla de vivir bien. Y si eras de los pocos afortunados, nacias en el lado cruel de la vida, donde los golpes iban a ser tan fuertes al punto de destruir tu propio espíritu.

Nadie dice que es fácil vivir, pero algunas veces, cuando se nace en el lado favorecedor, todo está a tu favor, cada acción, cada palabra, cada trabajo. Todo es para ti. Te sientes la persona más afortunada del mundo.

Y más te valía nacer en ese lado bueno del mundo.

Por supuesto que, hay personas que no se arrepienten de lo que son, hay personas que agradecen el lugar en donde nacieron, agradecen el amor que les dan, incluso agradecen lo poco que tienen; no se permiten vencer por los traumas que viven desde pequeños, no se permiten vencer por nadie. Posiblemente son las personas más fuertes que existan, pero a su vez, las más frágiles.

Nadie te asegura una buena vida, pero tú tienes el derecho de elegir como vivirla.

Nadie te asegura tener buenos padres, pero tú tienes el derecho de elegir un buen camino.

Mark siempre tuvo el camino fácil, ser hijo de dos personas entregadas a su trabajo y que le daban todo era su privilegio, sin embargo, se enamoro de la chica equivocada, cometió el error de alejarse de su familia e ir tras ella a otro país, se equivocó al asegurarle que él le daría todo como sus padres se lo dieron a ella.

Era una caprichosa.

Lo único que la movía era el dinero.

Ella se enamoro de él por la herencia que lo esperaba, sin embargo, jamás se imaginó que él renunciaría a todo eso por ella, y por su bebé.

Queriendo obtener el éxito desde sus manos, no por la facilidad de tener a sus padres. Sin embargo, Mark hizo todo lo contrario a lo que la vida demanda. De nacer en el lado favorecedor, decidió cambiar al lado cruel.

Al menos desde que Charlotte tiene memoria, ha sabido que su vida nunca ha sido fácil, ha sabido que la vida de su padre no ha sido fácil, ha sabido muy bien que la mujer la cual dice llamarse su madre nunca los quiso realmente. Era triste, pero era una realidad que ella tuvo que aceptar.

Escuchar como sus padres discutían constantemente por el lugar donde vivían, discusiones sobre la comida, discusiones sobre cómo su hija tenía ciertos problemas para hablar, discusiones porque Malee se negaba a trabajar, incluso discutían por las mismas discusiones pasadas.

Charlotte no tuvo una buena vida, pero se consideraba afortunada.

Afortunada del padre que tenía.

Aquel hombre que sin falta al anochecer, le daba las buenas noches, le leía un cuento, le prometía que pronto sus vidas mejorarían, le daba un beso antes de marcharse de su habitación; aquel hombre que trabajaba todos los días para poder darle todo a su hija. Aquel hombre que a pesar de los insultos que recibía de su esposa, le seguía diciendo lo hermosa que era y lo mucho que la amaba.

Aquel hombre que sin pensarlo, le enseñaba grandes lecciones a su pequeña hija.

A su corta edad, Charlotte pensaba que todas las relaciones entre los adultos eran así, algunas veces en el jardín de niños, les preguntaba a sus amigos si los padres de ellos discutían, y todos parecían estar de acuerdo. Se preguntaba el por qué.