Capítulo 59: Reunión.

10.2K 806 128
                                    

Disfruten:)

***

Antes era algo escéptica en cuanto a las creencias de las personas, no creía en el destino, o en el universo, no creía en un Dios, pensaba en que nada de eso existía ya que si había un Dios, o el destino tenía cosas buenas planeadas para todos nosotros, me preguntaba por qué me habían quitado a mi padre, por que habían alejado tanto a mi madre, o por qué había crecido tan sola en el mundo.

Era escéptica en esas cosas porque a medida que crecía nada parecía ir bien para mí.

Hasta ahora.

Al menos desde que conocí a Becky, me había vuelto una enorme creyente de que el destino realmente existía.

Conocer a una chica joven, con la madurez necesaria para crecer por si misma, con el amor suficiente para saber que era una persona feliz, y con el apoyo necesario para tener seguridad de si misma.

Una chica que me enseñó a amar las cosas que odiaba, una joven que me había enseñado tanto en pocas semanas, alguien que me hizo ver la vida de un modo muy diferente al que ya tenía; con ella aprendí lo que era el amor, y el dolor.

Cuando perdí a Becky, me había encerrado nuevamente en mis pensamientos negativos, me aísle en mi lugar más oscuro de la mente y no permití que nada ni nadie me hiciera cambiar de opinión. Sin embargo, había algo diferente en todo eso.

Había comenzado a adorar la fotografía.

La cámara que ella me había obsequiado había sido mi acompañante más fiel junto con Bonbon, cuando me encontraba sola en mi penthouse tomaba fotografías, cuando salía a caminar, tomaba fotografías, incluso cuando solo miraba la lluvia a través de mi ventana, la utilizaba.

Una cámara que captó mis momentos más tristes, y que, al igual que las pinturas que cree, se habían convertido en mis tesoros más preciados.

Aquella cámara me acompaño a diferentes lados, sin embargo, el tiempo había hecho su trabajo y ella había dado todo de sí, así que ahora, se encontraba en una de las repisas de mi casa, decorando el lugar, como el más preciado regalo que me han dado.

Comenzaba a creer que el destino hace sus maniobras para que todo salga a su favor.

Nuevamente Becky había aparecido en mi vida, como obra del destino, nos habíamos encontrado, y a diferencia de hace siete años, nuestro comienzo no fue del todo agradable, tuvimos encuentros fuertes con demasiado enojo de por medio, pero ahora, todo había cambiado, y lo había hecho para bien.

Sea cual sea la fuerza superior que causó todo esto, se lo agradecía, no había estado tan feliz en toda mi vida, y eso solo lo podía agradecer al ente supremo que volvió a cruzar su camino con el mío.

Me encontraba en una hermosa relación con ella, nuestros días apesar de ser algo secretos, eran los más hermosos que teníamos, disfrutábamos de nuestra compañía, en la soledad de mi habitación ambas nos permitíamos amarnos libremente, diciéndonos todo lo que no pudimos hace tanto tiempo, sin embargo, deseábamos más.

Teníamos el apoyo de las personas que amaba, pero ambas sabíamos, que tarde o temprano debíamos hacerlo público.

Principalmente porque los rumores con Angélica se volvían cada vez más fuertes, al parecer, muchos querían que estuviera con ella, y no con Becky.

Tal vez hace siete años nuestra relación no funcionó porque el destino tenía planeado esto.

Y lo adoraba, nuestra evolución se nota en cada palabra, cada gesto, y cada acción.

Strangers. (FreenBecky)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora